CAPÍTULO 32

- JAKE -

Nuestros celulares comenzaron a sonar cuando estuvimos dentro del auto, a punto de partir. El de Dylan mostraba el nombre de su padre, claramente colgó al segundo sin siquiera querer pensar en lo que pasaría después.

El mío, en cambio, tenía el nombre de Megan. Contesté rápidamente queriendo saber ansioso las nuevas noticias gracias a la investigación de mi padre.

— Chicos, teníamos razón, el cuerpo de Fanny no está — Dijo ella en cuanto la puse en altavoz — Tu padre está furioso, ahora está tratando de llamar a no se quién para pedir la orden del juez de reabrir el caso.

Nos miramos con Dylan, lo habíamos logrado.

— Eso es genial — Dije, rápidamente mi sonrisa se borró — Alto, si el cuerpo no está ahí… ¿Dónde está?

Comencé a sentir un nudo en mi estómago.

— No sabemos, investigarán eso también — Meg pareció ser interrumpida, contestó algo que no entendimos y volvió a nosotros — Tu padre me llevará hasta casa, hablaremos ahí.

— No, aguarda — Habló Dyl — Tenemos información también, ve a la jefatura con él y nosotros los encontraremos allí. Tenemos que hablar.

— ¿En qué se metieron esta vez?

Dylan sonrió de lado.

— En nada que tú no te hayas metido, no te preocupes. Nos vemos allí.

Colgué y rápidamente dimos la vuelta a la manzana para volver de donde veníamos. Solo que esta vez nos aseguramos de hacer el camino lejos de la zona céntrica para no volver a tener más problemas y evitarnos también el tráfico.

Tuvimos que esperar sentados en el capó del auto a que mi padre llegara, el cementerio estaba más lejos que nuestra casa. Meg salió apresurada del auto y caminó con pasos apresurados hasta nosotros. Para nuestra sorpresa, nos abrazó a ambos colgándose de nuestro cuello. Sentí como su delgado cuerpo temblaba, estaba demasiado tensa.

Cuando se apartó sus ojos estaban vidriosos.

— Lo siento, creo que fue demasiado saberlo… Una cosa es sospecharlo, pero otra cosa totalmente diferente es… Maldición.

Bajó su vista y corrió un par de lágrimas que derramó sin querer. Mi pecho se apretujó. Ella tenía razón, a veces no quería pensar en todo lo que estaba pasando para no volverme loco pero era demasiado. El mismísimo cuerpo de Fanny estaba desaparecido y que ella tenga que afrontar estas dificultades siendo que no había hecho nada malo… Era totalmente injusto.

Dylan volvió a abrazarla, esta vez con fuerza. Me aparté dos pasos para dejarles espacio. No podía imaginar lo que significaba todo esto para ella siendo que había conocido a Fanny estando viva, con pulso.

Mi padre se acercó y miró a la pareja para posar su vista en mí. Me observó queriendo descifrar cómo me sentía al respecto, puso una de sus manos en el hombro y tuve que apretar los puños y hacer sonar mi garganta para ahogar el nudo y que mi voz salga con normalidad.

— Estoy bien — Le aseguré, no tan seguro de mí mismo.

Él asintió y sonrió, estaba cansado y preocupado. Me acercó hacia él y me abrazó, golpeando levemente mi espalda. Sentí que el mundo se me venía abajo.

— Esto que está pasando es una locura Jaky — Me dijo, se apartó y posó su mano en mi mejilla — Perdón por no haberles creído. Estoy orgulloso de ti, hijo.

Tuve que mirar hacia otro lado y parpadear, no quería llorar frente a él ni a nadie. Pero mientras más me concentraba en eso más ganas me daban, más mis pulmones dejaban de funcionar.

— Tenemos que contarte algo que podría ser importante — Opté por seguir con otro asunto — Hay que hablar, pero en privado.

Papá asintió y comenzó a dirigirse hacia la jefatura, lo seguí mientras miraba sobre mi hombro a Meg y Dyl que comenzaban a separarse. Dylan acariciaba uno de sus brazos mientras que la tenía rodeada por la cintura, parecía estar diciéndole algo al oído porque ella no hacía más que asentir y tratar de normalizar su respiración.

Fue una bonita escena, con la luz del sol iluminando sus figuras. Me alegraba por mis amigos, que hayan encontrado en el otro alguien especial. Tarde o temprano darían el paso oficial, tal vez cuando todo esto mejore.

Ellos nos siguieron algo rezagados, Dylan no le soltaba la mano a Megan. Llegamos a la oficina de papá y nos sentamos, papá le dio un vaso de agua mineral a Meg que parecía estar más tranquila ahora.

Comenzamos a relatarle lo sucedido esta tarde. Dylan inclusive le pidió hablar con sus padres, después de todo usamos el auto por una buena causa. Papá asintió y suspiró como si se viera venir la tercera guerra mundial en nuestra casa debido a lo ocurrido. Yo también podía verla.

Papá no se podía creer lo que le estábamos contando acerca de su compañero y su hijo no registrado. Incluso Megan hizo una cara incrédula que todos disfrutamos, no todos los días ella se sorprendía de esta manera, siempre había tenido la información por adelantado o sabía ocultar muy bien sus expresiones.

Ella empezó a sacar conclusiones, pequeñas cosas que había ocurrido con anterioridad que ahora las miraba con otros ojos. Se las contó a papá mientras este parecía enfurecerse más y más.

— Tom también había estado en el hospital la noche del accidente, inclusive desapareció por un rato largo — Comentó mi padre — No me sorprendería saber que estaba por allí con Richard.

— La pregunta acá es ¿qué necesita él de su Richard? ¿Y por qué ocultó tanto lo de Fanny? — Preguntó Dylan.

— No tiene sentido que él oculte su muerte y ayude a Courtney — Alegó Megan negando con su cabeza — Hay algo que nos estamos pasando por alto.

— Sí, pero lo sabremos pronto — Papá se levantó de su asiento y nos miró a todos — Es hora de que todos ustedes se relajen un poco, yo me ocuparé de lo que se viene. Prometo mantenerlos informados.

— Pero… — Comencé a quejarme.

— Jake, de verdad necesitan distanciarse de esto — Él miró de reojo a Megan — Los tres se lo merecen. Han hecho lo más que pudieron hasta ahora y se los agradezco, pero son solo adolescentes y este tipo de asuntos no deberían llegar a ustedes. Estas preocupaciones son de mayores y de oficiales al mando.