Part. Six

Hermes Crassis

Algo nuevo y, diferente.....

Veo como sus labios adquieren un ligero temblor cuando me acerco a ella. Su cuerpo recobra la compostura, tratando de no parecer nerviosa, pero simplemente, no logra hacerlo. Sus grandes senos rebotan una y otra vez cada vez que cae sobre la verga de su acompañante. Sus pequeños gemidos son una melodía extasiada para mi mismo.

Cierro mis ojos y me acerco a ambos poco a poco. Mi cuerpo desnudo y con la verga dura, me hacen querer enterrarme en lo mas profundo de ese culo. Enterrarme sin restricciones, hacerla gritar de placer, hacerla llorar una y mil veces, hacerla rogar por que me detenga, y yo, no hacerlo. Quiero que sufra, quiero que me odie.

Tomo un par de condones de la mesilla y me los pongo, mi cuerpo esta sudoroso, mi cuerpo esta caliente y quiere saciar estas ansias que esta sintiendo.

Le doy una mirada al tipo que esta acostado sobre la cama, tiene el rostro inexpresivo, pero en la mirada guarda mucho mas.

La mujer paro, cuando subí a la cama me coloque detrás de ella, su cuerpo sudoroso se envaro unos cuantos minutos antes de voltear a verme sobre su hombro. Le regale una sonrisa de medio lado, de esas que te hacen bajar la guardia, pero esconden mas secretos que la casa blanca.

Mi mano izquierda la coloque en su espalda baja y, la deslice poco a poco hasta llegar a la mitad de su espalda. Le di un breve empujón y dejo salir un pequeño grito chillon.

Su acompañante, coloco sus manos alrededor de su cuello y no la dejo moverse por mas que ella se movía de un lado a otro, tratando de zafarse de su agarre. La mirada del hombre se torno un tanto llorosa y sonrío para mi. Ambos sabíamos lo que queríamos , le hice una señal con un movimiento de cabeza y este, soltó un poco su agarre. La mujer se sintió liberada por unos momentos.

Mi mano libre la lleve a mi boca e inserte mis dedos dentro, llevando un poco de saliva hacia su entrada, la acaricie una y otra vez.

__No. No. No.

La mujer se retorció en su lugar y su acompañante la tomo de la cintura. Beso su cuello lentamente y la mujer dejo de moverse, sin embargo, seguía negando lo que estaba por suceder.

No era típico de mi, hacer lo que las mujeres quieran conmigo pero, en este tipo de situaciones sabes a la perfección lo que esta por venir. No es que no sepas de que se trata, simplemente no tienes la mente ni las ganas de realizar lo que por derecho es mío.

Desde el momento en el cual pones un pie dentro de la habitación, me perteneces y, no acepto negativas de ninguna índole.

Se muy bien quien es esta mujer, se a la perfección cuantas personas la han tocado, cuantos le han comido el coño, cuantos han usado su cuerpo, si tiene algún tipo de enfermedad sexual.

Se absolutamente todo. Hasta cuando va por un pastelillo a Starbucks y a que hora regresa.

Es por esa razón que fue seleccionada entre tantas mujeres. Pero, me lo esta poniendo demasiado..... cansado.

No soy una persona a la cual le guste ser llamado "amo" y tampoco estoy en busca de alguna "esclava" me eché a reír por mis pensamientos pendejos que estoy teniendo en estos momentos.

Hacia tanto tiempo que no reía de esta manera que hasta yo mismo me siento un tanto extraño.

De pronto, la habitación se volvió un tanto silenciosa, solo se escuchaba la respiración de ella, de la mujer frente a mi. Su respiración agitada, ya sea por el beso desgarrador o, por que esta a punto de tener un gran orgasmo.

Coloco mi verga en su entrada, la cual, estaba bastante cerrada, a pesar de haber masajeado un poco y haber jugado con ella, no cedió.

__Te haré llorar, y cuando me pidas que pare, no lo haré. Guardare tus lagrimas en lo profundo de mi corazón y lo atesorare por toda la eternidad.

Lo único que recuerdo de esa noche, son los gritos de dolor y ayuda que la mujer pedía, con esos ojos llenos de lagrimas. Me quede unos minutos inmóvil y con una sonrisa burlona en mi rostro. Estaba a punto de tener una conversación conmigo mismo frente al gran espejo. Miré hacia arriba y volví a sonreír de la misma manera.

__Soy un completo hijo de puta.

Entonces recorde algo. Tenia mas de un mes que no visitaba el club. Acaricie mi mejilla y me llego una idea de repente.

Tome mi teléfono móvil en las manos y presione uno. De inmediato me mando a mensajes directos y teclee de inmediato. No estaba marcando al club, estaba marcando, directamente con uno de los dueños del club. Y estaba en conectado ya que, su respuesta fue inmediata.

*La abeja ha regresado a la miel. ¿Qué desea su majestad?

Oliver C.

__Es un completo imbécil.

*Visitare este fin de semana el club. Quiero algo nuevo.

Hermes Crassis.

Golden VIP.

Oliver, al leer el mensaje de Hermes trago saliva varias veces y hecho su cabello hacia atrás varias veces.

*No hay nada para ti, este fin de semana.

Oliver C.

*Deja de jugar conmigo Oliver.

Hermes Crassis.

Golden VIP.

*Ya nadie quiere arriesgarse contigo. Se te fue la mano la última vez.

Oliver C.

Tenia toda la razón. La última vez, había hecho las cosas con mucha imprudencia, dejándome llevar por el animal interno que llevo dentro. Ese animal que nunca termina de saciarse. Y esta vez, esta a punto de salir de nuevo. Y quiere salir a cazar pero, algo completamente..... diferente.

*Revisare la lista y, te aviso de inmediato.

Oliver C.