"¡quiero un gordito para llevar!"

Una sesión de fotos "accidentada"

—¡Joey! ¡Cielito! ¡El desayuno está listo!

Esa mañana Joe amaneció con el ánimo por el piso. No durmió bien y se sentía cansado y nervioso porque debía estrenarse como jefe de la campaña de "Magnet", aunque su autoestima había caído en el subsuelo luego del inminente rechazo de su ex la noche anterior.

Nuestro gordito estaba frente al espejo odiándose una vez más. Se probaba uno y otro traje, sentía que NINGUNO le quedaba bien y ya llevaba un buen rato perdido en eso. Al ver la hora que marcaba su reloj digital sobre la mesa de noche, se angustió y volvió a tomar el traje que usó la noche anterior.

—¡Tendré que comprarme ropa nueva o usar faja de nuevo! Esta barriga va acabar con mi vida...

Luego de vestirse, entró a la cocina apresurado. Su madre sonrió al verlo tan apuesto con su traje formal.

—¡Me encanta como te ves en tu traje! Me recuerda cuando hiciste la primera comunión.

—¡Ay mamá! ¡Tenía doce años!

—¡Y sigues siendo tan adorable! Mira, bebé, te hice un desayuno muy especial...

Emocionado Joe se acercó a la mesa dispuesto a comerse todo lo que le gustaba sin ninguna restricción, ya que luego de que tenía claro que no tenía ninguna oportunidad con Aarón, su dieta era ya algo inútil. Pero casi se echa a llorar cuando en vez de un delicioso súper desayuno, su mami al fin le había hecho algo "diferente".

—¡Mamá! ¿Qué es esto?

—Bueno, te estuviste quejando de que no te hacía nada de dieta, así que ayer, con ayuda de la vecina, me metí en internet y saqué varias recetas de desayunos bajos en calorías. ¡Espero que te guste!

Joe se sentó frente a un plato de avena mezclada con otros cereales, media toronja y un sándwich integral con lechuga, jamón de pavo y tomate. No quiso hacerle un desaire a su adorable progenitora, así que le agradeció y se comió su comida. Frente a él, su padre disfrutaba de un plato enorme de huevos rancheros con tocino y pan francés.

—¡Oye, Joey! ¿En serio vas aguantar con eso hasta el mediodía? ¿O es que ahora quieres ser una Top Model?

—Supongo que le hará bien a mi salud.

Luego de terminar su desayuno, Joe les dio un beso a su mamá y a su papá, y se fue al trabajo. Se acomodó como pudo tras el volante de su pequeño auto y salió con rumbo a la autopista 18.

Llegó a la compañía sobre la hora. Por lo que le tocó hacer fila para poder tomar el ascensor. Su amigo Marvin estaba casi pegado de la pared por lo repleto que estaba el lugar, La gente al ver a Joe entrar pusieron muy mala cara, obvio que si ya estaban incómodos, con la entrada del "gordo" estarían mucho más apretados.

—Lo siento...disculpe...

—¡Oiga! ¡Tenga más cuidado! —Le gritó una señora mientras Joe intentaba acomodarse dentro del ascensor.

Joe se arrinconó muy apenado. Cuando vio que llegaban al piso en el que necesitaba bajarse, volvió a pasar por el mismo tormento. Las personas se quejaban entre dientes de él hasta que pudo salir. El pobre Marvin apenas sacó la mano con el pulgar arriba para desearle suerte en su día.

Corrió hasta el espacio donde debía realizarse la sección de fotos de Ian. Pasó entre los guardarropas y los sets de maquillaje hasta llegar al estudio donde ya estaba todo preparado para iniciar con el Foto-Show.

El director de fotografía al verlo acercarse, miró la hora en su reloj muy molesto. Pero tuvo que disimular dado que Joe era quien dirigía la campaña.

—¿Usted es...el señor Smith, supongo?

—Si...sí. Disculpe el retraso, es que...tuve algunos inconvenientes. Pero estamos en buena hora. ¿Y el modelo?

—Al menos llegó temprano. Lo están preparando en la otra sala. Mi nombre es Dominik Guillé, soy el director artístico encargado. Mi equipo está compuesto por Vivi Roberts, la fotógrafa; el señor Hans Lewis que es el escenógrafo y encargado de la iluminación; y Fabré Leblanc es nuestro estilista. Espero que podamos trabajar en la mejor coordinación posible con ustedes.

—Un placer conocerle, Señor Guillé. De parte de J&G publicidad quiero decirle que...

Pero Joe enmudeció al ver entrar a su sensual galán en escena. Ian Monroe se acercó a saludar a su jefe con una hermosa sonrisa y vestido con un traje de smoking sencillamente varonil y tentador. El estilista venía tras él verificando que ni uno de sus cabellos estuviese fuera de lugar para iniciar la sesión fotográfica.

—¡Buenos días, señor Smith! Me alegro que ya esté presente. Supongo que su retraso fue debido a algún percance inevitable.

—Bue...Bue... Buenos...días... Ian. Digo, señor Monroe.

—Puede llamarme por mi nombre, señor Smith. —Le respondió el modelo.

—Disculpen que les interrumpa pero ya tenemos más de quince minutos de retraso. Tengo otras dos sesiones el día de hoy, por lo que hay que comenzar ya. —Chilló el director de arte.



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En el texto hay: lgbt, comedia romantica

Editado: 17.03.2018

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