Ryoma se encuentra en una habitación del hospital militar a cargo de las fuerzas de defensa de Neo Tokyo, como Kenzo, Elizabeth y él presentaron heridas serias en diferentes zonas del cuerpo, fueron separados para analizarlos y dependiendo de que tan serio es, poder operar o dar tratamiento. Por fortuna, el capitán de la shield force y Kenzo son de cuerpos resistentes y el daña apenas era critico por lo que no se requiero de cirugía.
Para asegurarse y como medida de control para cualquier clase de inconveniente con la energía viral que recorre por sus venas, hay un grupo de guardias apostados en la puerta y cada dos horas los médicos le hacen análisis con tratamientos médicos. Se supone que es porque Ryoma es un humano con el virus en su cuerpo pero que no perdió la humanidad, sino que le benefició. Al fin y al cabo, es un miembro y capitán de la shield force, una unidad a nivel internacional que fue sancionada duramente por los diferentes gobiernos supervivientes.
Consciente de su condición en Neo Tokyo y la de su unidad, Ryoma acepta ser tratado sin objeciones, inclusive lo mantienen con los brazos y piernas amarradas a la cama. Trato inhumano pero establecido por la ciudad para evitar problemas.
Desde que llegó al pabellón medico Ryoma está despierto y mirando al techo, preguntándose por el destino de sus subordinados y lo que vino con la shield force Z. Las teorías que se hace rápidamente se disipan con la figura de un individuo al que consideraba como mentor alguna vez respetado por la unidad.
Entonces, se siente un silencio rotundo que lo lleva a mirar hacia la puerta y ve como una sombra detrás se asoma y el ruido de la manija girándose por una fuerza externa. Ryoma se queda con calma, pero en estado de alerta. Los medicamentos hacen efecto y lo dejan debilitado y tumbado pero una silueta entra a la habitación y cierra la puerta. El solo hecho de acercarse provoca nostalgia y temor en el capitán:
-¿Q-Quién eres?-pregunta Ryoma.
-¿Esa es la manera de dirigirte a un conocido?
-¿T-Theo?
-Es bueno verte cadete o bueno…ahora eres capitán. Vaya que el tiempo pasa ¿huh?-se acerca a una silla y se acomoda en ella
-S-Se…supone que estaba muerto.
-Muerto es la condición que esos peces gordos querían de mi pero no les di la oportunidad. Vaya que las cosas se resisten a cambiar. Permanecen los poderosos y los pobres siguen siendo blanco de abusos.
-Que extraño que digas eso siendo que masacraste a muchas personas inocentes en Londres.
-Te equivocas en eso. Yo no maté a civiles sino a quienes no buscan el bien común. Lo notarás cuando veas entrar en crisis a la ciudad. Se matarán entre sí para sobrevivir.
-No veo la más mínima diferencia. Solo matas por…placer…deseas ver gente morir.
La imperturbable expresión de confianza y siempre estar un paso delante de todos no cambia, pero siente que es el momento de por fin hablar con seriedad sobre los planes que tiene para con la humanidad. Un plan que necesita compartir con aquel cadete que entrenó y ayudó a volverse un talentoso miembro de la shield force.
Puede que funcione como puede que se niegue, no hay punto medio. Theo levanta su pierna derecha y la apoya sobre la izquierda y luego posa la mirada hacia el vulnerable Ryoma:
-¿Sabes que se dice de aquello que obtuvimos las habilidades de la infección?-pregunta Theo.
-Se dicen muchas cosas ¿no crees que es muy ambiguo?
-Si, si, tienes razón. Reformularé mi pregunta. Según parece, las sociedades que se formaron en este mundo postapocalíptico tienen una cierta idea para con las personas como nosotros. Una idea que se asemeja a un gueto. Dicen, se dice que tendríamos que haber sido mejor controlados ya que somos pocos, pero extremadamente peligrosos y creo que tienen mucha razón. De por si uno solo puede poner en jaque a una comunidad, imagínate las ciudades si somos muchos más.
-¿A qué quieres llegar?
-Necesito de tu ayuda y la de tu unidad. Podremos ponerle fin a la era del homo sapiens y coronar a los infectados como dueños del planeta.
-¿Qué demonios es lo que pretendes hacer? Tu…tu no eras así, eras mejor ¿Qué fue lo que te pasó?
-Solo abrí los ojos ¿tu, ¿no?
En cierta forma, Theo se decepciona de que Ryoma no parece convencido sobre lo que le plantea, entonces refuerza los intentos con sus propios fundamentos:
-¿Cuántos compañeros has visto morir solo para que los políticos y estas personas sigan rechazándolos? Se supone que debíamos ser adorados. Pero…apenas comprenden lo complejo que se ha vuelto el mundo. -extiende su mano y quita el guante para mostrarle el grado de perfeccionamiento de su habilidad al crear el virus en estado líquido y gaseoso que sale de la palma. Ryoma solo observa, incrédulo. -A pesar de que el mundo está en una crisis donde la humanidad intenta arañar su supervivencia siguen haciendo negocios y corrompiendo un sistema ya destruido.
-Suenas como si quieras destruir el mundo y toda la humanidad. Para lograr algo así…tienes que poseer un grupo y un plan.
-¿Crees que vengo aquí sin un plan? Esto lleva mucho tiempo.
-Desde que trataste de destruir Londres?