El mundo se estaba levantando lentamente de entre los escombros y poco a poco nuestras vidas volvían a la normalidad.
Jungkook y yo ahora vivimos juntos en Busan, la madre de Jungkook y el resto de su familia nunca aparecieron, supusimos que ellos no corrieron con la misma suerte que nosotros. En cuanto a mi madre, bueno habíamos logrado ponernos en contacto con ella un par de veces y le confesé sobre la relación que tenía con Jungkook, para mi desgracia, no la aceptó.
Ella aceptaba completamente el hecho de que yo fuera gay pero lo que no podía aceptar es que estuviera con Jungkook, aún éramos primos y nos gustará o no lo seríamos toda la vida.
Pero sin importamos nada él y yo seríamos completamente felices y seguiríamos adelante con nuestra relación, nos amábamos más que a nada en el mundo y eso no podría cambiarlo nada ni nadie.
Habían pasado un par de semanas y todo parecía ir con normalidad, nos faltaba poco para terminar de arreglar nuestra casa, mi relación con Jungkook iba de maravilla y ahora solo podíamos ser completamente felices, pues nada impedía nuestro amor.
•¡Jungkook! Ya esta la cena, baja a comer.
–¡Dame un minuto mi amor!
Sonreí de manera tierna y fui a la mesa poniendo ambos platos, me acomodé en el asiento y espere a que Jungkook bajará. Unos minutos después me levanté de la mesa haciendo un puchero, estaba tardando más que de costumbre.
•¡Kooki ya tengo hambre! Baja a comer.
Mire hacía las escaleras esperando una respuesta pero no la hubo, me asusté un poco y empecé a subir rápidamente, llegue a la habitación y entré mirando todo, Jungkook no estaba ahí.
•Kook ¡Jungkook! ¿Dónde estás?
Empecé a llorar y seguí buscándolo en cada rincón, revise el clóset, bajo la cama, el baño, tras la puerta, todo, pero Jungkook no estaba allí. Me asome por la ventana y no había nada, salí de la habitación y mire todo el pasillo, no estaba ahí.
•¡¡¡JUNGKOOK!!!
Grite con todas mis fuerzas mientras las lágrimas bajaban sin parar por mis mejillas, estaba realmente asustado ¿Y si algo malo le había pasado? Peor aún ¿Y si esas cosas regresaron y se llevaron a Jungkook? Mi corazón latía con fuerza, estaba a punto de colapsar cuando sentí una mano sobre mi hombro, grité asustado y me di vuelta rápidamente.
–Hey~ tranquilo bebé ¿Qué ocurre?
•¡Eres un tonto! ¿¡Dónde estabas!? ¿Acaso quieres que me de un infarto? ¿Por qué no respondiste?
–Amor tranquilo, todo esta bien, solo estaba arriba en el ático y no te escuché.
•Tonto.
–No te pongas así precioso~ dame un abracito.
Di un ligero golpe en su hombro y luego lo abrace con fuerza ocultandome en su pecho, realmente no soportaría que nada malo le pasará a Jungkook.
–Estoy bien amor, no te preocupes.
•Por favor, ya no me asustes de esa manera.
–No lo haré, te amo mi amor, te amaré sin importarme nada, te amaré toda mi vida, eres lo mejor del mundo.
•Yo también te amo Jungkookie~ y te voy a amar siempre, eres lo mejor que me pudo haber pasado.
–Promete que vamos a estar juntos sin importarnos nada más, que nunca nos vamos a separar y que lucharemos contra cualquier cosa para salvar nuestro amor.
•Te lo juro Jungkookie.
Sellamos nuestra promesa con un beso y nos abrazamos fuertemente, sintiéndonos seguros en los brazos del otro, nada nos separaría nunca, podimos estar completamente seguros de eso, nuestro amor era el amor más fuerte que había conocido alguna vez y estaba seguro de que así sería siempre.
Fin.
Es el fin de esta hermosa historia :c realmente me encantó escribirla, quiero agradecer a todos los que la han leído y le han dado tanto amorcito :3 y quiero informarles que en unos días más probablemente saque un par de capítulos extras ;3 cuídense mucho (◍•ᴗ•◍)❤.