Darren

Últimamente me eh sentido cansado, tengo la cabeza llena de pensamientos que no me dejan ni dormir, como quisiera olvidar todo, perder la memoria en un instante dejar esta carga que siento, si tan solo…

Estaba perdido en mis pensamientos cuando entro Jade haciendo que salga a la realidad.

-¿Todo bien?-Pregunto

-Sí, todo bien, ¿pasa algo? ¿Necesitas algo?- contesté

-Sí, de hecho necesito que firmes unos papeles para cerrar ya el contrato y empiece la construcción...- No estaba escuchando lo que me decía, se me vino una idea que la tomaría sin pensarlo dos veces, me tomaría un tiempo y me relajaría, lejos del trabajo y de mamá, sobre todo de mi madre.

-¿Escuchas lo que te digo?-Pregunto confundido mi mejor amigo y mano derecha de la empresa.

-De hecho sí, necesito que hoy mismo me entregues cualquier contrato importante  pendiente listo, me tomare un descanso y necesito dejar todo al día- Conteste mientras lo miraba firmemente ante mi decisión sin embargo él se veía confundido ante lo que terminaba de decir.

-¿De qué hablas Darrem? ¿Tú vas a tomar un descanso? ¿Estás bien?, nunca has dejado la empresa a cargo de nadie y ni siquiera eres capaz de separarte de tus responsabilidades 24 horas ¿qué bicho te pico?- contesto muy sorprendido.

-Pues necesito espacio, con mi madre encima de mí y con  su locura de la boda, no quiero ni verla y últimamente anda frecuentando mucho por aquí, no te preocupes, estarás a cargo confió mucho en ti y si se trata de algo importante puedes contactarme y lo arreglaremos por video llamada o algo así ¿Esta bien?-Estaba seguro de lo que decía, necesitaba tiempo, tiempo para pensar y relajarme.

-Deberías hablar con tu madre y arreglar las cosas, no puedes vivir siempre así y lo sabes- contesto él, inseguro de lo que acaba de decir, sabe que es un tema delicado para mí.

-Sabes que no me gusta que hables de esto, es un asunto familiar y solo yo sé si podre o no vivir así - conteste algo molesto, lo último que quiero es reproches de mi relación con mi madre.

Durante el resto del día me dedique a terminar todos los pendientes, me reuní con nuevos inversionistas y deje todo listo, los trabajos más pequeños los terminaría en la cabaña.

Tenía planeado ir a pasar unos días en una cabaña que teníamos en la playa, no le diría a nadie en donde me iba a quedar, seguro pensaran que me fui de viaje fuera del país y así nadie ira interrumpir mis pequeñas vacaciones sobre todo mi hermana y mi madre.

Llegue algo cansado, fue un largo viaje por carretera, así que tomaría un baño e iría directo a la cama a descansar.

Salí de la ducha, iba a vestirme pero escuche un pequeño ruido afuera de la habitación, me dirigía afuera para ver que había sido, pero de pronto la puerta del cuarto se abrió y tras ella estaba una mujer que nunca había visto.

-¿Tú quién eres?- Lanzo, en forma de reclamo, quien era esta mujer y  porque me estaba reclamando en mi propia casa.

-No! ¿Tú quién eres?- Le respondí algo molesto ante su descaro.