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POV. Alice Camberleck.

Suspiro sintiendo mi cuerpo tensarse con décima vez al haber llegado al pueblo.

¿Por qué me comportaba de esta manera ante Brandon?

A fin de cuentas merecía su enfado..

Vaya.. la princesita comienza a sentirse ignorada.

Vete al demonio.

Pero si ya lo somos.

¿Pueden dejar de discutir? Lucha por el, Alice.

Ella no luchará, es una cobarde.

¡No soy cobarde!

Entonces demuestralo.

¿Quién era aquella chica junto a el?- pensaba.

El viento envolvía mi cuerpo mientras comenzaba a jugar con las piedras en el camino.

-¿Alice?- levante mi mirada encontrandome con el rostro de Alexander quien sonreía- Al fin te encuentro.

-¿Qué?- balbuceo deteniendo mis pasos.

-He estado buscandote luego de nuestra discusión, querría disculparme por mi actitud, lo lamento- murmura avergonzado.

-¿Por qué intentas que toda vuelva a ser como antes conmigo?

-Porque..- titubea- no quiero volver a perderte.

Ten cuidado, Reina.

Hay algo en sus palabras que no son sinceras..

Ciudate.

-Vamos, Alex- río harta de sus intentos- Deja de fingir que te importo.

-¿Por qué piensas en eso?

-Porque jamás volveré a creer en ti.

-Te quiero, Alice- murmura.

¡Está mintiendo!

No le creas, princesita.

-No intentes jugar conmigo- siseo.

-¿O sino que..?- se burla.

-Te mataré.

Ríe- ¿Eres capaz de matarme?

-No te equivoques porque ademas de ser un ángel, puedo ser tu peor pesadilla.

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POV. Mercy.

-¿Qué haces?- pregunté observando el cuerpo de Ethan escondido detrás de un árbol.

Gira su rostro con pánico tirando de mi muñeca hacía el.

-Habla bajo- chilla levemente- Alexander se encuentra aquí junto a Alice.

-¿Qué?- frunzo el ceño- ¿Donde se encuentrán?

-No lo se- gruñe- los he perdido de vista cuando llegaste.

-¿Me culpas?- tenso mi cuerpo indignada.

Bufa besando mi mejilla- Claro que no.

-Como digas- ruedo mis ojos.

-¿Te has enfadado?- pregunta al notar mi silencio.

-Cállate- respondo observando el cuerpo de Alice a espaldas nuestra.

-Pero..- interrumpo sus palabras señalando con mi mirada hacia el frente.

-¿Qué esta ocurriendo?- pregunta observando la desesperación en el cuerpo de Alexander.

-Algo esta tramando.

-¿Qué debemos hacer, Mercy?- pregunta expectante en la escena.

-Tendremos que seguirlo.

-¿Como piensas hacerlo sin que nos vea?- murmura con burla.

-Recuerda que tengo poder, idiota- gruño frustrada.

-Eres tan agresiva- me observa con rápidez.

-Y tu tan idiota.

-¡Basta!- susurra- No quiero que Alice salga lastimada nuevamente, no podría perdonarmelo.

-No ocurrirá, esta vez debemos actuar antes de que ocurra, cariño.

-Por favor.. ciudala- ruega.

-Lo haré.

Con mi vida..

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POV. Brandon.

Hace una semana que Susan se encuentra en la ciudad lo que ha ocasionado las incontrolables visitas de Alice.

El aire se tornaba tenso al estar ambas cerca, no comprendía porque se odiaban.

¿Por qué la presencia de la otra les causaba tanta irritación?

-Brandon- musita Susan a mis espaldas.

-¿Qué sucede?- sonrío girando.

-Por favor- ruega y creo saber lo que quiere- debes de terminar con todo tu sufrimiento.

-No volveré, Susan- respondo con brusquedad.

-¿Quieres vivir toda tu existencia pensando en el jodido pasado o enfrentarte a el y cerrarlo?- pregunta.

-Yo..- balbuceo.

-Se lo mucho que has sufrido, hermano. Nadie más que tu entiende lo que tuviste que pasar por culpa de los malos tratos de nuestra madre, pero debes cerrar todos esos recuerdos dolorosos.

-Susan- respondo sintiendo mi pecho comprimirse ante los recuerdos.

-El merecía su muerte, el no era nuestro padre, Brandon- espeta- tu defendiste a nuestra madre de ser asesinada entre sus manos.

-Ella no lo recuerda- suspiro con cansancio- es mejor que todo siga de esta manera, no puedo volver a verla, jamás volveré a sentirme bien a su lado.

-Hermano- levanto mi mirada observando sus ojos oscurecerse- ella lo recuerda.

-¿Qué?- ni puede ser posible.

-Luego de que tu te escaparas Karla se volvió desquiciada buscandote por todas partes ajena en que sabría donde te encontrarías, estuvo años intentando encontrar tu paradero, noches enteras de pesadillas por sus errores le atormentaban. Una noche completamente diferente a las anteriores ella comenzó a recordar lo que sucedió cuando tu la protegiste de ser asesinada por nuestro padre.

-¿Cuando ocurrió todo esto?

-Unos cuatro años luego de que tu te fueras sin dejar rastros- comenta- luego de aquello se alejo de su pareja y no permitió que se acercara a nuestra casa, cada día observaba tu habitación por largas horas para luego acostarse sobre tu cama y dormir entre sollozos, se que no tienes porque olvidar y fingir qur nada sucedio pero debes darte la oportunidad de perdonar y cerrar esa puerta que tanto daño te provoca.

-No volveré a ese lugar- respondo.

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-No puedo creer que vuelva a estar aquí- gruño.

Los recuerdos sacudían mis pensamientos al observar el lugar donde había crecido.
Todo parecia seguir de igual manera, exceptuando que el jardín donde solía estar horas descansando, se encontraba repleto de hierbas sin vida.

-¿Estás listo?- murmura Susan a mi lado, sonriendo con tristeza.

Podía ver mis pensamientos, los recuerdos más felices, pero también los peores.

Asiento- Entremos antes de que me arrepienta- respondo inhalando el olor a flores silvestres que emanaba el interior de la casa.