Capítulo 13 | Nuevas noticias

—¡Hailee, pon atención!— le llamé la atención, porque no dejaba de usar su teléfono y estábamos en clase.

—Ya voy, espera— dijo, y segundos después guardó su teléfono. Así es, estábamos en clase. Era lunes y ayer, a mediodía dejaron salir a Ashton del hospital, sólo tenía que tomar reposo unos días y estaría como antes.

Después del mensaje extraño, ya no pude conciliar el sueño, pero no importó, al amanecer pudimos salir los tres de ahí y, llevamos a Ashton a casa, yo me quedé la mayor parte del día con él, cuidándolo y ayudándolo en lo que necesitaba.

Dejé a Ashton, para irme con Hailee, Calum y Luke a la delegación, era necesario que declaramos. No demoramos mucho ahí, a excepción de Luke, por lo del arma, pero al parecer tendrían que seguir investigando. Decidí no decirles nada del mensaje, pensé que podía tratarse de una broma. Y a Ashton mucho menos le conté de eso, él necesitaba descansar y eso lo alteraría.

—Creí que no acabaría esa clase nunca— habló Hailee, haciendo que volviera a la realidad.

—¿Ah? Yo tampoco— reí por lo que dijo, aunque no estaba segura de lo que había dicho, pero supongo hablaba de que la clase había terminado, pues mis compañeros comenzaron a salir.

Tomamos nuestras cosas y salimos del aula, dirigiéndonos a la cafetería, buscábamos a los chicos con la mirada en los pasillos. Como no los encontramos, fuimos por nuestro almuerzo y buscamos una mesa.

—¡Mira! Allá vienen los chicos.— Señaló Hailee con la cabeza, detrás de mí, miré por encima de mi hombro, y los vi entre la multitud. Hailee y yo nos sentamos y esperamos a que ellos se acercaron.

—¿Y cómo sigue Ashton?— preguntó Hailee.

—Pues ya esta mejor unos días más en descanso y vuelve a la universidad.

—Tendré que ir a verlo, desde que entró al hospital no lo volví a ver.

—Pues cuando quieras sabes que yo lo estoy cuidando— le sonreí.

En ese momento llegaron los chicos, y tomaron asiento con nosotras.

—¡Chicos! ¿Ya supieron la nueva noticia?— preguntó Calum mirándonos a ambas.

—No, ¿De qué hablas?— dije yo dudosa, mientras todos miramos a Calum. Incluso Luke y Michael.

—Todos pensaban que era un atentado terrorista o algo así, pero nada que ver con eso. A lo que he escuchado en los pasillos de la escuela, se dice que alguien esta metido con el narcotrafico o negocios así y querían darle un susto.

Ninguno supo qué decir a eso, sólo nos miramos entre nosotros, todo había sido muy raro.

—Si querían a alguien en especifico, no sé por qué nos tendrían que asustar a todos— habló Hailee.

—Nadie entiende eso, Hailee— le respondí.

—Pero hirieron a Ashton, ¿Qué hay del sujeto que le hizo eso?— Calum preguntó.

—Eso será difícil, no hay rastro de ese hombre

—Hmm... Mike y yo tenemos algo que hacer no quería interrumpirlos, lo siento, pero el descanso está por terminar— habló Luke por primera vez. Hailee sólo lo miró extraño pero no dijo nada. Calum sólo asintió.

—Está bien, Luke— hablé por todos.

Luke y Mike se retiraron y nosotros decidimos dejar de lado el tema de lo sucedido en la fiesta.

Las clases se terminaron y no volvimos a ver a Luke y a Mike en todo el día. Pero ¿Qué más daba?

Llegué detrás de la barra del restaurante y visualice a Chris limpiando las mesas del fondo.

—¡Vaya! La señorita se ha dignado a venir a su empleo— dijo él acercándose a la barra.

—Chris, sabes lo que ha pasado.— Rodé los ojos.

—Lo sé, es sólo una pequeña broma. ¿Cómo ha seguido Ash?— se burló de mi forma de llamar a Ashton.

—Pues como afortunadamente no fue nada tan grave, en unos días, creo que podrá volver a la universidad.

—Oh, me alegro— sonrió.

—¿Sabes? Yo he estado con él desde que salió y al parecer se recuperará pronto.

—Que buena eres Sam.— Me guiñó un ojo y en eso entró un cliente, me sentí aliviada. Chris se dirigió a la cocina.

Llegó la hora de cerrar el restaurante y decidí ir a casa de Ashton para ver qué tal estaba.

Llamé a la puerta y la mujer del servicio me abrió, permitiéndome pasar. Ashton se encontraba en su habitación, así que como no estaban sus padres, yo sola hice mi camino hasta allá.

—¿Ashton?— lo llame, dando unos suaves golpes a la puerta. Escuché desde dentro un susurro que decía pase, y eso hice.

—¡Hola Ash! ¿Qué tal estás?— pregunté, apenas llegué junto a su cama donde él se encontraba acostado.

—Pues supongo que bien sigo respirando— intentó reír.

—¡Ashton! No es gracioso.— Lo mire mal.

—Lo siento.

—Bueno ¿necesitas algo?

—No, todo está bien. Si necesito algo está Rose— sonrió y supuse que Rose era la mujer que me abrió la puerta. Después de eso se creó un silencio incomodo, donde sólo nos mirábamos y sonreíamos.

—Hmm ¿Quieres qui-quieres hacer algo?— rompí el silencio que nos acompañaba; tal vez con una pregunta muy tonta porque Ashton estaba en cama y no podía hacer muchas cosas. Lo pensó un rato un habló:

—Pues, no sé qué podríamos hacer.— Se encogió de hombros levemente para no lastimarse, al mismo tiempo que sonreía.

Yo reí porque él tenía razón. Y la habitación se volvió a llenar de un silencio incómodo.

Para nuestra suerte, alguien llamó a la puerta, ambos pusimos la mirada en ésta, quise levantarme a abrir pero cuando lo iba a hacer, esta se abrió, gracias a que Ash sólo dijo pase.

Ambos vimos a Calum y a Hailee entrar.

—¡Hola chicos!— saludó Calum, caminando hacia nosotros, llegó junto a Ashton, puso su mano en su hombro y se sentó en la orilla de la cama. Hailee, por el contrario sólo se limitó a quedarse de pie junto a mí.

—¡Hola chicos!— saludó Ashton mirando a cada uno. Ambos sonrieron. Y después de eso, volvimos a caer en un silencio incómodo.

—Oigan— habló Calum, rompiendo el silencio y provocando que todos lo miráramos. —Deberíamos hacer algo esto esta un poco aburrido.— Señaló con sus manos todo nuestro alrededor.