18.

- Ok haremos silencio - Dije sin detenerme, y después de un par de repeticiones más ya los dos estábamos satisfecho. Ella bajó las piernas, estaba temblorosa. Yo volví a besarla y después abrí los ojos para mirarla. 
Ella viró la cara de inmediato.

-¿Que pasa? - Pregunté extrañado y nervioso de que algo no le hubiera gustado.

-No vamos arruinarlo , se que odias que te mire a los ojos -  La verdad es que me había olvidado de ese pequeño detalle. Le sonreí y besé su mejilla.

- No odio mirarte a los ojos simplemente no puedo hacerlo. Pero después te contaré,  porque... - Ella me sonrió y se vistió yo también hice lo mismo. 
abrí la puerta del baño y me asome con cuidado por si Jade se había despertado. No había nadie ella aun continuaba dormida. Ambos salimos.

- ¿me prestas ropa? - Dijo avergonzada y yo me reí, le saque un suerte que le quedaba como vestido y también unas medias. Yo también me coloque uno y un pantalón de dormir.

- Hasta dentro de un rato Bella - Le dije porque era super tarde, y en un rato teníamos clases en la universidad, tenía que llevar a Jade a la escuela y después ir a trabajar.

- Se que somos tuvimos sexo, y eso no nos hace cercanos. No somos novios, no le pongamos ningún adjetivo a esto, pero podrías quedarte aquí? -

- No puedo quedarme ¿que pensaría Jade si se levanta y nos ve durmiendo juntos? tendríamos que hablar con ella, decirle que te vas a quedar y que es un secreto entre los tres. - tenía que hablar con mi hija con carácter de urgencia.

- Es cierto- Ella parecía desilusionada. -Pero podemos dormir en la sala, si nos ve ahí le diremos que estábamos viendo una película- Le estire la mano, ella la tomó indecisa y nos fuimos a la sala.

Me recosté en el mueble y ella hizo lo mismo. Encendió la TV. Poco tiempo después no recuerdo nada mas porque estaba profundamente dormido.

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-¡Mylas despierta, despierta, despierta! -Jade definitivamente era mi mejor despertador. Abrí los ojos y sin darme cuenta Bella estaba acurrucada encima de mi durmiendo plácidamente. Y Jade veía la escena con una felicidad absoluta.

-Hola amor buenos días - Dije levantándome del mueble, y acomodando a Bella quien parecía estar muerta. Hasta estaba babeandose. Ella definitivamente era una mujer un personaje.

- ¿Bella vivirá aquí? - Jade estaba esperando escuchar una explicación.

- Solo por un tiempo, hasta que consigamos un lugar para ella. Iba a contártelo en la noche pero no quisiste despertarte¿Te sientes incomoda con eso?- Necesitaba saber su opinión sobre el tema. Sabía que a ella le gustaba Bella, pero de ahí a que quisiera que se quedara con nosotros había una gran diferencia.

- Para nada, estoy muy feliz de que se quede ojala nunca consigamos un lugar para ella pata así vivir los tres juntos para siempre - Me daba ternura su sinceridad, la abrace y me sentí feliz de verla tan emocionada.

-Que bueno, tengo dos cosas más que Decirte. - Ella cruzó los brazos como si estuviera esperando recibir una mala noticia. Bella seguía roncando. - La primera es que no puedes decirle a nadie que Bella se esta quedando aquí con nosotros, Si alguien se llega a enterar amor ella va a tener que irse y no podremos volverla a ver ¿entendiste?-

- ¿Ni siquiera a la abuela Raquel? - Cuestionó

-No, ni siquiera a la abuela Raquel. Sera un secreto entre los tres ¿entendido?-

- No le diré a nadie, ni siquiera al oso teddy. Será nuestro secreto, promesa - Dijo extendiendome su dedo meñique. Lo junte con el mío.

- Promesa, entonces - Ella me abrazo.

- ¿Y cuál es la segunda cosa? - Preguntó y yo ya hasta lo había olvidado. Le iba a decir y de repente comenzó a sonar el timbre de forma  tan desmesurada que solo podía ser obra de Raquel. Le hice señas a Jade que hiciera silencio y entonces caminé con cuidado pare ver por la Mirilla de la puerta. Quedé en shock al ver a mi madre y a Alabama detrás. Ellas volvieron a tocar, y escuché decir a Alabama que seguro me había quedado dormido. Comenzó a buscar en su cartera. Recorde que ella tenía una copia de la llave. Corri a despertar a Bella.

-Ey, despierta tienes que ir ahora a mi cuarto Raquel esta aqui y va a entrar ahora - Bella estaba demasiado adormecida como para entender. Jade intervino.

-Decubriran nuestro secreto, despierta ya Bella - Ella se levantó del mueble, estaba confundida, aún estaba dormida. Jade la tomó de la mano y se la llevó casi que arrastrada al cuarto y yo corrí a esconder el enorme bolso en uno de los armarios de la cocina que casi no usábamos. Mi madre y Alabama entraron, y salí corriendo a la sala a recibirlas para evitar que fueran a mi cuarto donde estaban Jade y Bella.

- Hola! ¿Que hacen aquí? ¿cómo entraron? - Sali de la nada y las asuste.

- Hola ¿como que que hacemos aquí? vinimos a asegurarnos de que lleves a Jade a la escuela y que vayas a clases. -  Dijo mi madre y Alabama me miraba con cara de que algo no estaba bien aquí. Ella me conocía demasiado bien y sabía cómo actuaba cuando estaba nervioso...

- ¿Que pasa aqui? ¿Estas sudando y estamos a 5 grados? ¿Dormiste en mueble ? ¿que esta pasando? - Alabama había sembrado la duda en la cabeza de mi madre quien me miró con cara de que iba a matarme.

-No me digas que te pasaste por el forro la conversación que tuvimos. ¿Donde está? - Ella comenzó caminar hacia mi habitación y yo corrí detrás de ella intentando detenerla. Sabía lo impulsiva que era mi mamá, no quería que hiciera nada que hiciera sentir mal a Bella, porque fui yo quien insistí en que se quedará.

-¡Pero Raquel! ¿que mierda estas haciendo?- Ella me ignoró por completo y abrió la puerta mi corazón se detuvo cuando ella entró como una loca y yo hice lo mismo. Jade estaba sentada en mi cama peinando su cabello. Ella tenía un lindo vestido rosa, que ni se en que momento se había colocado.

-¡Abuelita Raquel! - Dijo corriendo a sus brazos. Mi madre de pronto se olvidó de Bella. Yo aprovechaba que ella estaba distraída para buscar a Bella con los ojos, Jade me miró y me guiño un ojo, su gesto me transmitió un poco de calma.