Ya solo eran días nada más.
Preguntándome por que me ilusione así contigo.
Estaba parado en medio de mi habitación, mirando a la nada, sintiéndome nada.
El mundo a mis pies estaba girando, me estaba mareando.
Lágrimas manchando mi camisa, manchando la alfombra en donde estaba parado.
La soga al frente mio balanceandose por la brisa que entraba de la ventana abierta.
A los lejos escuchaba ecos de gritos, no sabia si provenían de atras de la puerta de mi habitación o eran de mi propia mente.
Solo me subí a la silla junto mio, agarré la soga y la coloqué alrededor de mi cuello.
Cuando la silla ya no estaba abajo mío, y lo unico que senti fue el vacio bajo mis pies, la vista empezó a nublarse, el aire empezaba a salir de mi cuerpo pero no regresaba.
Solo en ese momento comencé a sentir esa paz que solo la muerte te puede dar...
Lo último que recuerdo fueron unas manos sobre mi cuerpo...