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Abby

—Has hablado con Brad y Kate

—Me enviaron un correo dos días después de irme, pero de ahí nada, apuesto que recibiré uno pronto

—Te estaremos esperando, nuestros últimos días aquí realmente ha sido agotador —sonreí

—Estaré bien

Alessio

Era adoptada, nunca lo menciono, más bien no mencionaba nada de su niñez, mire por la ventana el auto se estacionó, Teo la ayudó a bajar a Victorie.

—No debe estar haciendo tanto frío —Ambas me miraron sorprendidas

—¿Y Erick?

—Con su madre —dije —Si no les importa vamos tarde —Ella miró a Victorie, pero ella no podría hacer nada, tomaron asiento y nos preparamos para despegar

—Pensé que no vendrías

—Al principio, pero creo que será interesante —Mire a la señorita Williams

—Alessio por favor no la molestes, no si vas a seguir como estas

—¿Seguir como estoy?

—Si con algo serio, no dejaré que juegues con ella —La mire

—Nunca he jugado con nadie, siempre les digo la verdad

—Crees que a ella le haría feliz

—No me digas que ahora sabes lo que ella quisiera —No dijo nada

Me senté frente a ella, pero no dijo nada más bien, me ignoro.

—No crees que es una conducta muy infantil —No dijo nada —No entiendo por qué está enojada

—No lo estoy —dijo —Solo le voy a tomar la palabra y para eso creo que necesito su ayuda

—¿Mi ayuda? —asintió

—Me alejaré de usted, pero usted debe alejarse de mi

—Y si no quiero

—¿Es bipolar o qué?

—Digamos que cambie de opinión

—Pues yo no, ahora por favor —No dije nada

No había mucha gente cuando llegamos, pero al salir de la iglesia había un montón, Charlie e Ivana iba con Victorie, entonces el auto explotó, tomé a la señorita Williams y la puse a salvo.

—Caruso

—Saquen a Victorie de aquí —Comenzaron a disparar, no podía ver desde donde

—Paquete seguro Alessio pregunta por la chica

—Está conmigo, váyanse, los veré después —Miré a Víctor y él asintió, la señorita Williams temblaba —Oye, mírame, vamos a correr, todo estará bien —asintió, pero le tembló el labio

—Yo les cubro, ustedes corran —asentí —Uno, dos, tres

La tomé de la mano y salimos corriendo, la gente corría por nuestro lado, me percaté que nos seguían, pero no entendía por qué, un auto nos bloqueó al frente, puse a ella detrás de mí, cuatro hombres se bajaron.

—Es muy bella tu amiga, la llevaremos con nosotros —Miré a Williams y ella se abrazó a mi

—Alessio, no permitas que me lleven —Estaba llorando

—No te la llevarás

—Eso crees —La empuje y esquivé el golpe, pero eran cuatro, así que no tardo tanto tiempo en sostenerme, ella me abrazó del cuello

—Tengo miedo —Me susurro, intente zafarme del agarre de los otros

—Es hora de irnos linda —La tomaron del brazo, pero ella se aferró fuerte a mi cuello

—Haz que se suelte de una vez —La tomaron de cabello

—Suéltala, para qué la quieres

—No sabes nada verdad Alessio, pero pronto lo sabrás —Miré a Abby, le dispararon a un hombre que quería ayudar, me zafé de uno y golpe al otro, ella se zafó del sujeto cayendo lastimándose las rodillas; la tomaron otra vez y le apuntaron en la cabeza —O te quedas quieto o ella muere y no podrás hacer nada —Deje de moverme y me golpearon en el estómago, la cargaron y comenzó a golpear al sujeto

—¡Alessio!, no, suéltenme, suéltenme, ¡Alessio!

—¡Abby! —Grité

La subieron al auto y ellos subieron detrás de ella, me puse de pie con dificultad, Víctor apareció.

—Se la llevaron —dije

—¿Qué? —asentí

—Debemos ir por ella