Lorena sentía pena por su padre ahora abuelo, no se imaginaba poder pasar a una persona por tantas cosas, ahora lo entendía, se tardó mucho para hacerlo pero por fin, ya por fin lo sabía, respiró profundo trataba de entender el plan que tenían ambos hombres, ¿debía confiar en ellos? Obviamente sí, uno era su padre y el otro casi podría ser como un padre, pero que su madre nunca le correspondió el caso era que, el problema radicaba en lo que ellos le pedían lo cual era demasiado, Lorena analizaba todo desde el inicio hasta el final con cautela todo lo que escuchaba de ambos hombre, no solo lo del plan sino todo desde que su padre abuelo le había dicho que su madre era Rebecca, por alguna razón no había sentido empatía por ella en el mismo momento, <es que es imposible tratándose el hecho de que al nacer las habían separado> Pensó, la única empatía que sentía la traía a su padre ahora abuelo, aunque no pudo negar que después de largos ratos escuchando todo lo que decían sintió una pequeña pena por no haberla conocido.
—Entonces tengo que tratar de entrar en la vida de Michael para que me diga dónde está el cuerpo de mi madre, eso ya no es demasiado cruel —Lorena se cruzó de brazos mirando a ambos hombres.
—Solo con el cuerpo de tu madre...
—papá ya basta, piensas que no me molesta que menciones cuerpo y madre al mismo tiempo.
—Lo lamento hija, solo así nos ayudarás a todos, en la unión está la fuerza.
Lorena suspiró y dezcruzo sus brazos, —Esta bien —dijo resignada sabía que no tenía de otras como siempre.
—Bien, el plan comienza desde hoy, te pondré un micrófono el cuál debes quitarte al bañarte, cuando tengas alguna información ven con tu padre —Decía Kevin a ambas personas, Lorena afirmó con resignación ya que para ella era necesario y obligatorio, en cuanto a Eladio afirmó no muy seguro, quizás porqué se trataba de que su pequeña esté cerca de esos lunáticos hermanos o tal vez porqué ya Lorena por fin tendría a su verdadero padre al lado.
Ambos salieron de las manos de la casa de Kevin, Lorena miró de reojo a su padre, sabía que esto no le agradaba mucho pero vio que hacía el esfuerzo y lo abrazo.
—¿Quieres algo Lorena?
—No solo te abrazo cuando quiero algo —se quejó Lorena sonriendo.
—O quizás me recompensas porqué me dejarás por tu verdadero padre —Lorena negó al escuchar aquello, ¿en serio eso le pensó?
—Papá, eres mi papá, no te voy a cambiar por nadie jamás, Never. Y perdóname por dejarme sentar en el regazo de Melquisedec, pero creeme literalmente me obligó a sentarme así que nunca ya sabes —Enfatizó la palabra nunca. Eladio sonrió mostrando sus dientes. Al llegar a la mansión encontraron a los señores frente a la puerta ya que, habían entrado por primera vez por la delantera para poder seguir con el plan.
—Vaya, vaya, que sorpresa —Melquicedec se acercó a ambos—. Eladio Johnson trajo a su pequeña por la puerta delantera —El hombre sonrió.
—De hecho, creo que ya debería conocer a su padre —Soltó Eladio, esto llamó la atención no solo de Melquisedec él cuál se le vio un notable disgusto sino de ambos señores Bennett que se habían volteado a verlos, nunca habían empatizar con esa niña, pero que Eladio sea él mismo que quiera acercarla a la familia se le hizo estaño ¿Que se traía entre manos este?

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Editado: 09.08.2022