Capitulo 15:"El símbolo del ave (parte 3/4)"

Ambos detenidos se encontraban durmiendo.

Golpee la celda para que despertaran.

—Vamos, despierten— dije en tono alto.

Canek se acercó hacia mí.

—¿Pasó algo?— interrogó.

—Necesito hablar con ellos.

—Se han dormido cuando te fuiste de aquí.

—¿Continuaron discutiendo luego de encerrarlos?

—Más de lo mismo, que uno decía que era una paloma y el otro que era una mariposa y decía que debíamos preguntarle al Señor Bech.

—¿Qué?, ¿el señor Bech?, ¿él del bar?

—Sí, no sé si has llegado a ver al cliente de la barra.

Asentí.

—¿Qué tiene que ver él?

—No lo sé, pero decían que debíamos preguntarle si era una paloma o una mariposa... Ah, solo olvídalo, estaban realmente ebrios.

—¿Cómo conoces al señor Bech?

—Estuvo detenido en la estación, el día que arrestaste a la escritora loca, ¿recuerdas?

—¿Escritora loca?

—Tú la llamaste así.

_______FlashBack______

—¿Conoces a Loa Unsen?— pregunté a Kaein.

—¿Loa?, claro, trabaja en el café, ¿por qué?

—Oye, ¿no le haces una prueba mental antes de contratar a tus empleados?

—¿Por qué debería?— pregunto confundido.

—Días atrás vino a realizar una denuncia sobre un ataque que pasaría a futuro.

—¿De qué hablas, Aryan?

—¡Denuncio algo que ni siquiera había ocurrido y dijo que iba a ocurrir más adelante!

Él se silenció.

—¿Loa hizo eso?— se extrañó— Ah, debe ser una de sus novelas nuevas, ella es escritora.

—¿Qué?

—Aunque nunca había llegado tan lejos, tal vez quería ver la reacción real de un policía.

—Definitivamente, tú tampoco estás cuerdo, no sé qué de qué me quejo por tus empleados. De todos modos, deberías sugerirle que vea a un profesional y de paso tú puedes ir con ella.

Colgué el teléfono.

—¿Por qué está detenida?— pregunto Canek.

Suspire molesto.

—Otro ciudadano demente, solo es una escritora loca.

______FinFlashBack______

—Oye, su nombre es Loa, ¿de acuerdo?— regañé.

—¡Pero tú lo dijiste!— se defendió.

—Olvídalo, ¿estuvieron detenidos el mismo día?

Canek asintió.

—¿Por qué habían detenido al señor Bech?

—Se había excedido de copas y causó alboroto en la vía pública, pero, ¿qué pasó con él?

—Luego te diré, pero primero debemos encontrarlo, iré al bar a buscarlo.

Canek asintió inseguro.

—Te llamaré si lo encuentro— avisó.

—Gracias.

Me subí al coche y me dirigí al bar.

—Señor Gatius, ¿dónde está el señor Bech?— pregunte rápidamente al ingresar al bar.

—¿Sucedió algo?— pregunto él.

—Necesito encontrarlo, por favor.

—Se fue de aquí unos momentos después de que usted se había marchado.

—¿A dónde?

—¿Cómo voy a saberlo?, solo se levantó y se fue.

—¿Con qué frecuencia viene aquí?

—Hablemos afuera, los clientes nos observan— pidió Gatius.

Nos dirigimos fuera del bar.

—¿Por qué lo busca?

Suspire frustrado.

—Señor Gatius, solo dígame por favor.

—Solo dijo que estaba deprimido porque su única hija iba a casarse y que debía comprar un traje.

—¿Una boda?— repetí atónito.

—Sí, su hija va a casarse este fin de semana.

Me tapé la boca con ambas manos.

—Por casualidad, ¿sabe si el señor Bech llevaba un tatuaje en su mano izquierda?

—¡Es por eso que estaban peleando!— dijo en referencia a los detenidos.

—¿Qué tenía tatuado?

Él pensó unos momentos y luego dijo.

—Una paloma, creo.

—Gracias— dije rápidamente y salí de allí.

Antes de dirigirse a la estación, me detuve a llamar a Loa.

Atendió luego de unos cuantos tipidos.

—Loa, he descubierto algo, pero no sé qué tan cierto sea, ¿recuerdas el día que has sido detenida?

—Claro, fue tu culpa— reclamó.

—No es el punto, ¿recuerdas a la persona que estaba junto a ti?

—¿En la celda de al lado?

—Sí.

—Sí, lo habían detenido por estar borracho y continuaba llamándome Alya.

—¿Alya?

—Sí, pero ¿qué hay con él?

—Loa, necesito que recuerdes todo lo que puedas sobre lo que pudo haber dicho. Él es el hombre que aparece en tú sueños, el Señor Bech tiene tatuado una paloma en su mano izquierda.

—Lo encontraste— dijo Loa con alivio.

—Sí, pero hay algo más, ¿qué tan bien conocías a los involucrados en tus sueños anteriores?, ¿lo habías conocido antes?

Loa se silenció.

—No exactamente, al menos no directamente. Según Narel, aquella pareja del primer sueño asistía al café, pero nunca los había visto, aunque es extraño, pero tal vez en una ocasión viaje en el mismo bus que el joven, al menos eso me pareció. A Mila la había visto por primera vez en la parada de bus, aunque no había su rostro hasta que la vi pasar por la boutique de vestidos de novias y por el shock no lo recordaba, pero Keb iba justo detrás de ella.

—¿El día que Mila pasó por la boutique?

—Sí. No estoy segura respecto a Cas, pero en el café solían poner su programa como acompañamiento, aunque nunca le había prestado atención y ya sabes lo del hombre del último sueño, si es que realmente es él, pero, ¿por qué preguntas?

—¿Sabes lo que significa?

—No realmente.

—Loa, ¡te relacionas con ellos de una forma indirecta!

—Nunca lo había pensado de esa forma— respondió con asombro— Eso complica más las cosas— su tono se tornó angustiado.

—Loa, no te estreses demasiado, podemos evitarlo— dije en referencia al choque— Solo que no sé qué tan fácil sea, no te preocupes, te mantendré al tanto.

—¿Vendrás a cenar?

—Ahí estaré.

Colgué el teléfono y me dirigí hacia la estación.

—¿Lo has encontrado?— preguntó Canek al verme.

—No, supongo que tampoco tú.