Estimado y honorable consejo superior de las fuerzas armadas, a quien corresponda:
He de expresar mi gratitud, apreciado consejo, por el trabajo que cada día realizan para mantenernos libres y felices.
Hago un seguimiento cercano de su avance sobre las líneas de la población rebelde, y me enorgullezco de ser representado por hombres tan dedicados y nobles.
Sepan, por favor, que sería para mi un honor ser parte de este aguerrido avance, más mi lesión de la pierna izquierda me impide ser parte de las gloriosas filas y de la justa causa.
Verán, dicha lesión me fue causada por una unidad de infantería rival cuando me hallaba sirviendo en el campo de batalla contra los enemigos que hoy mismo aún enfrentamos, pero hace ya 10 años.
Mi pelotón había sido asignado a tareas de reconocimiento en las praderas que han ocupado en la última semana, cuando fuimos emboscados por dicha unidad.
Fui afortunado de haber recibido un disparo en la pierna, que impactó contra mí fémur y lo partió en varios pedazos. Todos mis compañeros fueron heridos de muerte, entre ellos, mi hijo mayor, Jonathan, que se había enlistado junto conmigo al cumplir sus 18 años.
Ah! Que honor habría sido caer junto con ellos! Les recuerdo con más dicha que congoja, porque defendimos los principios de nuestra gran nación con valor y hasta las últimas consecuencias.
Tengan a bien comprender mis palabras, estimados referentes, que no es mi intención parecer melancólico o suplicante, ya que no encuentro manera de expresar mi gratitud a aquellos que me dieron la oportunidad de luchar por mis valores; por nuestros valores!
Y a aquellos rebeldes ingratos, anheloso me es que se les de muerte!
Qué saben ellos de la libertad?!
En ocasiones, me recuerdan a mi esposa Julia, que tras la honrosa partida de nuestro hijo, me abandonó a mi suerte culpandome por las heridas fatales que en mi hijo fueron aplicadas.
Qué sabe ella de la gloria?! Qué sabe ella del honor?!
Más con ustedes, majestuoso consejo, les debo mi vida y mis más grandes logros.
Claro está que he tenido algunos problemas para cobrar mi pensión de veterano, y en estos 10 años me ha sido difícil ser admitido en un buen empleo. Es por ello que mi odio a los rebeldes se ha incrementado! Nuestro bello pueblo, por décadas enfrascado en esta batalla, no ha podido progresar a causa de estos parásitos, que pretenden arrebatarnos nuestra preciosa libertad.
Hace algunas semanas, volviendo a mi hogar justo antes del toque de queda de las 5pm, fui bendecido al ver cómo capturaban a un golpista que pintaba las paredes de un comercio. Ja! Si ustedes hubieran podido verlo! El pobre infeliz pregonaba que somos oprimidos, al mismo momento que un grupo de nuestros amados soldados lo tomaba por sus extremidades y lo arrojaba dentro de un vehículo. Efectivamente me fue reconfortante saber que había un despreciable menos caminando por nuestras calles!
No se por qué les molesto con estas cosas. Ustedes deben vivir a diario esta experiencia! Que feliz sería yo en su situación!
Esa misma noche, leyendo una carta a la luz de las velas (porque el servicio se ha perdido desde el último bombardeo de los abominables), me encontré asqueado! Era un escrito de manos de un sobrino, que vive cerca de las líneas por las que ustedes ahora avanzan, y reclamaba supuestos abusos a los derechos humanos que ustedes, nuestros honorables líderes, llevaban a cabo sobre este pueblo de imbéciles. Pueden imaginarlo? Ustedes tan gloriosos rebajandose al nivel de ellos?
De más está decir que quemé su carta y no volví a retomar el contacto con él.
Que acaben los rebeldes como esa carta!
Les pido disculpas por dar fin a mis palabras de forma tan abrupta, pero he notado que la tinta escasea en los mercados, y aún debo comunicarme con mi hermano que por los retenes fronterizos aún espera poder volver a casa. Se que han sido seis meses desde esto, pero espero sean todos los necesarios para que al fin estos seres nauseabundos sean exterminados!
Sin más que agregar, le ofrezco mi más sincera gratitud por la magnificencia que traen a nuestra tierra.
Sea la gloria sobre la cabeza de nuestro líder!
Por la vida! Por la salud! Y por la libertad!