Scars From The Past

Capítulo 5

Al fin era viernes y eso significaba el tan deseado fin de semana de un supuesto descanso. Aunque desgraciadamente para los estudiantes eran días para ponerse a adelantar diversos trabajos que tenían pendientes y bueno, si les quedaba tiempo, tener un poco de espacio para ellos mismos.

Ya casi era la hora de salida para los alumnos. Joshua había guardado todo a pesar de que todavía quedaban algunos minutos de la clase, pero al rubio esto le importaba poco ya que el único pensamiento que se encontraba en su cabeza era irse de aquella escuela que para él no era más que una prisión que lo torturaba todos los días.

Mientras, Suho pensaba que hoy, dentro de unas cuantas horas, tendría que ir a la casa del rubio para adelantar el proyecto en grupo.

—Porque esta última hora se ha sentido tan eterna, solo quiero irme ya —expreso el chico con frustración a su compañero.

—El tiempo ha sido igual que siempre, Joshua —habló el pelinegro más tranquilo.

—¿Cómo puedes decir algo así? Es obvio que el tiempo está pasando más lento —dramatizo llevando su mano a su cabeza y fingir un falso desmayo tirándose encima de Suho, el cual solo se rio de la acción del chico.

—¿Qué planeas hacer ahora que llegues a tu casa, Suho? —preguntó.

—Supongo que arreglarme para ir a tu casa viendo la dirección me di cuenta de que me queda un poco lejos de donde yo vivo.

El chico, al escuchar esto, una idea repentina pasó por su mente.

—¿Y si en vez de llegar a tu casa para alistarte rápido y tener que salir enseguida, lo cual suena bastante agotador y estresante, te vienes conmigo directamente a mi casa y pasamos el rato mientras vienen los demás?

El pelinegro frunció el ceño al escuchar tal propuesta de su amigo y negó inmediatamente.

—Joshua, agradezco tu propuesta, pero la verdad es que no puedo aceptarla —manifestó.

—¿Por qué no? Me parece una excelente idea, piénsalo, así no tendrás que preocuparte por llegar tarde. Vamos, Suho, seguro que la pasaremos bien, además de que mi padre no tendrá ningún problema en llevarte —inquirió Hong Jisso.

Suho se encontraba pensativo, había pasado un tiempo desde que no se quedaba o iba a la casa de algún amigo y no quería incomodar o ser una carga.

—¿Estás seguro de que tu padre no tendrá ningún problema en llevarme a tu casa? —interrogó todavía dudoso.

—Estoy seguro de que mi padre no tendrá ningún problema, es más, si quieres, le aviso ya mismo de que vas a ir con nosotros —comentó, sacando su teléfono y ocultándolo con su bolso para que el profesor no notara que lo estaba usando. —Eso no es necesario —interrumpió, no obstante, ya era demasiado tarde, puesto que su amigo ya le había avisado a su padre.

—Demasiado tarde ya le avisé y contestó diciendo que no tenía ningún problema.

—Bueno, supongo que ya no tengo opción —suspiro.

La tan esperada campana sonó haciendo referencia al final de la jornada escolar.

—Ya era hora, vámonos, Suho —exclamó el rubio agarrando sus cosas y se levantó para salir de aquella aula acompañado de un pelinegro.

Los jóvenes se encontraban en la salida esperando a que el padre del rubio, quien miraba a todos lados como si estuviera buscando a alguien, mientras que el chico que tenía al lado se encontraba algo inquieto y nervioso.

—¿Suho te pasa algo? Pareces bastante intranquilo —manifestó acercándose a su amigo para mirarlo directamente a los ojos, esperando una respuesta.

—Creo que estoy algo nervioso —expreso.

—¿Por conocer a mi padre? —interrogó y el pelinegro asintió, acción que hizo a Joshua soltar una carcajada y Suho frunció el ceño ante eso. Mi padre es la persona menos estricta que conozco. No tienes por qué estar nervioso, te lo digo en serio. Tal vez tiene cara seria, que a simple vista las personas lo toman como un amargado, que un poquito si es y a veces sí le dan arrebatos de impaciencia y complicación, pero es más por el mismo que por algo más. Además, es bastante gracioso, aunque no se nota a simple vista, también es medio alcohólico... Ignora eso último que acabo de decir —dijo el chico dándose cuenta de que estaba hablando de más como suele hacer— y el pelinegro levantó una ceja al escuchar lo último que había dicho su amigo—. A lo que quiero llegar es que es un buen padre y no tienes por qué estar inquieto.

De repente, una camioneta Mercedes-Benz clase GLE se encontraba frente a ellos.

—Justo acaba de llegar, ven, vamos —señaló el chico y abrió la puerta del auto para entrar seguido de su amigo.

—Hola, padre, te presento a mi amigo Lee Su-Ho —comentó el chico a su padre.

—Hola, hijo, y hola a ti también, Suho, yo soy Hong Mason, encantado de conocerte —saludo el mayor con amabilidad.

Suho le devolvió el saludo y le mostró una sonrisa para no parecer tan serio. Miró al adulto, el cual tenía el cabello rubio, ojos verdes, lucía bastante serio y elegante, además de que tenía rasgos americanos. Honestamente, no parecía que fuera asiático, pero no iba a decir nada al respecto por educación, además tampoco era que le tuviera que importar cómo era el físico de las personas.

—Ahora, ¿Dónde se metió tu hermano, que aún no llega? ¿Sabes dónde podría estar, Joshua? —inquirió el adulto.

—No lo sé, papá, estuve llamándolo y buscándolo, pero sabes que casi nunca contesta el celular.

—¿Tienes un hermano? —preguntó Suho con sorpresa.



#1852 en Fanfic
#12177 en Novela romántica

En el texto hay: perdida, lgbtiq+, enemiestolovers

Editado: 04.08.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.