Pov Autora.
Ismael toce ante de bajar y Mael sé pone de pie rápidamente, Mafer lo mira extrañada.
— vamos a comer, tengo hambre — dijo Ismael dando una sonrisa, de oreja a oreja.
Mafer se pone de pie, Ismael se da cuenta que Mafer está utilizando el anillo, pero prefiere hacer que no vio nada.
Cenaron y después de cenar se sentaron en la sala. Ismael no sacaba de su cabeza la escena dónde Mafer y Mael se estában besando.
Jamás imagino qué tanto Mael como Mafer, que decían odiarse, acabarían enamorados.
— Mafer, no me has dado respuesta de lo que te propuse — Ismael, observa el más mínimo gesto de Mael.
— sobre eso... agradezco tu ayuda Ismael, pero no puedo aceptarla.
— entiendo, pero puedes usar la tarjeta con tranquilidad.
— ¿la tarjeta? — Mafer mira a Mael y luego a Ismael — ¿el no te la ha dado? — pregunto.
— no. Mael tú no me has dado nada.
— discúlpame lo olvide — Mael saca de su billetera, la tarjeta qué Ismael le dio a Mafer.
— ¿seguro qué no la nesecitas? — Ismael coje la tarjeta.
— no, pero gracias — Mafer le da una sonrisa.
— bueno, en otra ocasión será, pero cualquier cosa no dudes en llamarme.
— lo haré.
— me tengo que ir, tengo hacer unas cosas — comenta.
— pensé que te ibas a quedar más tarde — dice Mael.
— es qué... tengo qué hacer algo.
— ve con cuidado.
— si.
Ismael se despide y se va. Mael se pone de pie.
— voy a darme un baño.
— claro — Mafer lo ve irse, pasa su mano por su cabeza.
— ¿qué te pasa Mael? — susurro.
Pov Mael.
¡¡maldición!! Está guerra interna, ¡me va a volver loco! Y eso qué recién está empezando.
Entro a mí habitación, busco algo cómodo y me meto al baño, me desvito voy a la ducha. Cierro mis ojos, al sentí el agua en mi cara, y aquel recuerdo viene a mi, el recuerdo de Ismael y yo cuándo teníamos cinco años.
Inicio de Flashback.
La muerte de mis padres, estaba reciente y los extrañaba demasiado.
— Mael — la voz de Ismael me hace alzar mi mirada.
— Ismael — se acerca a mí y acaricia mí cabello, no puedo contener mis lágrimas — mama, papá ellos... — lloro.
— ellos están en el cielo Mael, desde ahí te están cuidando y te cuidarán siempre.
— los extraños Ismael, los extraños mucho, extraños los abrazos de mamá, extraño jugar con papá — limpia mis lágrimas.
— lo se, se que los extrañas mucho Mael; pero no estés triste, por qué si tu lo estás, yo también lo estoy. — me abraza y me desahogo — Mael, no estas solo, yo siempre estaré contigo, te cuidaré, te protegeré; por qué tú eres mi mejor amigo, mi hermano.
— Ismael ¿estarás siempre conmigo?
— siempre Mael, siempre estaré contigo, hasta cuándo seamos viejo. Estaré contigo, hasta el día en qué me muera — acaricia mi cabello.
Cuando ya no tengo lagrimas, el deja de abrazarme, y me da una gran sonrisa.
— Mael, alza tú dedo meñique — hago caso y alzó mi dedo meñique.
— yo Ismael Laudex, prometo cuidarte y estar siempre a tú lado; hasta qué seamos viejos, Mael nuestra amistad durará siempre — une su dedo meñique, con el mio — es una promesa.
Fin de flashback.
Me termino de bañar, me visto y salgo del baño, Fernánda esta en el respaldo de la cama.
— hoy te demoraste mucho.
— se me paso el tiempo
— ven te quiero contar mi día — camino hacia la cama y me pongo a su lado.
Ella se recuesta a mí y toma mi mano y la entrelaza.
— hoy él profesor más jodido, hizo grupo de dos para dar exposiciones.
— ¿con quién te toco?
— adivina — no conozco a nadie de su compañeros, sólo a los dos del aquel día de la fiesta, que ni sus nombres se y a Ana.
— Ana.
— si, me toco con ella.
— ¿se pelearon?
— no, pero estamos tratando de llevar la fiesta en paz ....
Y así hablo hasta qué se durmió. Acaricio su mejilla, beso su frente, me muevo un poco y la acomodo bien.
Me pongo de pie y voy al sofacama, trato de conciliar el sueño; pero me es imposible.
Pov X
El sonido de la llamada me despierta... abro la llamada sin ver quien diablos es.
— hola.
— ya llegue a Miami — es Judit.
— y para eso llamas a esta hora.
— ¿quién me pidió, que te llamaran cuándo llegara?
— ¡ah, cierto! Vete a tu casa mañana hablamos.
— bueno — colgué y volví a cerrar mis ojos.
Que mujer más fastidiosa; pero ya quiero ver la reacción de Mael a verla.
Pov Mafer.
Me desperté y Mael no esta, talvez este desayunando. Voy a mi habitación, me arreglo y bajo a desayunar.
El esta ahí, en la mesa. Esta serio, decidí no preguntar y desayunar en silenció, esto me tiene mal. Terminamos de desayunar, cada quien fue a su habitación. Cepille mis dientes y baje, él ya me esta esperando en la limusina, así que entre, y Carlos comenzó el recorrido.
— oye — decido romper el silencio.
— dime — responde a mi llamado, con un tono sereno.
— estás como rarito.
— es qué pasó algo con el hotel y eso me tiene pensativo.
— ¿es algo gravisimo?
—- no es nada grave; sólo una cosa pequeña — si es pequeña ¿por qué lo tiene tan pensativo?
— pero no pongas esa cara; que no me gusta.
— pero así es mi cara.
— Pero cuando sonríes, te ves mejor — sonríe, pero no es la misma sonrisa de antes — ¿te puedo abrazar?
— no es necesario pedir permiso — lo abrazo.
— todo saldrá bien — le digo, me separo de el y tomo su mano.
Después de unos minutos, llegamos a la facultad, le doy un bes en la mejilla.
— ¿vienes a almorzar?
— si.
— te veo luego — asiente.
Salgo de la limusina y entro a la facultad, voy al salón, veo a Rosy y voy rápidamente hacia ella.