Capítulo 4

Marie

La llamada desesperada de Aura llega a media noche, han llevado a Mason al hospital en ambulancia y ahora está en coma. No quiero ni imaginarme como está ella y como está Stella, sé que la pequeña está segura con Aura pero adora a su padre, así que para mi mejor amiga debe de estar siendo muy difícil calmarla. Creo que incluso a mí que tengo experiencia con los niños, me sería complicado.

Casi no duermo pensando en las veces que quedé con Mason y este se veía cansado, pero como siempre estaba sonriendo y parecía calmado no le tomé toda la atención que debería, fui demasiado ingenua. Sé que el se mata a trabajar, cuando fui a verlo a la editorial su compañero dijo que trabajaba el triple que el resto. No podía ser sano estar siempre así.

A eso de la ocho de la mañana Kristal y Jacob pasan a por mí para poder ir a ver a Mason, y dejar que Stella y Aura vayan a tomar algo. Cancelo mi cita de hoy para comer con Liam, él me pregunta por qué y después de decirle me pide que le mantenga informado. No tiene relación con Aura pero se sigue preocupando por ella aunque nadie lo sepa.

– ¿Sabéis algo?

– Poco, siguen haciéndole pruebas.

– Tiene que ser duro.

– Si, no sé si cuando a ti te llamó Stella se despertó pero cuando me llamó a mi Stella comenzó a llorar porque quería a su papá, se me estrujó el corazón.

– Para mi suerte no tuve que oír su llanto pero supongo que Aura si, y tuvo que ser muy difícil para ella calmarla cuando no estaba bien.

– Tú conoces a Aura mejor que nadie.

La conversación acaba ahí, me quedo mirando por la ventana y pensando que tiene razón. Aura y yo nos hicimos cercanas cuando ella todavía era la mejor amiga de Renatta y aunque ella se negaba a si misma lo que veía, su amistad se estaba deteriorando a una velocidad abismal.

No conocí a Aura en la mejor de las situaciones, evitó que me quitase la vida por la muerte de Nathaniel, sin ella puedo asegurar que no estaría aquí. No es como si Aura me diese consejos o algo parecido, ella me obligó a ir a un psicólogo y ha permanecido siempre a mi lado como un gran apoyo. Ella es una de esas pocas personas buenas que quedan en el mundo, tiene una capacidad de empatía y amor casi imposible de ver. Ella perdona casi siempre, claro que a Mario y Renatta no, sería extraño.

– Buenos días.- digo al llegar.

– Hola.- dice medio despierta Aura.

Cuando consigue despertar a Stella, ambas se van a la cafetería del hospital para tomar algo de desayunar y descansar de la habitación de Mason que estoy cien por ciento segura está pagando Aura porque es privada. Y si ella quiere darle los mejores cuidado a Mason, yo estoy de acuerdo porque sé que lo merece, él si.

– No sé si esto funcionan pero leí por algún sitio que hablarle al enfermo cuando está en coma ayuda a que se levante antes.- dice Kristal de repente.- Mason, nos tienes preocupados.

– Kristal.- la llama su novio.

– Solo quiero que despierte.

– Es sorprendente como pasamos de odiarlo a quererlo.- secunda Andrew.

– Se hace querer.- se encoje de hombros Kristal.- Y si Aura no lo odia, ¿por qué nosotros si? Andrew, solo había una persona que pudiese evitar el accidente de Aura, ella misma.

– ¿Le estás echando la culpa?- me pongo a la defensiva.

– No, la culpa la tienen las dos personas que la engañaron pero Aura es la única que podría haber evitado que Mason la atropellase, eso es indiscutible. Los actos de dos personas llevaron a esas terribles consecuencias.- suspira.- Aunque Aura podría haber evitado el accidente, si fuese menos sentimental, no creo que lo hubiese sido posible. Soy de esas que piensan que las cosas suceden por algo. Y creo que el accidente de Aura era inevitable.- ella se mira confusa con su propia explicación.- No me hagan caso, tengo sueño y no razono bien.

– Creo que te entendimos.- la tranquiliza Jacob.

¿Cómo se sentiría Jacob con mis intentos de suicidio? ¿Me haría el vacío por unas horas como le hace a Aura o me odiaría? Siempre me he preguntado como se sienten las personas a tu alrededor cuando esto sucede, y creo que no querría haberlo sabido jamás, pero eso no fue posible. Porque claro que yo experimento ese dolor y esa angustia asfixiante cuando Aura lo ha intentado, todas y cada una de las veces que me mejor amiga lo ha intentado me paralizo, me aterra perderla.

– Adelante.- dice Aura entrando.

Stella se baja del regazo de Aura y sale corriendo a mis brazos, la tomo de inmediato. No suele ser lo común, cuando está con Aura ninguno de nosotros existe, a veces ni su padre. Junto con Aura entran dos chicos y una chica.

– Os presento, Lea y Asher Evans.- ese es el nombre del chico del que me ha hablado, estoy segura.- Y él es Killian Taylor, el hermano pequeño de Mason.- miro mal al chico, no creo que deba estar aquí si nunca ha estado para Mason.

Él pasa con miedo, me mira por largos segundos antes de que mi mirada lo haga bajar la suya y se acerca a Mason, no quiero que esté con él. Stella me abraza y me susurra al oído que cree que el hermano de su papá no lo quiere porque nunca lo ha visto. Le sobo la espalda a la sobrina de Aura y la calmo.

– Buenos días.- todos miramos al médico que acaba de entrar a la habitación de Mason.- Bueno, las pruebas de su amigo ya han dado resultado.- dice dirigiéndose a Aura.- Diabetes tipo 1, tuvo una hiperglucemia, no sabemos cuando puede despertar pero esperemos que sean solo unas pocas semanas.

– Mason.- susurro, solo Stella me escucha.

– Gracias doctor.- le contesta Aura con preocupación pero más relajada.- Stella, tu padre va estar un tiempo durmiendo pero se pondrá bien.

– ¿Si?- mi mejor amiga asiente y le sonríe.- ¿Has oído Marie?

– Si pequeña, escuché.- beso su mejilla.

Me quedo mirando a Mason, entiendo que su prioridad sea su hija, la mía también era Nathaniel pero tiene que cuidar su salud, enfermo no puede hacerse cargo de su hija al menos no de la forma correcta. Cuando despierte espero que Aura lo calme y lo obligue a mirar más por su salud. No podemos echarle la bronca a Aura por ignorar un resfriado si nosotros acabamos haciendo lo mismo y no nos preocupamos por nuestra salud.