Regresa a mi

capitulo 19

-No insultes mi inteligencia con explicaciones –le soltó mientras caminaba a verificar en qué estado se encontraba Ian, miro a Sarah que lo revisaba –como esta… -vio como la observaba Connor y supo que quería una explicación –vamos a hablar solo que ahora no

Le hablo sobre el hombro, mientras miraba  a su hermana limpiar las heridas  del rostro con un paño que le procuro Prue, quien también estaba esperando el diagnóstico de la doctora

-Dada la paliza que le dio diría que bastante bien –lo reviso en general para disgusto de Kubrat, la miraba con la mirada oscura por los celos, odiaba las atenciones que le estaba dando –creo que tiene un par de costillas maltrechas pero nada serio

Connor ofuscado por cómo estaba siendo ignorado, necesitaba respuestas y por dios que se las iban a dar, acorto la distancia que lo separaba de su esposa  tomándola del brazo la obligo a encararlo mientras le siseaba cerca del rostro

-Vamos a hablar ahora –le clavo su mirada azul en aquellas gemas –que acaba de suceder aquí 

Kara miro a sus hermanas, estas asintieron  recorrió con la mirada los rostros de los presentes teniendo la certeza de que podía hablar con tranquilidad

-Bien que así sea-vio que Mael era el más cercano a la puerta –cierra por favor… nadie debe oír lo que hablaremos aquí

El hombre no movió ni un musculo hasta que recibió la confirmación por parte de su laird, cuando este movió la cabeza en afirmación, cerro  se plantándose frente a esta.

-Es bueno saber que tengo tu bendición –el sarcasmo en la voz de su mujer no era lo que Connor esperaba, sin embargo, mantuvo su postura austera-primero que nada debemos atarlo, antes de que recupere la conciencia…vaya a saber uno que trucos sucios tiene el bastardo.

-Cierto –Gillian se acercó para ponerle al cuello el colgante, que había usado hasta ese momento Kara –esto va  a mantener a Ben a raya, al menos hasta que encontremos algo más permanente.

-Alguna de ustedes podría decirme que demonios sucede –Connor comenzaba a exasperarse

-Lo que demonios sucede es que, este primo tuyo Ben, se le metió en el cuerpo a Ian y tiene la idea de sacar a tu Amada Dierdre de mi para robarse su poder – los presentes se quedaron callados

Connor se la quedó mirando, por un momento creyeron que había dejado de respirar pero luego se carajeo, era una risa histérica

-Sera que todos van a actuar iguales –la mirada de reproche de Sarah estaba dirigida a Kubrat que era el único que no se había espantado, aunque le esquivo la mirada –dile el resto, estoy segura de que le va a encantar

Connor dejo de reír para ponerse serio y fruncir sus espesas cejas negras y aunque supo que se iba a arrepentir en cuanto las palabras salieran de su boca, aun así pregunto 

-Aún hay más –Kara sonrió de lado pero fue Prue quien continuo

-Que comes que adivinas grandote –la chica se levantó de su lugar junto a Ian, donde estaba velando a su amor –verán nosotras –señalando a las tres –no somos de por aquí

-Eso no es algo nuevo mi lady –la voz de Mael siempre había surtido el mismo efecto que un bálsamo pero ahora sonaba tensa y desconcertada –pero no entiendo que tiene que ver con esto

-No querido lo que Prue trata de decir, es que nosotras no pertenecemos a esta época –Kara miro directo a los ojos de Connor –venimos del años 2019 –Connor no podía decir nada estaba mudo por la impresión  -Tu amada Dierdre reencarno en mí y al parecer estamos aquí para acabar con el –señalo al desvanecido

-No con Ian, sino con el que está dentro de el –aclaro la pelirroja corriendo a situarse nuevamente junto al rubio viéndola mirada asesina de los hombres pero ante el mutismo de ellos volvió a hablar –digan algo… no se queden callados

El silencio reino dentro dela habitación por varios minutos, Connor solo caminaba de un lado a otro pasándose la mano por el cabello desordenándoselo, tratando de procesar lo que acababa de escuchar, al comienzo no creyó lo que decían pero al ver la afirmación en la figura de Gillian, todo su mundo se puso de cabeza, al pensar que la mujer que amo y perdió y la que acababa de conocer y de la que estaba perdidamente enamorado eran la misma, era un torbellino de sentimientos encontrados.

-Deberíamos prepararnos para sacar a Ben –el comentario de Prue tenía la intención de contar con el silencio prolongado –cuando esto acabe nos marcharemos de aquí de la misma manera en que llegamos

-Eso no es del todo exacto –susurro Gillian hablando por primera vez desde que empezara la confesión –no podrán marcharse… aun 

La cabeza de Kara pareció dar un giro de 180 grados cuando se volvió para encarar a la mujer

-De que está hablando –la ferocidad que se veía en el rostro de la joven y en su rostro amilano a la mujer –solo queda este desgraciado, y por lo que oí en esta habitación, la muerte de la chica ya fue aclarado asique dígame señora  ¿Qué más quiere de nosotras? 

-De ustedes nada… pero tú –señalo a Kara  mientras hablaba calmadamente –no te puedes ir, no cuando estas atada a alguien por un año y un día.

Al oir aquellas palabras sintió que sus piernas ya no la sostenían, acabo derrumbándose en la cama, mientras su cabeza era un caos de ideas, no podía ser, se creyó muy hábil al casarse con Connor y ahora su solución brillante se volvió en su contra transformándose en su pesadilla; si porque ahora estaba encadenada a un hombre que no la amaba y había grandes posibilidades de que jamás la amara.

Con la traición de Drew fue simple lo mando a volar y huyo, ahora estaba en una tierra extraña y sin ningún lugar seguro donde escapar, todo tenía que ser tan complicado en su vida. Como podía pelear con el fantasma de otra mujer, simplemente era imposible. 

Derrotada pensó “estoy perdida” pero de inmediato la imagen de su abuela, la propia Ira McKenna se presentó frente a ella, golpeaba el bastón contra el suelo y la miraba con el ceño fruncido, mientras le decía “vas a fajarte el cinturón y a hacer tripas corazón, tu misma te metiste en este lio y solita vas a salir y lo vas a hacer con la frente en alto, no vas a dejar que ningún necio highlander te vea derrotada, es cuestión de orgullo y las mujeres McKenna sabemos de eso, verdad cariño” una cándida sonrisa lleno el corazón de Kara con una sensación tranquilidad, una suave sonrisa se formó en el delicado rostro de la chica. 




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