ENMUDECE EL VIENTO

El día como un rayo fugaz pasa rápido y no hubo ningún cruce extra de palabras, una vez más anochece e igual a lo ocurrido la noche anterior se repiten los mismos gritos, como si fuese un salto en el tiempo al pasado; amanece y esta vez el señor Richard está totalmente decidido a indagar que es lo que ocurre en la cabeza de Douglas Vonhagen.

Richard, se levanta de su placida cama, toma el baño habitual y se organiza, encuentra a Douglas en la mesa tomando el desayuno y se sienta frente a él, lanza una mirada fuerte pero tranquila al mismo tiempo y hace la pregunta: - ¿Qué pasa contigo?, quiero que me digas la verdad antes que deba comenzar a investigar.

Douglas, asiente con la cabeza, pero aún no sabe cómo iniciar; - you remember that my spanish isn't good (recuerda que mi español no es bueno)-.

- Si, lo sé, pero eso no te eximirá de hablar- contesta Richard.

Douglas comienza a hablar, en su mente trata de ir encontrando las palabras para que su ahora investigador, no descubra que es ruso; pasan algunos minutos y aún Douglas no ha pronunciado palabra alguna, Richard pierde la paciencia y exclama fuerte mente: -¡Qué rayos estás ocultando!-. -Calma- dice Douglas.

Comienza a tejer su historia, con vagos recuerdos, advierte que quizás en un inicio no tendrá sentido, a lo cual Richard no pone ninguna objeción, pues entiende que para Douglas es difícil lograr concordar o hilar bien las palabras.

- Era el año 1940, inicios de lo que se conoce como la Segunda Guerra Mundial, yo hacía parte de...- Vonhagen se detiene, pues debía pensar en lo que debía decir, -¿Qué pasa?-, pregunta Richard, - Nothing- dice Douglas, -era miembro de un grupo élite de avanzada e investigaciones del...- ; nuevamente se detiene, traga saliva y trata de hilar su siguiente palabra, pues piensa que lo que pueda decir, quizá podría ser su fin. Era ya muy viejo y Douglas no podría defenderse de cualquier ataque cual breve que fuese.

-¿De qué?- cuestiona Richard, - de avanzada de los Estados Unidos- responde Douglas, -¡ahhh!- dice Richard.

El ex militar prosigue con su narración, cada vez ocultando su verdadera historia y construyendo su entramado, para no ser descubierto por Richard - Continúe- dice el interrogador. -bien dice Douglas, entre tantos sonidos de disparos, las ametralladora, los cañones y gritos de personas muriendo a mi al rededor, no pude aguantar la presión y la culpa de saber que yo también contribuía a esa espeluznante masacre; cada vez que veía caer personas por un disparo mío, pensaba en que yo podría ser igual a uno de esos. Por lo tanto faltando unos meses para acabar la guerra pedí a mis superiores la baja-.

Douglas, trataba de explicar que quiso retomar el rumbo de su vida, cada instante su gran historia hacia que Richard se interesara más por descubrir el pasado de aquel hombre que se encontraba delante de él; además estaba notando que al parecer este no estaba diciendo la verdad, pues desde que inicio su historia no se le ha notado su falla en el dominio del español, al contrario Richard esta creyendo que lo domina mejor de lo que él quería hacerlo pensar. Aún no estaba convencido de su teoría, pero no descansaría hasta descubrir lo que oculta, para ello comprendió que debía ganarse mejor su confianza y poder acercarse más a él.

Inconscientemente, Douglas estaba tejiendo su propia caída, pero Richard no quería desenmascararlo hasta que supiese realmente quien era ese sujeto, una vez más pidió que continuara, pero antes dijo que tomaran un receso, no quería que se sintiese presionado, se levanto de la mesa; se dirigió a la pequeña cocina, preparó unas bebidas, para refrescar sus gargantas y así bajar la tensión. Finalmente dijo Richard - veo que te sientes algo incomodo, por ahora dejemos esto hasta aquí, y seguiremos mañana, otra vez se sintió ese silencio fuerte y calmado que se llevaba aquellas palabras las cuales hicieron al viento enmudecer.