Capítulo 20

-Tu lugar está con nosotros Alexa, eres mucho mejor que ellos.- el tono de Frank volvió a ser calmado- Nunca te aceptaran, te crearán un monstruo. Tu lugar está con nosotros, piensa en todas las personas que ayudaste.

-¿Todo este tiempo supiste de él?- señaló a Alex- ¡¿PORQUE NO ME LO DIJISTE?!

-Alexa escuchame….

-¡ME MENTISTE!

-¡BASTA! ¡TE CUIDE CUANDO TU MADRE ERA UNA BLANDA Y MIRATE AHORA, CON DOS DONES! ¡SE LA BUENA Y OBEDIENTE NIÑA QUE SE QUE ERES Y VEN AL JODIDO LABORATORIO! ¡SINO SERÁN POR LAS MALAS!

-¡NO!- rugió furiosa y aterrada al ver los cambios repentinos de comportamiento de Frank.

- Si no vienes él muere-señaló con la pistola a Alex-¡LO MATARÉ COMO MATÉ A TU MADRE!. ¡MUÉVETE Y VE AL LABORATORIO!.

-¿Qué?- el dolor la atravesó y su cuerpo comenzó a temblar.

Alex trató de zafarse mientras gritaba como un desquiciado, a tal punto que parecía un animal sarnoso. Los guardias lo sujetaron con más fuerza y para calmarlo, Frank la volvió a apuntar con el arma.

-Sino me crees, pregúntale a él- se dirigió a Alex- Habla o me encargare que su estadía sea peor que la tuya.

- ¿Alex?- miró suplicante a su hermano, él nunca le había mentido, siempre le había dicho la verdad. No hizo falta que él dijera nada, con ver sus ojos llenos de lágrimas fue suficiente.

-La mató frente a mis ojos…

Su hermano lloró, como si no hubiera tenido el tiempo para llorar la pérdida de su madre. Alexa no sabía cómo sentirse, su madre siempre había estado muerta para ella porque eso le habían dicho desde niña, hacía unos segundos se enteró que había estado viva todo este tiempo y segundos después se volvió a enterar de su muerte. Ya había llorado la muerte de su madre hacía mucho tiempo, pero se permitió llorar por la vida que pudo haber tenido.

Todo era una mentira, se quedo inmóvil sin ser capaz de hacer nada. Su mundo se vino abajo por completo. Apretó con fuerza los documentos que aún conservaba. Él había estado detrás de todo y la había manipulado a su antojo, pero aún quedaba una respuesta que quería y quería que él se la dijera. Quería que él fuera capaz, de una vez, de decirle la verdad, sin ningún tipo de manipulación.

-¡¿POR QUÉ LO HICISTE?! ¡¿PORQUE MATASTE A NUESTRA MADRE? ¿PORQUE NOS SEPARASTE?

Le dolía hablar y sobre todo, le dolía recordar. Frank la había arrancado de su familia, podría haber vivido una vida normal junto a su madre y a su hermano. Pudo vivir en una familia amorosa y haber transitado una niñez normal, pero él se la había arrebatado.

-¡Porque era necesario!. Mira todo lo que he logrado. Llegué lo suficientemente lejos y no me iba a quedar atrás, tenía que intentarlo pero tu madre se rehusó a que los usara a ambos. ¡Gemelos!- vociferó aquella palabra como si fuera una hazaña-Hubiera sido un idiota si no hubiera aprovechado esa oportunidad, pero tu madre se negó. Hice lo que tenía que hacer.

-¿PORQUE ME MENTISTE?

-¡PORQUE NECESITABA RESPUESTAS!- señaló hacia la puerta -¡ELLOS SON LA RESPUESTA!-gritó eufórico- Todo este tiempo estuvo en el ADN, por eso conservaste tu segundo don porque era de tu madre. Imagina lo serías capaz de hacer si tuvieras su don-señaló a Alex- Serias indestructible, ¿acaso no lo ves?

- ¿Ese fue el plan todo este tiempo? ¿Querías convertirme en una máquina de matar?

-Tic tac Alexa, no hagas que pierda la cabeza- la volvió a apuntar con el arma- Ya sabes de lo que soy capaz. Todo este tiempo te trate bien, no hagas que comience a tratarte mal ahora.

-¿Por qué?- lloró viendo a Alex sujetado por los guardias. Observó todo a su alrededor y no le encontró sentido a provocar todo eso.

-Todos quieren poder. ¿Y qué es mejor que tener poder? Estar a cargo de ese poder. La gente está desesperada y haría cualquier cosa por él. Si logre extraer dones e insertarlos en ti, imagina lo que lograría con los Garlets que no tienen uno o con aquellos que ansían ese poder que nunca estuvo en su ADN. Juntos seremos imparables. Siempre fuiste especial, Alexa- su voz se volvía cada vez más suave, provocando que un escalofrío le recorriera el cuerpo- Mi querida, seremos dioses y nadie será capaz de doblegarnos. El mundo se arrodillaran ante nosotros.

- Estas demente.

- No, solo me aprovecho de quienes sí lo están. Tu eres especial, no eres una blanda como tu madre, ni una Garlet como tu hermano, que tardó en desenrollar su don, ni siquiera como yo, que nunca lo conseguí. Fuiste un éxito querida, imagínate todo el poder que tendrías. Si yo conseguí tanto poder sin ningún don, imagina el que serás capaz de alcanzar con mi ayuda… solo necesitas el de tu hermano y nadie nos parara.

-¿Y seguir siendo tu experimento? ¿para seguir controlándome?- apretó sus puños llena de impotencia-¡No!

-Por las malas entonces- apunto con el arma a Alex y apretó el gatillo.

Fue como si se le cortara la respiración, sintió una gran presión en la cabeza y otra vez volvió a hacer uso de sus manos, así logró detener la bala a centímetros de la frente de Alex. El rostro de Frank se transformó en una mueca de asombro y algo caliente se deslizó hasta su boca, la sangre caliente le goteo hasta el mentón.

Alex tenía los ojos abiertos como platos y bastó con que ambos se miraran para saber que hacer a continuación. Alexa alejó la bala y Alex aprovechó para zafarse de los guardias y una vez libre, los torturó mientras ella empujaba a Frank lejos.

Se acercó a él mientras los gritos de los guardias resonaban a lo lejos, no se atrevió a ver lo que ocurría detrás pero tampoco fue capaz detenerlo. Ella había visto lo que le habían hecho durante meses y sabía, por lo poco que lo conocía, que él no era una persona con piedad.

¿Quién podía serlo después de ser torturado por meses?

Frank estaba aturdido, pero sin una pizca de miedo y Alexa se quedó mirándolo sin saber que hacer a continuación. Era consciente de que, si lo dejaba con vida, él los perseguiría y entonces no habría lugar donde estuvieran a salvo, ni ellos ni los demás seres. Nadie estaría a salvo si Frank y el personal, seguían libres e impunes, ¿Qué podía hacer ella? ¿llevarlo ante la justicia, cuando esa misma justicia había aprobado todo eso?