♡♡♡ 14. Lucinda y los interrogatorios ♡♡♡

Las navidades no tardaron mucho en llegar, con ella los vientos gélidos y las finas capas de nieve que con el pasar de los días se volvía abundante, pero al fin todos tendríamos un respiro del trabajo

Según a lo que Elliot me dijo, los Jones anualmente realizan una reunión con los más allegados, independientemente de si son familia o no, resulta que este año toca con los padres de Elliot, su hermano y su esposa, claramente también sus hermosos hijos, la hermana de la madre de Elliot, William, que es como otro hijo de los Jones, mi madre, Elliot y yo, y según las palabras de mi enamorado lo hacen en una “casa de campo”, propiedad de Zade, si bien tenía en mente un lugar no muy llamativo termino siendo todo lo contrario, es una casa enorme con muchos lujos dentro de ella, y a pesar de eso termino enamorada del lugar

Me lleve una grata sorpresa al tratar con todos, dándome cuenta de que eran mejor de lo que esperaba, la hermana de Liz resulto ser una hermosa mujer de estura baja con una enorme sonrisa y una bocazas sin remedio que adora pelear con su marido, que es igual que ella solo que más alto, ambos se la pasan en un estado eterno de pelea, reconciliaciones y más peleas, lo mejor es que nunca en todo el tiempo que los he visto se han enfadado de verdad, y llevan 15 años juntos

Las cenas son unos de mis momentos favoritos sin lugar a dudas, platicas interminables, risas de niños, olores de comida casera, risas, sonrisas y el hombre que amo, ¿Qué más puedo pedir?

Por primera vez en mi vida experimento un ambiente familiar amplio, lo cual al principio se me antojo raro, puesto que mis navidades se resumían a Gina, mi madre y Evelyn a veces, totalmente diferente a esto. Veo a mi madre sonreír y no puedo estar mas feliz, los remolinos de Zade se la pasan pegados a ella gritándole “tía yeye”, ¿la razón?, ni idea, ¿le encanta?, joder claro que si

—¿Estas bien? —La pregunta de Elliot me toma por sorpresa, enarco una ceja sin dejar de sonreír

—Mas que bien, hace años que no la veía así de feliz—Elliot sigue mi mirada topándose con mi madre que carga a uno de los niños y juguetea con el

—¿Y tú? —Sus brazos me rodean atrayéndome hacia el—¿Estas feliz?

—Estoy contigo, no puedo pedir más—Mi respuesta me gana un beso y una caricia en la mejilla que me derriten

—Gracias a tu madre Zade y Carolina pueden tener tiempo para ellos—Murmura juguetón mirando de reojo a la pareja que esta hundida en la piscina jugueteando

—Me alegre que se ayuden, debe ser extenuante tener hijos

—Ni lo menciones, gracias al cielo somos los tíos sin necesidad de mantenerlos con nosotros por más de dos días como mucho—me burlo y me aprieto más contra Elliot

—Ojalá esto durara para siempre, es…—Busco la palabra—Perfecto

—Pues mas te vale acostumbrarte porque en el año tenemos muchas reuniones así, familiares, acogedoras y con nada de privacidad—Me sonrojo al recordad los sonidos provenientes de la habitación de Zade y Carolina

—Sin duda puedo acostumbrarme a esto

—Podemos quedarnos una semana más, Zade no tiene problemas en dejarnos la cabaña, al final seriamos nosotros con mis padres y tu madre, además de la tía Luciana y el tío Bill

—Tentador, creo que podemos hacerlo—En el fondo estoy segura de que quiero quedarme hasta el ultimo día posible, dejo que mi mirada viaje libremente por la estancia hasta que doy con Will apartado de todos mirando su teléfono con el ceño fruncido— ¿Puedo hacerte una pregunta?

—Dispara

—¿Por qué Will es tan serio?

—Bueno—El deja caer su mirada en su amigo y suspira largamente—Sus padres siempre fueron… han sido unos pesados con él, su medio hermano engreído se lleva toda la gloria con la familia, por lo que Will termino creciendo rodeado de soledad y alejado de las muestras de cariño, supongo que ahora de forma innata busca su soledad, es lo que conoce

—¿Qué hay de una pareja ? —Frunzo el ceño—Ahora que lo noto, nuca lo he visto con nadie

—Terreno escabroso, hace unos 6 años o algo así tenia una chica, el la amaba como un loco, pero un día todo se jodio

—¿Qué sucedió?

—Ella lo mando a la mierda cuando él le propuso matrimonio, le dijo todo lo malo que te puedas imaginar, y a la semana siguiente ella se comprometió con otro hombre, lo mejor es que la sucia cínica lo invito a la boda

—Joder—Me quejo

—Pues ya vez, no le ha ido muy bien, pero no se ha rendido y dudo que lo haga, es un hijo de puta fuerte

Tras esa charla nos retiramos a nuestra habitación donde caemos enredados en la cama y nos dormimos como dos chiquillos, cuando despertamos nos enteramos de que la tía Luciana agendo una excursión a una playa cercana, lo malo es que lo hizo a la hora más temprana, “para disfrutar de la puesta de sol querida”, según sus palabras, todos salimos a las 6 de la mañana con rumbo a donde el tour, todos sin excepción vamos más allá de la desmotivación con ganas de regresar a cama, me da una pizca de envida al ver a los hijos de Zade siendo llevados en brazos, pero me callo la boca, mas que nada porque se que si digo algo Elliot será el primero en ofrecerse para llevarme bien apretada contra su pecho, para eso de las 9 de la mañana todos estamos más despiertos y a la mar de felices, al puesta de sol al final termino siendo invaluable