Capítulo 12.

Hoy es viernes y nos juntaremos al fin todos en la casa de Connor, los chicos están emocionados por conocer la famosa mansión del chico enmascarado.

Pues sí, los chicos ya lo saben, y también saben lo de su cumpleaños ya que un día estábamos conversando todos y bueno, un Marck entrometido vio el collar con el dije que le regalé a Connor con lo que estaba escrito en el, y empezaron a pedir explicaciones tanto a él como a mi sobre cómo es que había visto a Nick con Zamira y Jack saco el tema del peluche del cual nadie sabía. Terminamos contándole todo, excepto lo del beso, y ellos entendieron perfectamente, animaron a Connor ya que le costaba hablar de su hermana, todo quedó solucionado, y las dudas aclaradas.

Me encontraba esperando a que los chicos salieran de entrenar, si, resulta que el entrenador se había tomado unas vacaciones y no encontraron suplentes y como no se quiso perder sus vacaciones familiares, suspendió por un tiempo las prácticas hasta que volviera.

Los chicos empezaron a salir, con sus cabellos mojados, me saludaron con un beso en la frente, si, los cuatro, ya era costumbre.

—Vamos…—dice Connor— Mary y papá están emocionados por conocerlos

—¿Mary es tu mamá?— pregunta Ali, quien no había visto llegar, Connor sonríe apenas y hace una mueca.

—Es mi nana…yo…no conozco a mi madre, por lo que mi padre me ha contado ella se fue con mis hermanos cuando nací— dice un poco decaído.

—Yo…lo siento, no lo sabía- dice Ali avergonzada, él le sonríe.

—Vamos, se nos hará tarde— dice Connor, los chicos asienten y comienzan a caminar, pero yo me quedo con élv solo tengo una foto de ella, mi padre dice que me dejó con él para que viviera mejor, pero yo sigo pensando que me abandonó, nunca me ha llamado, ni me visitaba cuando mis hermanos iban a casa, ya que vivían con ella, me duele, sí, pero ya lo he superado, o al menos eso quiero pensar.

—No tenías por qué contármelo— le digo haciendo una mueca, ya que se ha puesto triste.

—No, pero quería hacerlo— dice sonriendo y pasando un brazo por mis hombros—vamos.— Le sonrío y comenzamos a caminar hacia el auto.

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Hace dos horas llegamos y fuimos a la sala de juegos, si señores, Connor Lambert tiene su propia sala de juegos, los chicos quedaron maravillados cuando llegamos. Mary y Keith me saludaron con un abrazo chicos igual, a todos le cayeron bien y ellos están más que contentos de que estemos todos aquí.

—-Iré a preguntarle a Mary si me presta una camiseta limpia— digo fulminando a Connor con la mirada

—Oye, no fue mi culpa—dice este riendo.

—Claro…si fue mi culpa que escupieras la bebida encima mío— rio sarcásticamente

-—En realidad… sí no te hubieras enfadado por no saber jugar al pool, no hubieras puesto esa cara, a mí no me hubiera hecho gracia y no te hubiera tirado la bebida encima— dice riendo, le saco la lengua y voy a la habitación de Mary.

Voy caminando por el pasillo mirando los cuadros y riendo al ver a un Connor de unos cinco años, era muy tierno. Al llegar toco la puerta y abro.

—Hola Mary, me podrías prestar una camiseta por favor, el cerdo de Connor me escupió la bebida encima—digo rápidamente, veo como ella limpia sus mejillas y guarda unos papeles en una caja. 

—Sí, sí, claro linda—dice y se levanta de la cama haciendo que los papeles se desparramen por el piso.

Mary se agacha a recoger las demás cosas rápidamente, puedo ver en como de unas de papeles aparecen ecografías, chequeos y una foto de Connor de pequeño, estoy segura de ello ya que vi los cuadros en el pasillo, pero ¿por qué Mary tendrá todos estos papeles?

Me agacho a recoger uno que callo a mis pies y me sorprendo por lo que veo.

Es una ficha de maternidad con su nombre.

Entonces una conversación entre ella y Keith viene a mi mente.

Flashback.

—¡Tenemos que decirle de una vez por todas!—escucho la voz de Keith, se escucha preocupado.

—Lo sé Keith, pero tengo mucho miedo de como valla a reaccionar, esperemos un tiempo más. — dice Mary, frunzo el ceño, pero decido no seguir escuchando. Entro a la cocina y ellos me miran asustados.

Fin de flashback.

Ahogo un grito de sorpresa al darme cuenta, Mary me mira con el ceño fruncido hasta que se percata de lo que tengo en las manos.

—Connor es…—digo sin aliento y mirándola sorprendida—… ¿tu hijo? — ella me mira sin decir nada y con lágrimas en los ojos— ¿verdad? — la presiono.

—Si…—dice en un susurro dejando caer sus lágrimas. 

—Pero… ¿pero por qué no se lo has dicho?— digo acercándome a ella y agarrándole las manos.

—Tengo miedo de cómo reaccionará— dice sollozando, la abrazo y dejo que llore en mi hombro, pasa un tiempo y siento como deja de llorar y respira hondo.

Se separa de mí y le sonrió, se sienta en la cama y saca los papeles, me los entrega y veo todo lo que tiene, como dije, chequeos, ecografías, fotos, cartas, pero lo que llama mi atención es un anillo, lo saco y ella sonríe melancólicamente. Y solo dice una palabra.

—Keith...

 sonrío, sabía que algo había entre ellos, ella me devuelve la sonrisa y suspira para luego comenzar a hablar.

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Luego de escuchar la historia de cómo sucedió todo esto, Mary me abrazó entre lágrimas y me pidió que por favor no le digiera nada a Connor.