Sueños Reales Amor y Ficción Libro 1

EPISODIO 2

 

 

ELLA BRILLA COMO EL SOL

DØÅ (Reina Número 6)

 

Cierra los ojos y verás que el color es solo una ilusión óptica. “¡Porque el amor aunque no se ve, se siente más cuando está entre tus manos!”.

 

 

TOPACIO

Yo Dæl, veo el momento justo en que el caballero sigue cayendo en el vacío, y mientras mueve los brazos y las piernas se resigna a pensar que morirá, pero de tanto gritar le duele la garganta. Él se queda en silencio porque cree que nadie lo escucha, pero algo fuera de lo normal sucede. Porque en el momento en que está más cerca de caer al suelo y morir, siente a su lado la presencia de una criatura misteriosa y solo alcanza a ver un remolino de fuego plateado en forma vertical que explota en el suelo, ella lo toma del brazo derecho y los dos desaparecen en ese momento.

¿Seguro te estás preguntando qué fue lo que pasó? ¿Verdad? ¿En serio no te has dado cuenta? Bueno, sin rodeos puedo decirte que es la segunda vez que el caballero viaja a través del tiempo, ¡pero aún no lo sabe! Pues su memoria está fallando, ¡y no logra distinguir la ficción de la realidad! Lo mismo le pasa al resto de la humanidad. ¡Mira! Muchos ignoran los tesoros vikingos que han quedado escondidos por siglos en el fondo del mar Báltico. ¡No se lo cuentes a nadie! Pues, ha pasado mucho tiempo y en cualquier momento estaremos tocando las espadas, el oro y las heladas aguas del mar Báltico. Pero el peor momento que he visto en el futuro, fue la noche que le quitaron la fuerza de gravedad al planeta Tierra, ¡otra escena espantosa! En realidad, esa es una historia que tal vez oirás en otro momento, porque no me corresponde  contártela hoy. 

¡Espera! ¡Espera! ¡Espera tan solo un momento! ¡Algo está pasando! Y en un instante, en la escena aparece una neblina helada que camina frente a mis ojos y cuando todo se pone de color blanco y no se puede ver nada, el tiempo cambia y hace un sonido que explota con estrellas y cristales de hielo que se deslizan como el viento frío del Polo Norte. Pero el sonido es más profundo que la fosa de Puerto Rico, en el Abismo Brownson. Y las coordenadas de este nuevo lugar son: 10°52′27″N 74°58′43″O.


TUBARÁ, COLOMBIA. El tiempo marca la noche del 7 de Julio del año 1759, frente al Mar Caribe.

¡Mira! ¡Mira! La criatura desafía las leyes de la gravedad, fue muy raro cuando la vio por primera vez, pues llegó flotando hacia él. Aunque no puede verla con claridad porque perdió sus lentes, puede observar el brillo de su reflejo. Espero que mientras describo a la criatura, puedas imaginar lo que te voy diciendo, porque su apariencia es la de una reina hermosa de cabello corto y tiene puesta una corona con piedras de topacio transparente formando hojas de helechos, y un medallón de oro en el cuello igual al que se encontró el caballero en la arena de las playas de Tubará, además tiene un vestido largo de tela muy fina, con la falda en corte sirena y un escote en forma de corazón en el busto, con los brazos descubiertos. Y todo el diseño de su vestuario está fabricado con detalles en lentejuelas de topacio formando constelaciones que solo podrás ver en la parte final del universo. 

–Pero ella le dice al caballero colocando su mano hacia el frente: ¡No tengas miedo! Mi nombre es DØÅ ¡Tranquilo, solo vine para ayudarte! Entiendo que debes estar confundido, así que no veas mi reflejo, mira hacia la derecha, por ahora solo escucha mi voz. Pues, por la expresión de tu rostro sé lo difícil que debe ser esta experiencia. ¡En muchas ocasiones estuve en tu lugar y sé como te sientes!

Y en un instante el caballero se da cuenta que está flotando hacia arriba del abismo. Él  escucha su voz y no sale de su asombro, sigue mirándola y siente sus pupilas extenderse tanto que no puede dejar de mirarla, pero está mudo, sin saber por qué lo ha salvado, quiere agradecerle y su boca solo tiembla y no puede expresar palabras.  En medio del vacío y la neblina del abismo poco a poco la reina Døå sube hasta lo más alto de una montaña. Llegan a un lugar hermoso y los rayos de la luna hacen que el polvo de estrellas de su cuerpo brille tanto, que parece escarcha plateada al sol.

–Døå le pregunta: ¡Caballero! ¿Cuál es tu nombre? 

–Yo la miro y quiero hablar "¡Pero no sale mi voz!". Me siento algo extraño y quisiera poder expresarle mi agradecimiento, piensa el caballero. 

–Y ahora ella dice: "¿De dónde eres?". 

–En ese momento mi voz regresa y le contesto: Esa pregunta es muy complicada, pues estoy en este planeta hace 27 años y a veces creo que soy normal, pero otras veces “¡Me siento muy extraño y sé que nadie me entiende!”. Ahora miro hacia abajo y pienso: ¿Qué le diré?, en realidad recuerdo muy poco, y sin tantos rodeos solo le contesto: Soy del planeta Tierra, "¿Pero dime? ¿Estamos en Tubará? ¿Verdad?". 

–Ella responde: ¡Sí! Pero no estamos en el año 1770 como estás pensando. 

El Caballero mira en todas las direcciones y el lugar se ve igual, pero él sigue sin entender lo que está sucediendo.

–¿Reina Døå, pero qué fue lo que pasó? ¿Y? ¿Por qué tengo tanto frío? Le pregunta el Caballero.

–Ella contesta: Cuando viajas en el tiempo es normal tener un cambio de temperatura, pues, tu estructura molecular se separa y se vuelve a unir al final en otro lugar. Pero ¡Mira! Mejor te cuento como llegamos aquí, mientras caías en el vacío, fui enviada para salvarte por medio de un portal del tiempo. Este se formó con las  partículas de energía  en femtosegundos  de un cometa con luces de fuego que giraba en la vía láctea, justo en el momento en que salía por un agujero de gusano entre el planeta Tierra y la Luna. Los guerreros del tiempo estamos en todo el planeta y tenemos diferentes misiones relacionadas con el mundo del futuro, el pasado y el presente relativo según lo marque el tiempo. ¿Pero? ¿Caballero, tú me recuerdas?




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