Desde hace meses mi madre a estado saliendo con un señor y se an “enamorado profúndame“ pero al menos para mi, se necesit mucho mas tiempo ora poder decidir si es un amor profundo o simplemente un capricho. Decidieron mudarse juntos y me arrastran junto a ellos…
Termino de acomodar las maletas y decido avisarle a mi madre
-Madre, ya acabe con mis maleta— la veo bajando las escaleras con sus maletas.
-Ya estamos listas entonces cariño—dice sonriéndome.
-Me recuerdas porque tenemos que mudarnos de nuestra casa para ir con un señor completamente extraño?— digo mirando a un punto fijo.
-Nos mudaremos porque el no puede venir a vivir con nosotras, su trabajo y sus negocios están allá hija, por favor solo no seas tan dura, date la oportunidad de conocerlo.
-Solo lo ago por ti madre, ese señor no me importa en lo absoluto.
Finalmente no dijimos nada más, subimos nuestras maletas al auto que su nuevo novio mandó para buscarnos, nos subimos en el y el auto empezó su trayectoria asía el aeropuerto.
Cuando llegamos al aeropuerto nos guían asía un lugar privado y claro, un avión nos esperaba para abordar y finalmente comenzamos el verdadero viaje.
Luego de varias horas de viaje exactamente 14 horas, llegamos y solo nos tuvimos que subir a un nuevo auto y los ayudantes subieron las maletas.
-Debes estar cansada hija…
-Tranquila, solo estoy pensando en cómo serán las cosas ahora que…ya no estamos en California.
-Ya veras que te gustará estar aquí en España hija, será nuevo pero mejor para ti y para mi—me sonríe de forma genuina.
El auto arranca asta una enorme casa o mejor dicho mansión que me sorprendió pero no lo demuestro a pesar de lo hermosa y amplia que se ve, tan solo unos segundos después se ve un hombre de traje, pelo platinado con un traje elegante y una amplia sonrisa.
-Bienvenidas hermosas señoritas—Nos sonríe.
-Tenia tantas ganas de verte—dice acercándose y abrazándolo.
-Por fin ya estamos juntos cariño—Dice aun sosteniéndola de la cintura— Y esta hermosa jovencita debe ser tu hija, es un gusto conocerte por fin Lorena.
-Un gusto conocerlo señor—aunque no me agradó venir me gusta ver a mi madre sonreír y feliz.
-Pasen por favor.
Nos encaminamos dentro de la mansión y nos da un largo recorrido asta terminar mostrándome mi nueva habitación.
-Y esta será tu habitación Lorena, tu madre me dijo que te encanta leer y por supuesto te agregue una pequeña biblioteca para cuando quieras leer—Me sonríe y le devuelvo la sonrisa de forma educada.
Se van de la habitación y finalmente puedo descansar, me quito toda la ropa y me meto a bañar y finalizó el día con una cena algo incomoda y una larga siesta asta el día siguiente.
Luego de unos días ya estaba yendo a la universidad nuevamente, todo en este lugar era nuevo para mi y estaba rara, a tal punto que escuchaba cosas y veía cosas raras todo el día.
-Me estaré volviendo loca?—digo después de ver la misma mariposa por docena ven en el día que cada que la veo escucho una voz que me dice que valla asía el bosque asta que finalmente accedo a ir.
Camine asta el bosque detrás de la universidad y veo un perro extremadamente grande negro y de ojos azules asta que me di cuenta de que no era un perro si no que era un lobo…