Después de la fiesta, el señor Black me mandó llamar y me dijo:
-David, sabes que ahora perteneces a esta organización de "serpientes" pero no eres tan valiente como deberías. Tienes que tener sangre fría para llevar a cabo muchas misiones y tú no la tienes. Así que te irás esta misma noche a un lugar que será específicamente para cultivarse física y mentalmente.
Cuando escuché eso inmediatamente pensé en mi hermanita, y lo que él sería capaz de hacerle. Pensé en huir con ella para protegerla pero entonces él puso su mirada en mi, y me miró fijamente a los ojos:
-Si piensas en huir, y que todo marchará bien estás muy equivocado. Porque te encontraré en donde quiera que estés. Rezarás para que la muerte te lleve y no no te llevará solo cuando YO QUIERA.
Me puso las manos en el cuello y empezó a ahorcarme diciendo:
-¡No te llevarás a Ela de mi lado! ¡Te irás con tus malditos padres abusadores al otro mundo!
Creí que estaba a punto de irme para el otro lado cuando escuché el lloro de mi hermana. Entonces él se calmó y me dejó ir.
-Luis preparó tus cosas, en 20 minutos te vas y volverás solo cuando yo lo ordene. Despídete de tu hermana y márchate.
Fui a la habitación de mi hermana, la cogí en brazos y la besé en la frente. Le agradecí por haberme salvado la vida y me despedí de ella entre lágrimas porque sabía que la convertiría en un monstruo. Me despedí asimismo de Luis y le agradecí por todos esos años.
La niñera me dio su número para que pudiera llamar para saber más sobre mi hermana y sobre su comportamiento y educación.
Antes de entrar a la furgoneta, sentí una mirada detrás de mí, y en efecto era Black mirándome desde la ventana.