Ocho días

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—es hora de cenar Kookie, tenemos tareas y debemos descansar bien, ¡no así como lo hemos hecho!

De manera natural se frotó un poco su cabeza en el pecho de kook, acto seguido levantándose yendo al comedor, haciendo que kook le siguiera, no debía hacer movimientos bruscos, solo debía tomarse el tiempo de despedirse apropiadamente antes de tener que irse de verdad.

Le había pedido a su padre que volvieran a su casa de Dublín ya que allí tenían la mayoría de negocios actualmente así no tendría que estar viajando, así que poco a poco empaco los más importante, para que fuera enviado a su casa en Dublín, hizo la gestiones apropiadas para mover la urna de su madre, ya que no tenía planes volver a Cork.

La salida con los Choi se llevó a cabo, era verdad que saldría con ellos, entre todos los que estaban en esa fiesta, pudo ver a Min SooHae fue su amor de la adolescencia, pese a que nunca fueron nada supieron de sus sentimientos, pero sin poder hacer nada principalmente por los padres de ella, en unos segundos volvió a esos días donde estaba profundamente enamorado de ella, se había puesto más hermosa, esa cabellera castaña esos ojos cafés intensos, los sentimientos estaban presentes pero ya no eran los mismos ni los más importantes, pero estaba feliz de verla.

Ella lo contempló al otro lado del salón, dándole una sonrisa hermosa, fue como una invitación para acercarse a ella, al estar cerca, Hae lo tomó de la mano y lo llevó a uno de los balcones, el cielo estaba de lo más precioso, y quería tener unos minutos a solas junto a él.

Este ha sido el mejor regalo de cumpleaños Tate… lo abrazó! El Sonrió y le respondió el abrazo, si bien el sentimiento era muy diferente del que sentía hace años, el aprecio y cariño allí estaban presentes. Esta por demás decir que Holly odiaba a muerte a SooHae y por obvias razones, ella quería acaparar a Tae pero la castaña tenía siempre un ambiente de interés y misterio más cuando le reveló que seguía con sus clases de ballet pero no reveló qué tan buena era.

Intercambiaron sus números telefónicos y acordaron verse pronto, extrañó terriblemente a kook pero se lo pasó muy bien y conoció personas nuevas, increíble pensó, pase años en soledad… Kookie vino a llevarlo todo, una sola persona cubrió todos los espacios, y ahora que lo estoy sacando fuera otras personas están viniendo aunque no creo sean suficientes serán de ayuda.

Ingreso en la residencia Jeon ya entrada la noche, se fue directamente a la habitación, al ingresar no vio a Kook, se extrañó un poco, se preparó para dormir, los minutos pasaban pero no había señales de él, tomo su celular y salió de la habitación, tuvo sed por lo que al ir a la cocina vio a Kook en el sillón de la sala se había quedado dormido, no lo resistió y le tomo una fotografía, se sentó en la mesita frente a él, pensó por un momento que no se merecía una persona así, y que lo mejor era dejarlo ir, sus ojos picaron y las lágrimas salieron, era difícil vivir sin él pero ya lo había hecho antes tendría que hacerlo en unos días. Así que crearía los últimos recuerdos que serían los más preciados, hasta que se volvieran a ver o si nunca no habría esa probabilidad!

No debía, luchó con la poca cordura que le quedaba, pero aún así, se sentó en el regazo de kook y apoyó su cabeza en su hombro, kook al sentir la opresión del peso sobre él, se despertó, reconoció de inmediato esa cabellera castaña, una de sus manos acarició la espalda mientras la otra revolvía un poco más el cabello del chico.

—que haces durmiendo de esta forma tan incómoda?

—me senté a esperar a alguien, pero no supe en qué momento me dormí si ni siquiera es tan tarde.

—espero que haya valido la pena esperar, porque podrías haberte ido a dormir perfectamente a la habitación y esperar allí!

—no! De verdad quería verte de haberme dormido te vería hasta mañana!

—bueno vamos a dormir, mañana hay clases, y no podemos faltar…

Hizo el impulso de levantarse, pero Kook paso su brazo atrás de sus rodillas y en su espalda levantándolo sin mucho esfuerzo, Tae seguía sin subir de peso y eso lo tenía preocupado un poco.

—hey! No hagas esto Kookie!

—no pesas Tae, tendré que aumentar tu ingesta de calorías, estás muy delgado!

—en este medio sabes que es mejor estar delgado…

Al escuchar eso, un poco molesto quería lanzarlo a la cama, Tae sabiendo su intención se aferró a él, haciéndolo perder el equilibrio, cayendo ambos.

—me ibas a lanzar!

—era el plan pero fui descubierto!

Ambos rieron y se acomodaron para dormir, kook ya andaba listo.

—quieres hablar de cómo te fue con los Choi?

Tae se acercó de forma natural para dormir en los brazos de kook, quién lo recibió de manera habitual —no, Kookie vamos a dormir, hablamos mañana.

Ya sólo quedaban 10 días para la graduación, Tae iba marcando los últimos días, la mayoría de tareas y proyectos ya habían sido entregados y recibidos, Jungkook estaba recibiendo invitaciones de algunas universidades tenía un buen récord académico y también era alguien atlético, aunque sin decirlo a nadie se quería involucrar en la universidad de Tae, ante todos sus movimientos sus padres decidieron hablar con el otra vez.

Estaban un poco cansados de esa situación, su hijo tenía buenas y muchas oportunidades pero ellos debían volver a Corea y no lo querían dejar fuera de los cuidados de la familia, no importaba si no vivían en la misma casa pero debían estar próximos por lo menos, kook estaba cansado de explicarles a sus padres, deseaba estudiar allí y seguir con lo que ellos le pidieran pero quería estar para Tae mientras seguía con su vida. Los Jeon no eran de discutir pero esto se les estaba saliendo de las manos!