Pobre yo

 Zaida

No quepo en este lugar de la felicidad, voy a los brazos de mi novio y lo beso

-no sé qué haría sin ti- le digo volviéndolo a besar, el solo me sonríe recordándome su humildad -te amo- le digo con los ojos al borde del llanto, paso a los brazos de mis padres, los padres de mis amigas y finalmente a mis amigas con las cuales doy salticos grupales destapando un champaña, mi novio me abraza por atrás y

-tiene cinco cubículos, todos adecuados para cualquier proceso odontológico, por si quieres contratarlas como tus empleadas-

Mis amigas tratan de forzar una risa, él no es así pero con este comentario pareciera que su deseo es ser despectivo con las chicas, se va y lo veo charlar con los invitados y con los encargados de la recepción que me tenía preparada. Pasadas las horas y luego de haberse retirado la mayoría de los invitados entre ellos mis amigas, ya que tenían su celebración pausada para pasar este tiempo conmigo, me acerco a Eliam abrazándolo

-te amo- le repito -no sé como pagarte esto, es demasiado- le digo extasiada entre sus brazos por la seguridad que me transmite

-claro que tienes como pagarme, múdate conmigo-

Ok, caigo en picada, aun no estoy lista para este paso, sé que él ha sido muy lindo conmigo, pero uff, no me están sacando de la casa de mis padres y creo que es un paso que hay que dar a conciencia

-¿y?-

-no sé que decir, estoy sin palabras-

-di que sí-

Asiento -pero déjame pensarlo por favor, dame unos días-

-he analizado todos los pros para ti, viviendo conmigo no tendrás que perder tiempo en el tapón de pintura o en el tapón del 9, estarás en el centro de la ciudad, estarás a unos 10 minutos de este lugar y sobre todo amanecerás un día sí y otro también al lado de este papi chulo que solo tiene ojos para ti-

Me besa – tú me tienes Aficio- me dice – no sé que fue lo que me diste a beber-

-creo que te di agua de panti- sonrío besándolo más

-tres días, solo tres días tienes para darme repuesta-

Asiento, sin tomar en consideración lo literal que habían sido sus palabras, sin tomar en consideración que hay cadenas que nos autoimponemos caminado a oscuras por lugares que aparentan ser de felicidad.

pobre YO