Reflejos del Alma

Cadenas de Agonía

¿Alguna vez has sentido que ganas de gritar? ¿Ganas de llorar hasta quedarte sin lágrimas y fuerzas para levantarte? ¿Ganas de desahogarte sinceramente, sin tabúes, sin excusas, desnudar el alma, aunque sea solo por una vez? Yo también las he sentido, he pasado días en los que solo respirar duele, días en los que la soledad me ataca con sus peores armas. Días grises y oscuros, sin ánimos de nada, solo de quedarme en silencio, tranquila. Días de llorar en silencio sin nadie que me acompañe en mis momentos más difíciles porque, por mucho que intento explicar la razón de mi dolor o el sufrimiento, nadie lo entiende, solo yo. Así que he llegado a la conclusión de que, por más que esté rodeada de personas que me quieren, me siento sola, siento que no encajo y que no hago nada bien, todo en mí está mal. A veces me regaño a mí misma por esas tantas diferencias que tengo con respecto a los chicos y chicas de mi edad, sin embargo, he aprendido que todos mis defectos y virtudes, mis malos ratos y momentos de felicidad, todo eso es parte de mí, no sirve ocultarlo. Soltar todo lo que llevamos dentro es liberador, cuándo esos sentimientos reprimidos salen a luz, es una sensación de libertad indescriptible, no podemos mantenerlos en la oscuridad eternamente, porque a cada segundo se convierten en cadenas de agonía, nos atormentan y asechan. Nos matan por dentro y nos convertimos en sombras vivientes. Déjalos fluir, no te condenes a un futuro de prisiones, cargado de dolor, soledad, y abandono. ¡Libérate de las cadenas!




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.