#Cuatro

JORDAN SULLIVAN.
 

Veo como Vannesa se pasa por la puerta, para no volver.

Miro a Tobías.

— ¿Por qué hiciste eso? Ahora no me va a querer ver más por tu culpa.

— No me lo agradezcas.

Yo lo mató.

¿Que no le agradezca?

Claro que no le voy a agradecer.

— Confirmado, sos un imbécil.

— En vez de insultarme tendrías que estar feliz de que la saqué de tu vida.

— ¿Feliz? Hechaste a perder la única oportunidad que tenía de acercarme a ella.

— Que te dijimos no te conviene, hasta ella misma lo sabe.

— Si ella se cree menos que yo es por la culpa de todos que la hacen sentir así, no me importa lo que digan ustedes o hasta que ella me diga que me aleje, que les que de claro no lo voy a hacer.

— No me voy a alejar de ella.

— Entendelo es por tu bien, te va a lastimar se lo que te digo.

— ¡¿Como podés saberlo?! ¡Si ni siquiera intentas conocerla!

— ¡Lo intente y todo acabo mal! ¡Me enamore de ella y lo único que hizo fue romperme el corazón!

— ¿Que?

¿Tobías se enamoro de Vannesa?

— Lo que escuchas, me enamore de ella pero luego se me rompió el corazón cuando empezó a hacer eso.

— Al menos la escuchaste a ella para saber por qué hace eso.

— No necesitaba escuchar nada con lo que oía me era suficiente, desearía que para vos también lo fuera.

Sin más que decir subió las escaleras dejándome solo en la sala de estar.

¿Mi hermano y Vannesa tuvieron algo?

¿Será por eso que ella cree que no es suficiente para mi?

Igual no me importa, yo le voy a demostrar que es más que suficiente para mi.

Tanto, que dudo que yo sea suficiente para ella.

















 

(...)
 

Una semana.

Ese fue le tiempo en el que Vannesa se alejo de mi.

Cada vez que veía que iba hacia ella, daba la vuelta y se alejaba.

Y todo por la culpa de Tobías.

Con él desde que discutimos que no nos hablamos.

Se que él sufrió pero también se que Vannesa seguro tenía algún motivo por el cual hacer eso.

Y creo que el hospital tiene algo que ver con todo esto.

Voy a descubrir que pasó en la vida de Vannesa.

Mi última clase acaba de terminar y ahora estoy llendo a la salida.

A lo lejos veo a Vannesa de espalda, como no puede verme me le acercó por detrás.

Le tocó el hombro, se da la vuelta ni bien me ve trata de huir pero la me interpongo en su camino.

— Perdón. —Es lo primero que logré articular.

Ella no dice nada solo me ve con una expresión de confuncion en su rostro.

— Por como te trato Tobías la otra vez.

— No pasa nada, tiene derecho a no querer verme.

— Si, claro, pero tenía derecho de echarte.

— En serio no pasa nada.

Trato de irse pero no la deje.

— ¿Vas a seguir evitando me?

— Ya te lo dije, es mejor así.

Mantiene la mirada baja en todo momento.

— ¿Para quien?

— Para ambos.

— Te dije que no te iba a juzgar, solo quiero conocerte, déjame hacerlo.

Le levanto el rostro con la mano sobre su mentóny ahí la mantengo.

— Solo eso te pido.

— Déjame conocerte.

Mantuvo su mirada en mi por unos segundos.

Aunque me diga que no, no pienso alejarme de ella.

Al ver que no contesto bajo la cabeza y la suelto.

— Está bien.

Mi mirada vuelve a ella.

— ¿Que?

— Dije que está bien, te voy a dejar conocerme, pero si sentís algo más por mi que una amistad, prométeme que te vas a alejar de mi.

No contesto.

No quiero hacerlo.

— Prometelo, si no te alejas de mi en este preciso momento.

Al parecer no me queda de otra.

— Está bien, lo prometo.