Chapter XXVII

Peter: Yo...— Se puso algo sonrojado —No me mal intérpretes, no me refiero de Celos como los que tienen Edmund y Caspian— Movió sus manos rápidamente en forma de negación —Yo me refería...

Tn: Te referías a la forma en que lo apoyo... no como algo más sino como su mano derecha— Hablé haciendo que el soltara un suspiro.

Peter: He visto que Caspian y tú se coordinan... me hubiera gustado que mis hermanos también me apoyaran así— Miró hacia el cielo.

Tn: Lo hacen... solo que cuando te digan las cosas, no te pongas a la defensiva— Observé de igual manera el cielo —Ellos solo quieren que todos estén bien y que no haya más vidas inocentes perdidas.

Peter: Ahora que lo veo... no eres mala ni nada por el estilo... en verdad lo siento por todo.

Tn: En gran parte tienes razón... he tenido la culpa de todo— Miré mis manos —Incluso soy responsable de las constantes peleas de Edmund y Caspian, pero quiero que me entiendas... que hasta que no derrotemos a Miraz no podremos estar en paz.

Peter: Tn yo sé que me comporté como un idiota— Me miró y yo hice lo mismo —Quiero lo mejor para Edmund, pero tampoco puedo obligarte a elegir si aún no has tomado tu decisión.

Tn: Cuando Miraz haya sido derrotado... podré decidir sobre mi vida, hasta entonces te ofrezco mi espada para pelear a tu lado.

Peter: Tú también serás reina— Me sonrió —Luchemos para proteger Narnia.

Tn: Por Narnia.

Ambos asentimos y comenzamos a bajar hasta donde estaban los demás... vi que todos nos observaron y yo solo sonreí, noté la mirada de Caspian en mí y lo miré... sabía que él no desistiría al igual que Edmund... solo espero que todo salga bien, no supe el motivo, pero sentí que alguien me tomó del brazo y me jaló hacia un lugar lejos de donde se encontraban los demás... me di la vuelta y noté que se trataba de Edmund quien estaba tenso y bastante serio.

Tn: ¿Qué rayos te pasa? — Lo miré seria.

Edmund: ¿Qué me pasa? Pues pasa que yo no soporto que ese imbécil te mire de esa manera— Comentó frustrado y a su vez molesto.

Tn: No deberías de hablar así de él— Lo miré algo molesta.

Edmund: ¿¡No entiendes que si no fuera por ese imbécil posiblemente no estarías aquí!? — Me miró molesto, pero podía notar preocupación en su mirada.

xx: ¿Ahora el imbécil soy yo? — Preguntaron a sus espaldas —Que yo sepa el imbécil es otro que no ha dejado de fastidiarla.

Edmund: Cállate Caspian— Ordenó frío mientras se daba la vuelta y lo miraba.

Caspian: Eso díselo a tus súbditos, porque yo no te estoy siguiendo a ti— Se acercó a él de forma amenazante —Yo luchó por lo justo y tu ni siquiera te pusiste a pensar en todas esas muertes con su primer ataque— Lo observó frío.

Edmund: Ella no te elegirá— Contestó con cierta burla.

Caspian: Tendremos que ver quien estará con ella— Retó serio mientras desenfundaba su espada.

Tn: No hagan esto... por favor deténganse— Pedí mientras observaba como Edmund desenfundaba también su espada y comenzaron a caminar en círculo, sin apartar la mirada del otro.

En eso pasó lo que más suponía... ambos comenzaron a pelear... Caspian atacaba y Edmund lograba esquivar... de las historias que nos contaba el profesor decían que el Rey Edmund el justo, era muy hábil con la espada y que era un espadachín formidable, de un momento a otro Caspian perdió el equilibrio y Edmund aprovechó para quitarle la espada, pero no contaba que este también lograra hacerlo haciendo que quedaran con la espada del otro, ambos seguían peleando, cada vez era más agresiva la pelea... en un momento cuando ambos se separaron un poco yo corrí y me coloqué en medio de ambos.

Tn: ¡Bueno suficiente! — Exclamé molesta —¿Quieren dejar sus peleas a un lado? Hay que concentrarnos en algo más importante... en estos momentos no nos podemos permitir errores.

Edmund: Pero si él...

Tn: ¡Esto es para ambos! — Me miraron —Vayan al refugio ahora— Ordené de manera fría.

Edmund: Que vaya Caspian yo tengo que vigilar junto a los centauros.

Dicho esto, se fue él dejándome a solas con Caspian.

Caspian: Tn...

Tn: Vamos con los demás... deben preguntarse qué sucede— Sin darle tiempo de responder me di la vuelta y me fui en dirección hacia donde el resto se encontraba.

Susan: ¿Todo en orden? — Preguntó en cuanto llegué.

Tn: Si... tenemos que pensar en algo, las tropas de Miraz no tardarán en venir— Hablé con seriedad mientras entraba al refugio.