Té & Café

Coffee 13

Sábado

 

Ese día Logan había salido un poco mas temprano de su trabajo para comprar todos los ingredientes para esa noche, entre los vegetales, algún corte de carne, los ingredientes del postre y la comida de su adorada mascota, el joven pelirrojo se dirigía a su apartamento. Faltaba pocas horas para que el sol se ocultara, pero no era notable por la cantidad exagerada de nubes grises que posaban sobre la ciudad. Por su parte y rezando que no lloviera de camino a la casa de Logan, Jaden llegaba sin nada mas que su presencia.

 

El día en la tienda de música no había sido malo, sin duda había trabajo, el sr. Growney no dejaría que sus empleados estuvieran holgazaneando por ahí, y entre cosas que hacer, se mantenía cerca de Danielle para recordarle que tenía que ir al apartamento de su más grande amigo; cosa que ella ya sabía.

 

Jaden no tuvo que esperar mucho tiempo afuera, Logan concentrado en su parte de la comida solo tuvo que abrirle la puerta para que entrase y lo ayudara a terminar la comida.

 

—Logan, te estoy advirtiendo que si algo le pasa a tu hermosa cocina, no es culpa mía —removiendo los ingredientes en un bol—, estas advertido.

 

—No seas paranoico, pero lo tendré en cuenta —admitió inseguro, Jaden tenia el don de la destrucción, aunque fuera accidental—. Ve preparado la mesa, las chicas no tardaran en venir —removiendo una salsa que empezaba a hervir—. Mierda, la salsa se está espesando —en eso suena el timbre del apartamento—, Jaden ve a ver quién es que no me puedo mover —el susodicho lo ve y antes de replicar va a la puerta principal con las manos llenas de harina.

 

Vio por la pequeña pantalla al lado de la puerta a la chica que le hizo arrugar el rostro, pero como el timbre seguía sonando, si Logan la veía a lo mejor la invitaba a comer también y lo menos que quería era que esas dos conocieran a la celosa de Emma.

 

Al abrir la puerta, Jaden tenía una mueca y Emma al verlo ahí en vez de a Logan, borro su sonrisa—. Quiero hablar con Logan —su tono era poco amigable y demandante.

 

—Lárgate.

 

Jaden no tardo en cerrarle la puerta en toda la cara a Emma. Está por su parte se molesta a tal manera, que patea la puerta antes de irse, ¿Cómo se atrevía ese imbécil a hacerle eso? En esos momentos su desprecio por ese chico había aumentado, y con rabia espero al ascensor mientras le mandaba un mensaje a Logan; el cual no lee por estar ocupado cocinando.

 

—¿Quién era? —Logan estaba algo confundido por el estruendo en la puerta.

 

—Testigos de Jehová —con esas simples palabras sigue haciendo lo que le pidió Logan en primer lugar, hacer el postre y poner la mesa.

 

☕☕☕

 

A unos cuantos minutos de donde estaban Logan y Jaden, estaban las chicas en su auto de segunda mano, Elizabeth al volante y Danielle de copiloto con su celular en mano, esta le indicaba por medio de google maps el camino al edificio de Logan. Tan pronto Logan les envió su dirección, ambas no creían que ese chico rellenito de mejillas rosas y cabellera pelirroja, viviera en una zona tan costosa.

 

—Creo que es ese —a su lado Elizabeth escucha la voz de Danielle, mientras que esta señalaba un poco atónita el edificio de unos cuatro pisos de color blanco y con estacionamiento propio.

 

Tuvieron que identificarse en la entrada antes de buscar donde dejar su auto, con una actitud propia de película policiaca de los 90—. Vamos —camino a la puerta doble de vidrio que daba a la recepción, son interceptadas por una pálida mujer de cabello oscuro de prominente ceño fruncido.

 

—Muévete imbécil —espeta la chica enfadada con ellas, Danielle antes de apartarse es empujada a lo que su amiga responde.

 

—Se dice permiso, mal educada —la pelinegra ni se inmuta por las palabras de Elizabeth y sigue su camino.

 

—¿Qué le pasa a esa tipa? —pregunta Dani para ella misma, sin buscar respuesta realmente.

 

—Ignórala, andando —terminando de entrar y apreciar la recepción, sus pareces blancas, con la cerámica negra, y un mostrador con un guardia de seguridad que les pedía identificarse, al hacerlo este llena un hoja de visita y las registra para futuras visitas, cosa que también hizo en la entrada del estacionamiento, llamando en el proceso al dueño del apartamento. Después de que Logan confirmara al guardia este las deja seguir hacia el ascensor.

 

En el ambas chicas aun no salían de su asombro, hasta el mismo ascensor era mas lujoso que todo su apartamento. En medio de un silencio un poco incomodo, Danielle es la primera en hablar.

 

—Esto no parece el edificio de un estudiante —comentario que hace sonreír nerviosa a Elizabeth.

 

—Para nada, ¿Trabajara vendiendo drogas?

 

—¿Conocerá a tus contactos? —al decir aquello Elizabeth lo piensa un momento—. Era una broma... ¿Tienes contactos?

 

—No necesitas saberlo —justo al decirlo se detiene el ascensor en el ultimo piso.

 

Las recibió un pasillo de paredes blancas, cerámicas negras y algunas plantas decorativas, todo bien iluminado, con un aire moderno y sofisticado. Al llegar a la puerta A24, Elizabeth fue la que directamente toco el timbre esperando a que alguno de los dos saliera y les abriera, tuvieron que toco una segunda vez, cosa que hizo que Jaden abriera de golpe la puerta.

 

—Te dije que te largaras... —esta vez no miro la pequeña pantalla al lado de la puerta y con un tono de irritación le dijo aquello a las chicas, Elizabeth lo miro con un rostro ceñudo y serio, mientras que Danielle no sabia como tomar eso.

 

"Eres grande Jaden, hay que darte un premio por ser el idiota del siglo" fue lo que pensó automáticamente cuando vio quienes eran—. Lo siento, pensé que eran otra persona —aunque Danielle suspiro dejando el momento de confusión, esas palabras casi no convencen a su mejor amiga. Jaden se mueve a un lado de la entrada para darles paso al apartamento, cosa que hacen sin dudar…demasiado—, Bienvenidas al humilde hogar de Logan.




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