Extra

Chanel

Estoy regresando de Paris. Por más que quiera estar aquí con Bry y con Liam, no puedo ser irresponsable y desentenderme de mis clases.

Quiero estar lista, quiero estar preparada para cuando mi cuñada despierte vea que su esfuerzo valió la pena.

Que no desaproveche la oportunidad que me dio y que de verdad me la merecía.

A pesar de estar cansada, vine directo al hospital. Quiero hablar con ella, sé que me escucha.

—hola Bry— saludo besando su mejilla como siempre hago cada vez que vengo a visitarla — ¡te extrañamos mucho!

>>tengo mucho que contarte ¿recuerdas del chico que te hable?... es Liam. El amigo de Frederick ¡Dios Bry! Pensé que ese sería mi amor platónico para siempre. Pero sucedió. El me vio. El me eligió, estamos juntos y lo amo mucho.

Quisiera que me respondiera pero solo se oye el pitido de la maquina a la que ella está conectada. Me acerco y acomodo su escaso cabello opaco. De aquella brillante melena no queda nada. No quisiera atribuirte alguna culpa que no tienes. Pero me voy a casar con él y no puedo disfrutarlo totalmente porque faltas tú. Necesitamos de ti para volver a ser felices.

>>sobre todo mi Frederick. Sé que me oyes y quiero que oigas bien lo que voy a decirte... Bry él te ama, él espera por ti. No renuncia, no se rinde, el solo desea que tú vuelvas.

Los ojos de Bryony se mueven aun estando cerrados. No sé si es normal porque jamás lo había visto. Pero si es una respuesta física por su parte a lo que estoy diciendo, seguiré hablando.

—pues sí, como lo oyes, mi hermanito duerme aquí a tu lado todas las noches, te lee cosas, te pone música y hasta te canta. Él en realidad está haciendo tantas cosas por ti que es increíble de ver... sería bueno que despertarás para verlas tu misma ¿no crees?

Y de pronto pasa, más que movimiento. Veo sus ojos abrirse.

Jadeo entre impresionada y emocionada.

— ¡Dios mío! — chillo riendo mientras tocaba aquel botón que estaba debajo de su camilla, botón que servía para llamar al personal médico ante cualquier situación que se presentase con ella.

La llamo y le hablo, pero parece desorientada y sus ojos en ningún momento se enfocan en mí. Luego de unos cinco segundos más ella vuelve a cerrar los ojos.

—Bry— la llamo moviéndola un poco — Bryony— intento nuevamente, pero nada. Mis ojos se llenan de lágrimas ante la falsa expectativa que me estoy creando — Bryony despierta. Yo vi que abriste los ojos por favor.

Mis lágrimas salen, una cayo en su rostro y ella hizo una pequeña mueca.

—Por favor despierta— ruego.

—no me llenes de moco— pide con voz raposa. Justo cuando entra el personal médico.

Ellos me sacan dela habitación. Necesitan revisarla y no puedo estar presente.

Pero eso no importa. Justo ahora cuando ella despertó.

Salgo corriendo en busca de Frank. El me trajo y se fue a caminar un rato. Lo encuentro en el área de pediatría. Sin poder evitarlo me lanzo a abrazarlo mientras lloro emocionada.

—Ella despertó Frank.