QUINCE

A diferencia de la noche pasada, Nicole se sintió más relajada y supuso que se debía a que el día había sido cansado, al instante en que se había acostado en la cama quedó dormida.

Cuando despertó Douglas ya no estaba a su lado y se encontró con una nota en la mesita de noche. En esta le explicaba que se había ido a la empresa y que haría lo posible por estar en casa para la cena.

Esa simple notita hizo que quisiera estallar de felicidad, en las últimas semanas su relación había progresado.

Decidió levantarse y salir a correr, habían pasado ya varios días desde la última vez. Con energías renovadas se alistó. Maggie ya había llegado y Nicole decidió dejar a Tommy con ella.

Salió de casa, subió al auto y se dispuso a ir a la ciclopista, podía trotar por la cera del vecindario. Pero prefería ir donde había más gente, disfrutaba más su rutina mañanera.

Al llegar se puso sus audífonos y empezó a escuchar música, empezó a trotar, varias personas le daban los buenos días, a pesar de tener los audífonos puestos los escuchaba,o sonrisas que ella les devolvía. Estuvo trotando por varios minutos hasta cansarse.

Se detuvo y poniéndole pausa a la música vio que llevaba media hora trotando. Había llegado a un punto en donde un pequeño arbusto dividía la ciclopista entre los corredores que iban y venían, cuando iba a rodear el arbusto para tomar la dirección de regreso no se fijo que alguien venía corriendo por lo que causó que chocarán.

— Lo siento. — dijo él. Nicole sintió sus mejillas arder, conocía esa voz. Al alzar la vista se topo con la mirada de Owen y este la veía con asombro. —Hola Nicole, he intentado comunicarme contigo.

Y con la primera excusa que se le vino a la mente dijo:

— Si, lo siento he estado un poco ocupada.

Owen solo asintió con la cabeza y soltó un suspiro.

— Mira, te debo una disculpa. — dijo mientras llevaba una mano a su cabello y se rascaba. — Sobre el beso, no debi hacerlo tú estas casada y me deje llevar, te llame pero tu esposo me contestó y...

Nicole lo interrumpió en el momento en que menciono a Douglas.

— ¿Qué quieres decir con que mi esposo te respondió? — su tono era de duda.

— Pues hace unas noches atrás te llame, pero siento que habías estado ignorando mis mensajes y llamadas hasta aquel día. — Le empezó a explicar. — Creía que me habías contestado, pero resultó ser tu esposo y sonaba un poco molesto, espero y no te haya metido en algún aprieto. — agregó rápidamente.

Sabía que Douglas le había estado enviando mensajes e insistido en las llamadas, más nunca llegó a sospechar que Douglas se hubiera atrevido a contestar su celular.

— No, en lo absoluto. No sabía que venías a correr por aquí. — cambió rápidamente de tema.

Con una sonrisa de lado Owen le dijo que recientemente se había mudado cerca de ahí. Sin saber que más decir Nicole le dijo que tendría que regresar a su casa, Owen asintió. Ambos iban de regreso por lo que decidieron ir juntos.

El camino fue tranquilo y Owen no intentó nada con Nicole, al contrario bromeó un poco con ella.

Se despidieron cuando llegaron al inicio, Nicole fue hacia su carro mientras Owen se despedía. Su esposo no le había dicho nada de ninguna llamada.

Mientras Douglas, había ido a almorzar con Paul y Killian, estaban platicando cuando el celular de Killian sonó y este se disculpo para pararse y contestar.

— Pues al parecer a nuestro socio le ha pinchado el bichito del amor. — dijo en broma Paul.

— Y ni hablar de ti con Audrey.

Observó como su amigo de varios años se tensaba al escuchar esas palabras. Paul y Audrey apenas se habían conocido un mes cuando empezaron un noviazgo y a los pocos meses Paul le había pedido matrimonio.

Douglas no estaba muy seguro acerca de si Paul realmente amaba a Audrey o había algo más detrás de su apresurado compromiso. Más no comentó nada, al fin y al cabo quien era él para hablarle sobre el matrimonio si se caso con Nicole sin siquiera pasar por un noviazgo.

— Lo siento. — dijo Killian regresando a la mesa.

Paul Río, bromeó con Killian sobre si esa llamada había sido de trabajo o de Desirée.

— ¿Qué acaso no es la organizadora de bodas? — preguntó curioso Douglas.

— Si, así es mi amigo. — le respondió Paul dándole unas palmaditas a la espalda de Killian. — Todo parece indicar que alguien se ha quedado prendado por la organizadora. 

ღღღ

Era de noche, Nicole se encontraba preparando un sandwich cuando escucho el motor de un coche y al poco tiempo como alguien entraba a la casa.

Salio de la cocina y fue a la sala, Douglas le dio las buenas noches seguido de un beso. Se estaba acostumbrando rápidamente a esos pequeños detalles por parte de Douglas.

— Estaba haciendo sandwiches. — le dijo Nicole. No sabía cómo sacar la platica sobre la llamada de Owen.