EPISODIO 8

LABERINTOS DEL TIEMPO

(CRISTAL)

KËCIÅ (Reina Número 34)

“Cuando mires la neblina, nunca olvides que ella llega y se va; así como la belleza, la juventud y el tono de tu piel. Recuerda que tus ojos no volverán a ver las mismas cosas que viste ayer”.

1Ω3=\↓+÷•∞ )=1 ÷↓=×9•

En este momento, en una de las siete mesas de piedra de la UCI, se encuentra Gatøürox, con extrasístoles y 700 latidos por minutos en el ritmo cardíaco. Además, su cuerpo vibra con movimientos exagerados que desequilibran su piel, y dejan restos de su ADN en la mesa también. Como un muñeco… ¡Sí! Como un arlequín de tela de seda, tirado en el suelo, descosido, destruido, con agujeros, y sin cascabel de metal en el sombrero. Así se ve el alma de un hombre, cuyos días en la Tierra están a punto de terminar. Pero la reina Morpho y sus compañeras de turno, hacen todo lo posible para estabilizar a Gatøürox, y si no lo consiguen, tendrán como última opción; envolver su cuerpo en piel de crisálida, tal vez por muchos años, como ha sucedido con algunos guerreros en el pasado. Pero si él sigue moviéndose así, será imposible envolverlo y mucho menos, poder colocarlo en lo más alto de uno de los pinos del bosque.

Y mientras la escena está pasando, de fondo se escucha un violín que está tocando afuera de la UCI, KËCIÅ la reina del sueño, con sonidos envolventes que deslizan las notas de la canción Regresa ¡Y miren! Detrás de los pinos se encuentra Jëz, pero ella no puede evitar bailar ballet, mientras suena el dulce acorde de esta melodía. Ahora continúa sintiendo en tu piel, el hermoso sonido, pues, esta noche deleita tus sentidos; escuchando desde el violín de Këciå las frecuencias que llegan a tus oídos con las ondas sonoras del viento.

El vestido de la reina Këciå es gris oscuro, con escote de un solo hombro ceñido hasta la cintura y largo hasta el suelo, bordado con canutillos de cristal, formando muchos remolinos que simulan los espirales de las ondas sonoras que emite el mar, y en su espalda tiene alas de un ave en color gris, pues ella pertenece a las 7000 mujeres ave que deleitan nuestros oídos con el sonido de su voz. Ella no tiene armas de guerra, pero tiene un secreto que muy pocos conocen y tal vez algunos nunca sabrán.

–Y un hombre Alfil llamado WÎLY grita muy sorprendido: “¡Mira reina Påu, los folículos del cabello y el bigote de Gatøürox le están saliendo!", y de la cintura hacia abajo se está formando la estructura ósea de un gato montés, en todo este tiempo no había visto algo así.

–Ahora Påu le responde con muchas preguntas: "¿Tantos años viviendo en este bosque, y todavía no te acostumbras? ¿Tú lo sabes? ¿Lo recuerdas?". El secreto del material de los anillos que usamos los guerreros del tiempo, en combinación con nuestro ADN son todo un enigma, pues lo que a unos les fortalece a otros los puede matar.

–¡Sí, claro que lo recuerdo! Contesta Wîly con una sonrisa graciosa. Tú sabes que esa fue una de mis clases favoritas, pero cada guerrero reacciona de una forma diferente y eso es algo de lo que nunca me voy a acostumbrar. No me contestes así aunque ¡Sé que de mí ya no te acuerdas! ¡Pero también sé que en las noches no me olvidas! Yo simplemente estoy aquí para ayudar y no me importa nada más. Además todos en el bosque te ayudamos sin esperar nada cambio y tu mente parece estar en otra parte.

De repente, en un Attosegundo del tiempo, el cuerpo del rey Gatøürox se estabiliza, abre los ojos y comienza a hablar cosas incoherentes en un idioma desconocido para todos los que están presente. Él hace un extraño movimiento en sus manos y da la apariencia de estar leyendo, pues sus pupilas y su cabeza giran de derecha a izquierda, porque en realidad en frente de él se hacen visibles mensajes con letras de luces doradas como el reflejo de las estrellas. Ahora sus lágrimas se derriten como el hielo en medio del calor del fuego. ¡Pero miren!, la reina Morpho y sus amigas no ven las letras ni entienden lo que sucede.

En ese momento el rey Gatøürox desde su mente está viendo de forma simultánea las escenas de lo que están haciendo sus amigos en las siete dimensiones, y por un lapso de tiempo ve a la reina Påu, Jær y Yøå en medio de un bosque en Canadá en el año 1717 cerca del Castillo Ramezay, ahora mira a la derecha y observa al rey Jazår conversando con un ave azul, mueve sus ojos a la izquierda y ve lo que hace Døå en la atmósfera de la tierra y también ve a la reina Glåss y sus hermanas en el bosque de los eucaliptos.

Yo Dæl quiero contarte además que los sucesos de momentos en el tiempo, establecen situaciones variables en la línea temporal, cada decisión que tomamos transporta attosegundos que pueden cambiar nuestras vidas en un instante. Pero los movimientos en el tiempo del rey Gatøürox ya están establecidos, solo que aún no los ha vivido. "¡Y no es el destino cómo estás pensando!". Pues solo las acciones de tu mente, escriben cada día en el pergamino un nuevo destino, aunque te suene contradictorio deberías saber también, que las escenas de nuestras vidas ya fueron archivadas desde el principio en el final de los laberintos del tiempo.

"¡Miren!" Desde el cielo se escucha el sonido de unas alas y Këciå mirando hacia arriba, deja de tocar el violonchelo, toma a Jëz del brazo y corren juntas a la UCI para informar que Dågüx el rey de los Alfil está llegando.

–¡Ven! Deja de correr, vamos volando así llegamos más rápido dice la reina Këciå.