Querido Santa

Capítulo 9

Llego al hotel y luego de registrarme subo a la habitación una suite que aunque hermosa se me hace demasiado para solo una noche

Dejo el bolso sobre uno de los muebles, me quito los zapatos y la ropa quedando en ropa interior y me recuesto sobre la cama

Repaso los acontecimientos del día de hoy, no puedo creer que luego de tanto tiempo hayamos coincidido Michael y yo

Mis emociones están revueltas, por un lado, saber lo que paso me permite comprender algunas cosas; sin embargo, hay otras que me resultan tristes por la manera en que nuestra relación termino.

¡Lo amo!, esa es mi verdad, jamás, deje de hacerlo y al estar frente a frente, pude confirmarlo, dice amarme, pero más allá de lo que pudo haber pasado, decidió vivir todo eso sin mí, mientras yo anhele vivirlo todo con él, no habla eso per se de en donde estamos con nuestros sentimientos

Suspiro porque la verdad me fastidia recordar que dejarme era su forma de “protegerme”, como si lo necesitara, ¿En serio pensó que me hubiera alejado de lado por los problemas que afrontaba?, ¡entonces no me conoció nunca!

En fin, creo que cada quien actúa con las herramientas que posee, pero hay una verdad que ninguno de los dos puede ignorar y es que nuestras vidas están unidas por ese ser maravilloso que es mi Clara, quiero ir despacio porque sé que lo siente mi hija, pero quiero ver cómo responde Michael a la situación, me asusta pensar que si a futuro algo se complica se irá igual

Sonrío de solo imaginar su carita cuando conozca finalmente a su papá, sé que lo desea con muchas ganas, aunque no diga nada, por lo que más allá de lo que siento, ella siempre estará primero para mí, así que esta noche es importante dejar todo claro

Decido pedir algo ligero para almorzar aunque ya son las tres de la tarde y liego de comer caigo rendida

Dos horas después me despierto algo sobresaltada al pensar que me quede dormida sin darme cuenta, por suerte son las cinco de la tarde. Acorde con Michael que me recogerá a las siete de la noche

Entro al baño y veo la hermosa bañera, así que decido aprovecharla, la pongo a llenar y escojo entre la gran variedad de sales que “por coincidencia” son mis favoritas, es raro darme un baño sin mi chiquita más aprovecharé este tiempo

Lavo mi cabello y me pongo una mascarilla que encontré, mientras tallo mi cuerpo, aprovecho y me depilo, si sé lo que parece, pero me gusta cuidarme a pesar de que mi vida sexual es nula

No me malentiendan, no soy ninguna puritana, disfruto el sexo, me embaracé joven, no solo porque las probabilidades estadísticas de fallos de los anticonceptivos, sino que éramos muy activos, me sonrojo y sonrío recordándonos, esos tiempos donde cualquier lugar u hora encendía la pasión al estar juntos

Creo que esa manera que tenía Michael de satisfacerme en todos los sentidos fue lo que hizo que abrirme a otra relación, no fuese una opción para mí, suspiro ya que el rumbo de mis pensamientos pareciera ir en sentido contrario a lo intento sea mi estado esta noche

Decido que ya fue suficiente, así que abro la regadera para enjuagar mi cuerpo y quitar la mascarilla, me seco y pongo una bata de baño

Decido solo sacar la humedad y dejarlo al natural, así que mis ondas se hacen presente, lo llevo muy largo, casi llega mi cintura, pero me gusta, me da un look salvaje e informal, por lo que satisfecha, pongo unas gotas de aceite de argán para darle más suavidad y brillo además de que huele delicioso

Me gusta usar lencería sexy, siempre ha sido así, por lo que hoy no es excepción, aunque mi conciencia señala ¿a quién quieres engañar? ¡Te encantaría mostrársela y que te la quite!, niego y respiro profundo acallando esos pensamientos

No tengo muchas opciones de ropa para decidir, me traje un vestido camisero color borgoña que además de cómodo me hace sentir elegante en complemento unas sandalias planas doradas que le dan un toque elegante

Solo pongo un poco de base mate con bloqueador, polvo para sellar, mascara de pestañas y brillo, me gusta el reflejo que me devuelve el espejo, además de sentirme cómoda.

Llamo a mis padres para saber cómo está todo y saludar a mi rayito de luz, así que al tercer repique mamá atiende

-¡Hola mamá! ¿Cómo está todo? Hablamos unos minutos sobre como estuvo mi viaje y qué tal su día y escucho a Clara preguntar —¿es mi mami? – Si mi amor, le responde mi madre

-¡Pásamela, pásamela, por favorcito abuela! – le escucho decir, mientras explica necesita decirme algo urgente- ya te la paso déjame despedirme-

-¡Te paso a tu hija, que tengas una buena noche mi amor! – dice mi madre y le pasa el teléfono

-¡Hola mi rayito de luz!-le digo, viendo su carita iluminada pareciera que tiene una gran noticia que darme

-¡Hola mami!, quería contarte que Santa ya se llevó la carta de la casa de la abuela, así que debe de haberse llevado la de nuestra casa también- dice aplaudiendo con sus manitas, al sonreír me doy cuenta de que se le cayó un diente- y aunque es algo normal no puedo evitar sentir algo de tristeza, puesto que he estado unto a ella en todas sus primeras veces

-Si lo tenía algo flojo, pensé que iba a tardar más, pero el abuelo me ayudo a sacarlo con un hilo, el ratón Pérez dejo un billete de 50 $ bajo mi almohada- enseñándome su nueva sonrisa desdentada pero hermosa, que además me hace consciente de que crece

-¿Y qué piensas hacer con tanto dinero?-indago queriendo saber- Es una sorpresa mami- sonríe con esa mirada pícara que me dice que en algo anda. Luego de responder a las muchas preguntas de Clara, colgamos recordándole que ya mañana estaré de regreso

Un mensaje de Michael me llega pidiéndome que vaya bajando, que está cerca. No puedo evitarlo, mi corazón traidor se acelera y tengo que reconocer, que no soy tan fuerte o peor aún no quiero serlo. ¡Salgo convencida de fluir y dejar que pase lo que tenga que pasar!




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