Capitulo #1: Te conocí.

~Susurros En La Noche es una historia BL~

Cuando las personas desean contar un secreto sin que nadie lo sepa, susurran, esperando que nadie más descubra este secreto aparte de la persona receptora del susurro. Pero a veces, las personas susurran sus sentimientos, esperando desesperadamente jamás ser escuchadas y anhelando con todo su corazón que ese pequeño susurro alcance al objeto de su amor.

Algún día también llegaremos a escuchar este pequeño susurro que transmite los sentimientos de un chico, un dulce y tierno ~susurro en la noche~.

Profesora Rodríguez: Buenos días, chicos. Hoy empieza el nuevo semestre; ya todos nos conocemos, pero déjenme presentarles al nuevo alumno. Él es Cristopher Álvarez y a partir de hoy es su nuevo compañero.

Cris: Buenos días, mi nombre es Cristopher Álvarez, tengo 17 años y a partir de hoy seré su compañero. Ah, y no me interesa en lo más mínimo interactuar con ustedes, así que no me molesten.

Chica: Hey, hey Ben, mira, hay un nuevo estudiante y es un completo idiota.

Ben: ¿Puedes callarte, Mónica? No ves que estoy intentando dormir. Sabes, no me interesa ese nuevo estudiante, así que déjame dormir.

Mónica: Aunque si hablamos de idiotas, tú eres el número uno.

Ben: ¡Te escuché!

Profesora Rodríguez: Cris, ¿puedes sentarte al lado de Ben, por favor?

Cris: ¿Quién es Ben?

Profesora Rodríguez: El chico ruidoso del fondo.

Ben: ¡Ah! ¿Por qué tiene que sentarse junto a mí? Hay demasiados puestos libres, ¿por qué justo junto a mí?

Profesora Rodríguez: Ben, ¿tengo que recordarte cuántas veces te encontré durmiendo en mi clase el semestre pasado? Espero que Cris te mantenga despierto y atento a mis clases.

Ben: Oh, por eso. Jeje, supongo que está bien.

-Cris camina hacia el puesto al lado de Ben y, al llegar, lo ignora completamente-.

(y este es el chico que me mantendrá despierto y atento; debe ser un chiste)

Ben: Así que me vas a ignorar. Está bien, tampoco es que me interesara hablar contigo.

Cris: ¿Puedes callarte? Estoy intentando dibujar; además, es raro que hables solo.

Ben: ¿A quién le dices raro? ¡¿Acaso quieres morir?!

Cris: ¿podrías hacer silencio? Estamos en plena clase.

-Ben estaba furioso; no solo lo calló dos veces, sino que también lo ignoró por completo. Ben estaba seguro-.

Hora del receso

Ben: Es imposible que ese chico me agrade.

Mónica: Entonces, ¿por qué le prestas atención?

Ben: ¡No le presto atención! Es que me molesta; su simple existencia me molesta.

Mónica: Hablando del rey de Roma.

Ben: ¿Eh? ¿Dónde está?

-Mónica tomó el rostro de Ben con fuerza y le mostró dónde estaba Cris-.

Ben: ¿Eh? ¿Él está solo? ¿Por qué? Se ve como el típico chico popular.

Mónica: Eso te pasa por dormir en clase. Él mismo dijo que no quiere relacionarse con ninguno de nosotros.

Ben: Él es...

Mónica: ¿Él es...

Ben: ¡Es un completo idiota!

Mónica: Mira quién habla.

Ben: Ahora me molesta aún más, cree que es superior y, por lo tanto, no puede relacionarse con ninguno de nosotros. Es un imbécil.

Mónica: No creo que se crea alguien superior.

Ben: ¿Qué quieres decir?

Mónica: Perdería mi tiempo explicándote esto a ti. Pero, básicamente, es un chico solitario; se nota que no le gusta estar rodeado de personas y que prefiere guardarse todo para sí mismo. Simplemente le gusta estar solo.

Ben: ¿Un chico solitario? Definitivamente no lo entiendo.

Mónica: Sé que parece raro, pero realmente existen... las personas a las que les gusta estar solas.

(Personas a las que les gusta estar solas, eh)

-Ben estuvo pensando todo el día en lo que dijo Mónica acerca de que Cris era un chico solitario. Le dio muchas vueltas, pero aún no lo entendía. Sin embargo, llegó a una conclusión:

Si quería comprender lo que dijo Mónica, tenía que conocer mejor a Cris-

Ben: Ese chico me molesta, ¿por qué debería conocerlo mejor?

(¿cómo pasé de odiarlo a intentar entenderlo?)

Mónica: ¿Estás loco? ¡Estamos en el autobús! No hagas una escena, ¡esto no es una serie!

Ben: ¿Eh? ¿El autobús?? ¿Cuándo llegué yo aquí?.

Mónica: En serio, eres muy despistado. ¿Qué clase de amigo tengo? Ja, ¡eres realmente un caso perdido!

Ben: ¿No me digas que pasaste todo el día pensando en ese chico?

Mónica: ¿Hablas de Cris? ¡Eso sería gracioso!

Ben: ¿Gracioso? ¿Qué tiene de gracioso?

Mónica: Pues él está justo enfrente de ti.

Ben: ¡Eh!

Mónica: Jajaja.

Cris: ¿Podrías hacer silencio? Estoy escuchando música.

(Si estás escuchando música, ¿qué importa si hago ruido? Existen los audífonos, ¿sabes?)

Ben: ¿Qué haces aquí?

Cris: No es tu problema.

Ben: ¿Quieres morir, idiota!?

Cris: Vivo en este vecindario.

(¡Oh, qué sorpresa! Responde muy calmadamente. ¿Espera, dijo que vive en este vecindario?)

Ben: ¿En este? ¿En este vecindario? Aquí hemos vivido Mónica y yo desde pequeños y nunca te hemos visto.

Cris: Me acabo de mudar.

(incluso si hablo fuerte, él responde con tanta calma que me molesta. ¿Me preguntó si puedo alterarlo?)

Ben: Para un chico que no quiere relacionarse con sus compañeros, hablas demasiado.

Cris: Idiota, tú fuiste quien me preguntó.

Ben: Así que ahora sí me respondes. ¿Ya no me vas a ignorar?

(Jajaja, cayó redondo en mis provocaciones.)

Cris: Solo respondí una estúpida pregunta, no es la gran cosa.

Ben: Jajajaja, eres un chico muy divertido.

Cris: ¿Ahhh!? ¿Acaso algo de lo que dije fue divertido?

Ben: No, para nada. Eres tú quien es divertido.

(Supongo que tampoco sería tan malo... intentar ser su amigo).

Ben: Sabes, eres muy molesto, pero no estaría mal conocerte mejor.

Mónica: ¿Ben, qué quieres decir? ¡No será! ¡Eso es imposible! Tú nunca cambias de opinión, y mucho menos tan rápido.