Después de aquel descubrimiento, la segunda semana de vacaciones pasó muy rápida. Pronto los alumnos estaban de regreso en el colegio y con ellos, un Skoll listo para actualizar a sus amigos de todo lo sucedido.
El pelinegro no perdió tiempo, pues la misma noche que sus amigos llegaron, él se encargó de ponerlos al tanto de lo que sucedía.
Hassan, era quien más atención tenía en todo lo que su amigo le contaba, después de todo, el descubrir que podrían averiguar dónde estaba su hermana, usando los trozos del espejo, era un avance enorme.
Los tres amigos prometieron que no hablarían nada al respecto de la logia, Hassan era quien además de prometerlo, agradecía a su amigo por contarle la verdad.
Las clases iniciaron de nuevo y con ello los deberes. Hassan, Will y Driss se mantenían al pendiente de Skoll a la espera de nuevas visiones. Pero la triste verdad era que, por alguna razón, el chico no había vuelto a tener visiones ni dolor de cabeza. Aquel repentino y largo silencio estaba poniendo los pelos de puntas a todos
Aunque más a Hassan quien constantemente preguntaba a su amigo si ya veía algo. Skoll se sentía algo presionado por el hecho de sentirse en cierto grado responsable de las visiones.
Skoll no lograba entender de que dependía que le doliera la cabeza o viera las visiones, después de todo estas siempre fueron esporádicas. Aun así, ver el rostro triste de su amigo cada que decía que no, era algo decepcionante.
Sumando a todo eso, el espejo que tenían ya no mostraba nada. Skoll junto a Hassan intentaron en varias ocasiones volver a replicar lo sucedido y poder ver a su hermanita. Pero ahora en cambio solo veían una oscuridad insondable.
Skoll suponía que los muquis mantenían el espejo encerrado en el cofre, razón por la que lo único que lograban ver era oscuridad. Con las visiones detenidas y el espejo en oscuridad, las oportunidades de rescate de la niña parecían escazas.
El tiempo pasaba y los runas tampoco parecían dar soluciones. Si bien hicieron intervenciones a grupos pequeños de muquis aliados a la revuelta, estos no tenían información acerca del secuestro. La línea de investigación también estaba detenida.
— No puede ser que no podamos hacer nada — comentaba cabizbajo Hassan sentado en un sillón individual de la sala común de Astroemelia
— Lo siento Hassan — por tercera vez en el día Skoll se disculpaba con su amigo
— No es tu culpa Skoll, solo…solo creo que debe haber alguna forma de encontrarla.
— ¿No pueden rastrearla? — Preguntó Will
— No, durante vacaciones los runas intentaron rastrearla usando su energía mágica, pero es como si la tuvieran encerrada en algún lugar donde bloquea toda magia
Las semanas habían pasado rápidas y sin novedades, incluso los avances que tenían de a investigación del espejo estaban detenidos por falta de tiempo y de información.
La primavera pronto llego y se instauro en el colegio, y junto con ello llegaban las responsabilidades de temporada.
Aquel año no solo se haría un ritual por Halloween como ya era costumbre cada año, sino que los profesores decidieron que se haría una pequeña fiesta para subir los ánimos del alumnado.
Así que las preparaciones ahora comenzaban con mayor anticipación. Pronto desde inicio de mes, las decoraciones naranjas fueron haciendo su aparición. Los alumnos de Solanum fueron los principales protagonistas al proveer las calabazas no solo para los pasteles sino también para la decoración.
Pronto el ambiente festivo se sentía en todo el colegio. A pesar de que faltaba al menos tres semanas para la celebración, las ansias y la algarabía se iban sintiendo en todos, menos en los cuatro amigos que lucían derrotados.
— Mi madre enfermó de tanta preocupación
Comentaba Hassan en voz baja mientras ordenaban los leños en pilas para guardar en el almacén de su Ayllu. Aquella semana, les había tocado a los varones del Ayllu reponer el almacén de leños a usarse en las chimeneas.
— Mi padre ahora lleva el solo la investigación, y yo, aquí ordenando leños
Se notaba su frustración, Skoll incluso diría que el chico estaba más delgado desde lo sucedido. Ninguno de los amigos ya sabía cómo reconfortar al chico, así que solo lo acompañaban en silencio.
— Desearía poder solo no sé, solucionar todo con algún hechizo — afirmó el chico quien era el único que se mantenía hablando — Al parecer la magia no puede solucionar todo con solo agitar la suntur.
Los chicos miraban a su amigo mientras acomodaban los leños secos. Distraídos en una labor que al menos impedía que sobre pensaran todo. De pronto, una de las chicas apareció en el lugar.
— Skoll — dijo la joven quien era una compañera de curso — El profesor Urso me mandó llamarlos, dice que quiere verlos, está en su oficina.
Sus compañeros que compartían labores con ellos, los miraron como si hubiesen cometido alguna travesura. La llamada de un profesor usualmente era por algún problema o travesura, pero ellos sabían que quizá podría significar algo más.
Sin perder el tiempo, los cuatro chicos dejaron sus labores y fueron en búsqueda del profesor. En ese momento olvidaron el cansancio inicial y emprendieron la carrera hacia la oficina del profesor Urso.
Al llegar al aula de duelo, detuvieron un poco sus pasos y ordenadamente se aproximaron al fondo de la estancia, donde una puerta cerrada los separaba de la oficina.
Tocaron un par de veces antes de entrar. El profesor los recibió sentado detrás de su escritorio. Tenía frente a él un libro con varias marcaciones. Los cuatro amigos cerraron la puerta luego de entrar.
— Buen día profesor
— Hola muchachos, espero no haberles interrumpido en sus labores. Pero creí que era necesario informarles de esto. — el hombre se tomó una pausa y les tengo un reporte de los runas
— Ese reporte — continuó — fue tomado a un mago que trabajaba en las minas, el hombre fue el único sobreviviente del ataque de los muquis y señala que dentro de la mina donde trabajaba, de pronto no pudo usar su magia
#2180 en Fantasía
#439 en Magia
amor juvenil romace, magia accion aventura fantasia, magia brujos escobas
Editado: 10.12.2024