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Esteban

—¿Cómo rayos le diremos que Fabio y Cameron murieron?

—Explotará una bomba en nuestras caras

—Si lo hacemos, ella no podrá controlarse, es imperativo que nadie más sepa que ella a recuperado la memoria, debemos mantener eso en secreto —dije

—¿Qué deben mantener en secreto? —La amiga de Rouses, junto a Edward y el otro chico

—Nada

—No, ustedes esconden algo, ¿la traicionarán?

—¿Qué? No, ella nos ha salvado el pellejo más veces de las que imaginas, nunca se lo haríamos —dijo Maritza

—¿Entonces qué ocultan? —dijo el chico

—Es algo que pondría en peligro la operación —Nos miramos

—Solo díganlo —dijo Edward

—¿Y ahora resulta que ella te importa?

—Y ¿Por qué no? Está arriesgando su vida por mí —dijo él

—Después de ocultarla, Emiliano mató a tres personas muy importantes para Rouses, no le decimos por qué ella podría ponerse en evidencia y no podría hacer como si no le importara, es importante revelárselo al final

—¿Cómo haremos eso? —dijo el chico

—Si los nombra cambiar el tema

Rouses 

—¿Pensé que saldrían esta noche? —dijo mi tía

—No me siento en condiciones de salir —dije —Me duele la cabeza, creo que mejor será quedarme, pero ustedes pueden ir —dije mirando a Brad y Kate

—Si yo también me quedo —dijo Edward —No tengo ánimos ni ganas

—Esa debería ser yo

—Pero no es así, porque me encargaría de sacarte, vamos eso se olvida

—Un corazón roto no es fácil de borrar —dijo ella

—Pero no imposible cariño

—Te traeremos chupitos —Me reí y asentí

—Entonces, hay gente escondida y otros prefieren agachar la cabeza, iremos mañana a verlo qué te parece —Henry asintió, Edward cambió de canal

—Te está sangrando la nariz —Él me miro y me extendió el papel, la sangre no paraba

—No he hecho nada para provocarlo —Toco mi frente

—Estás ardiendo —dijo él

De repente las luces se apagaron y solo quedo prendida la tele, esta se puso en azul y se apagó de golpe haciendo que se quemara, por las ventanas comenzaron a pasar a una velocidad, sombras, me puse de pie, pero una opresión a mi cabeza me llevo a pegar un grito y terminar en el suelo.

—Rouses —dijo Henry

Lo miré, era doloroso.

—Cierra las cortinas —Edward corrió a hacerlo, entonces la puerta comenzó a moverse bruscamente, Henry fue a sostenerla —Quieren entrar —Edward lo ayudó —El sillón

Volví a pegar un grito del dolor y sentí como si me hubieran dado un golpe en la cabeza y todo se volvió negro.

Alessio

La música como siempre fuerte, estaba sentado en la barra, no tenía intenciones de venir, pero de alguna forma tampoco quería quedarme cerca de Rouses y no recordar lo de la otra noche, aún seguía afectándome, pero peor, mire a la pista sus amigos estaban ahí; el otro se quedó con ella, no sabía que tomara pastillas, lo odiaba la última vez que tomo algún medicamento intentó matarse, mi celular sonó, no escuche mucho hasta que me aleje un poco del ruido, al otro lado se escuchaba golpes.

—Caruso alguien está intentando entrar, Rouses está inconsciente, los de seguridad no vienen, debes hacer algo —Miré a todos lados intentando salir de ahí

—Llamaré de inmediato, pero me tardaré en llegar 

—Apresúrate

Me acerqué a Esteban, él me miró serio.

—Están dentro del castillo, Rouses está inconsciente y al parecer toda la seguridad fue neutralizada —No dije más por qué él le hizo una seña a Calvino y Maritza y estos tomaron a los amigos de Rouses, le dijeron algo, Ashley se acercó

—¿Qué pasa?

—Rouses está en peligro —dije

—Nadie entrará… 

—Ya están adentro —Salí detrás de los demás, pero la marea de personas no me dejaba salir 

Al salir mi auto ya estaba ahí, me subí, pero a mi lado se subió la amiga de Rouses.

—No queras venir conmigo

—Mi amiga está en peligro, más vale que sepas manejar y no te importe perder la licencia —Alce las cejas

Arranque el auto, ella se puso el cinturón y acelere, no respetaba las señales de alto y me saltan tres semáforos, lo cual causó que la policía nos persiguiera, sentí que volví hacer adolescente, eche un vistazo a mi acompañante, tenía una cara de culo asustado.

—¿Todo bien?

—Mira al frente, maldición

—Tranquila que es como la bicicleta

—Con muchos caballos de fuerza —dijo —Sabes que serías un idiota si te casaras

—Sabes que eso no viene al caso —Asintió

—Pero alguien debía decirte que eres un idiota si la dejas ir —Eso no debía decirme, ya lo sabía