25. ★

ALEXANDER

Estábamos los cuatro sentados en los sofás de la sala, después de la revelación que había hecho Elizabeth, no sabía si ella tenía conocimiento real de la situación o sólo sabía lo que le habían contado.

Todo venía perfectamente, pero si lo que dijo ella es verdad, Chloe estaba amenazando a Mathews y eso nos ponía en una gran desventaja, tenía que hablar con ella y rogaba a todo lo divino que existiera a que si era verdad no le hubiese dicho a Layla.

Había logrado sacar a Layla de la empresa, aparte de hacer que Nathalie cayera y casi se quiebre el pie, se estaba acostando con media compañía, ¿no sé cómo pude estar con alguien así? Elizabeth fue quien me ayudó y hablo para que la despidieran, ahora no sabía si sentirme en paz o completamente intranquilo.

— Tengo una idea — dijo Nathalie mientras volvían a escuchar el audio de la pluma grabadora que dejó Edward en la mesa.

— Sea lo que sea, la respuesta es no Nathalie —

— Ni siquiera me has escuchado, además dije que te ayudaría y esta es la mejor forma — la mire hacerme un puchero.

— ¡No! —

— ¡Oh Vamos! es la mejor idea de todas — la mire receloso.

— Habla — mi voz salió autoritaria.

— Si, jefe — sonrió mientras hacia un gesto militar con sus manos

— Bueno, ya que somos buenas amigas con Lizzy, porque no hacer una pijamada en su casa — se quedó meditando un poco antes de seguir hablando

— Ya sabes, en algún momento que Mathews se valla de viaje, y este ella sola, podemos entrar y buscar los documentos que necesitas para revelar la verdad — el plan no sonaba tan mal, pero era poner en riesgo a Nathalie.

— No, no voy a dejar que te expongas de esa manera — Edward parecía meditarlo.

— Puede que sea buena idea, iría con Lexie — dijo él tranquilo, — si lo ideamos bien puede salir perfecto —. Me quedé pensativo, eso era poner a Lexie también en peligro.

— Mandaremos a nuestras mujeres a la boca del lobo — el asintió con la cabeza.

— Lo sé, pero tal y como te digo, bien ideado puede salir perfecto, ellas entran y salen sin correr ningún riesgo, sabes que no pondría a mi mujer en ningún peligro — bueno, ese era un buen argumento.

— Primero debo llamar a Chloe para saber si lo que dijo Elizabeth es cierto, en base a eso daremos marcha el plan. Pero si lo que ella dice es falso, sería una trampa para entrar en la boca del lobo —

— Amor, ¿dijiste que estaban buscando una nueva asistente para Jhonsson? — preguntó Lexie.

— Si, ¿por qué? — miro fijamente a Lexie

— Es que, no te había querido decir, pero decidí renunciar al estudio de modelaje, se habían puesto mucho más estrictos y querían que viajáramos por casi un año, diferentes partes del mundo miles de pasarelas, no es lo mío — dijo suspirando.

Sabía cuánto le gustaba modelar, pero también sabía mejor que nadie cuanto amaba Lexie a mi amigo y sabía que si su carrera se interponía entre ellos, ella siempre lo elegiría a él.

— ¿Es lo que deseas? — ella le asintió sonriendo mientras se abrazaba a él, — si realmente es lo que deseas sabes que siempre te apoyare —

— Podría solicitar el puesto, y pedirle a Lizzy que me entrene, estaría más cerca de ella y por ende de Mathews — era buena idea, pero era arriesgado.

— Nicholas pospuso su retiro para fin de mes — dijo Edward con algo de molestia, era algo completamente innecesario, pero tal parece que se sentía en la necesidad de mejorar su imagen antes de retirarse, viejo inútil.

— Podríamos intentar el plan de Lexie por ahora y cuando Alexander tenga el puesto hacer lo que dijo Nathalie — mire a mi mujer sentada con una sonrisa en el rostro, sabia que quería ayudar, pero temía que algo le pasara.

—Bien — acepte sus ideas por ahora, — iré al despacho a llamar a Chloe, Edward —

Nos metimos al despacho en silencio no podía creer que posiblemente Chloe estaba jodiendo mis planes, ¿porque seguía comportándose como una niña caprichosa?

— Diga —

— Chloe —

— Hola Alexander, justo eres a quien quería escuchar, tenía intenciones de llamarte, hay cosas que debo contarte —

— Cuéntame — decidí que ella hablara antes de preguntarle las cosas.

— Sabes que Layla fue a buscarte, la pobre esta como loca porque quiere otra oportunidad contigo, deberías hablar con ella, se arrepiente de todo, yo le dije que estabas en Nueva York — rodé los ojos al escucharla, estaba loca si creía que le daría una segunda oportunidad a Layla

— Eso no es posible Chloe, me he casado —

— ¿qué? No te lo puedo creer, dijiste que nunca te casarías, ¿Qué tal es? —

— Es perfecta, Hermosa sin lugar a duda. —

— ¡oh vaya!, bueno pues tendré que verla con mis propios ojos, no aceptaré ninguna interesada que este contigo sólo por tu cuenta bancaria — que ironía

— ¿Y a Layla sí? ¿A pesar de todo? ¿No te arrepientes de haberla ayudado a joderme? —