Capítulo 28

Andrew, al percatarse de mi presencia, dejó su guitarra a un lado mientras me miraba extrañado.

—¿Qué haces despierta, Hailey?

—¿Qué haces tú despierto? —le pregunté.

—Bueno, yo vivo aquí, no tengo porque darte explicaciones.

Rodeé los ojos y di la media vuelta para regresar a la habitación y seguir durmiendo. Sin embargo, su voz llamó a mi nombre.

—Hailey, quédate.

Lo miré desconcertada por su repentino cambio de humor. Sus ojos estaban posados en el suelo y su rostro permanecía serio. Caminé lentamente hacia él y me senté a su lado aún dudando sobre si lo que estaba haciendo era lo correcto.

—¿Por qué estás despierta? —insistió.

—Algunas veces tengo el sueño muy ligero y el sonido de tu guitarra me despertó.

Permanecimos en silencio por segundos. Pude notar que en la pequeña mesa de centro frente a Andrew estaba la letra de la nueva canción. Así es, de la que habíamos grabado el vídeo musical.

—¿Tú escribiste la canción? —hablé tomando la hoja entre mis manos.

—Sí, pero no estoy muy orgulloso de eso.

—¿Por qué? En mi punto de vista es una canción... Hermosa.

Los ojos de Andrew se encontraron con los míos y sonrió mostrando su perfecta dentadura de cantante.

—Gracias por decirlo, pero yo sé que es una mierda.

—No miento, es una canción hermosa, el hecho de que no sea una de tus típicas canciones que hablan de alcohol y sufrimiento no quiere decir que no lo sea.

Él negó con la cabeza y una idea invadió mi mente. Releí la letra de la canción a pesar de que ya la tenía lo suficientemente aprendida la letra debido a todas las veces que la habían puesto en el rodaje del vídeo.

—Tal vez la canción no te guste porque la escuchas en tu propia voz, pero si la canción no fuera tuya y la escucharas en la voz de otra persona, estoy segura que te darías cuenta de lo buena que es.

—Lo dudo mucho —bufó— ¿En la voz de quién? ¿De Jordan?

—No. En la mía. ¿Por qué no comienzas a tocar con tu guitarra?

Él dudó por unos segundos, pero después tomó su guitarra y comenzó a tocar.