¿¡somos Hijos De Villanos?!

Capitulo 1

Narra Antonella

Estaba durmiendo tranquilamente hasta que me suena la alarma. Apagó la alarma para no despertar a mi hermano y miró la hora para amargarme más.

Me levanto sin ganas, me voy a la cocina a buscar un medicamento que tengo que tomar en ayunas, vuelvo a mi habitación a buscar la ropa, agarro la ropa y me voy al baño.

Me cambio, me peino, salgo del baño y veo a mi papa prendiendo la tele.

Dejo mi pijama sobre mi cama y voy hacia mi papá, me paro al frente de la tele y le levanto la mano como diciendo hola. Y me pongo a buscar las zapatillas Después agarro mi celular, abro el Gmail con la esperanza de que me llegue un Gmail Mail de la secundaria diciendo que no hay clases cosa que no paso. Me pongo a desayunar. Me lavo los dientes, me pongo el guardapolvo (sí creo que mi secundaria es la única que es obligatorio usar guardapolvo)

Conecto los auriculares al celular y de paso miro la hora eran 6:16

Antonella: Papá dale - dije mirando a mi papa que estaba en ojotas, me mira.

Papa: ¿qué paso? - mirándome

Antonella: ¿vistes la hora? - mira la hora

Papa: Uuuuu dale se hace tarde

Suspiró y me pongo el celular en el guardapolvo, me pongo la campera, agarro la sube y los anteojos, y la mochila.

Salí de casa con mi papá, llegamos a la parada, vemos que viene el 63 lo paramos, subimos.

Cuando bajamos del colectivo, caminamos y llegamos a la parada del 47, y nos encontramos con una amiga

Antonella: holii Xio ¿Cómo estás?

Xiomara: Ah hola Hippie - la miro mal, pero estaba vez cuando la mire mal mis ojos se empezaron a poner verde fuerte - A-a-anto estas bien?

Yo sin entender vi hacia la ventana de un negocio y vi mis ojos y me asusté

Antonella: pa? ¿Papi? ¿En dónde estás? - dije buscando a mi papa, pero él ya se había ido

Miré a Xiomara

Xiomara: tranquila respira tranquila.

Hice caso y respire y de apoco mis ojos volvieron a mi color natural.

Antonella: bueno tratemos de olvidar lo que pasó ¿sí? - ella asintió- a mira vino el colectivo.

Subimos al colectivo y nos sentamos.

En una parada se subió otra amiga, que era Jennifer, pero ella no me reconoció así que le toco el hombro, ella me mira, me sonríe y se sienta adelante de nosotras. Empezamos a hablar de cualquier cosa.

Continuará




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