Coffee 21

Jaden estaba ansioso, habían decidido hacer un maratón de películas de terror para Halloween, no sabia porque estaba tan ansioso por ese día, tal vez era porque era su género favorito o era por ayudar a su mejor amigo con la chica que le gustaba. Aun pensando, su cabeza no pudo prestar atención a la clase de economía que estaba viendo y al final de la misma, no recordaba ni el tema que estaba tratando ese profesor en particular.

Justo ayer había conocido al hermano menor de Danielle, mucho más directo y cortante que su retraída hermana, pero podía ver algo en lo que ambos eran iguales; definitivamente sus lentes. Jaden paso por medio de sus compañeros de clase, la mayoría no le prestaban atención, las que mas le hablaban eran las mujeres, pero al ver el poco o nulo interés que tenia a las clases pasaron de él. Podía decir que ya estaba acostumbrado, la mayoría de amigos que tenia era fuera de la universidad, Logan y Jack sus mejores amigos, Hemish y André el par de amigos que calificarían como payasos, Danielle la única fémina que tenia como amiga, también podría nombrar a su hermano, pero no quiso. Al final Jaden caminando enfrente de todo el campus noto que los únicos amigos de verdad que tenía los podía contar con la mano derecha.

—Dios que deprimente… —suspiro y se volvió a encaminar para llegar a su trabajo. Olvidando por un momento la nota negativa en el parcial que tenia arrugado en su mochila.

En el autobús mirando las calles llenas de transeúntes pensó en las palabras de su amiga de lentes gruesos, estudiar fotografía, Jaden tenía cosas en la cabeza, una lista de prioridades y muy por abajo estaba el estudiar contaduría. Con eso en mente, decidió pensar seriamente en esa posibilidad e intentar cambiar de carrera.

Al llegar a la tienda de música pudo ver a Alice barriendo mientras tarareaba alguna canción pop del momento, a un Bobby ordenando los artículos y a una Danielle apenas llegando la cual lo saludo con una sonrisa que él devolvió gustoso. Ese día no era el mejor. Ahí es cuando su celular sonaba, mostrando un mensaje de uno de sus pocos amigos.

¿Quieres salir a beber este fin de semana?

No falta decir que casi al segundo de leerlo le respondió un cordial Sí, eso era lo que necesitaba, salir con sus amigos y olvidarse de todo y todos por una vez.

El resto de la semana paso sin pena ni gloria para ninguno, nadie tenia algo interesante que contar, apenas algunas cosas que Ethan decía o hacia, que eran compartidos por Danielle. Logan seguía tan adentrado en sus pensamientos que le encargo buscar las películas que verían el domingo, por un momento Jaden pensó que esa no era la mejor de las ideas.

Llego el fin de semana, tomo el autobús hasta cierta parte de Pimlico, hasta un bar deportivo bastante popular por las grandes pantallas y la cerveza casera que hacían, el licor y el ambiente era bastante bueno; claro cuando no jugaba un partido importante y los fans apostaban. Paso por el medio de la muchedumbre que veía partidos de futbol hasta llegar a la parte trasera donde tres jóvenes de no mas de veinte y tantos años hablaban animosamente.

El primero en notar al alto azabache fue un chico de pecas—. ¡Llegas media hora tarde! Ya nos bebimos dos cervezas Evans —alzando la botella llena que tenia en sus manos. Ese era Hemish Ferguson, de cabellera castaña abundante y ojos marrones grandes, conocido entre sus amigos como el suertudo con novia.

—Mucho tráfico —el chico al lado de Hemish le lanzo un par de trozos de maní a la cara.

—Ni carro tienes tonto —ese chico contesto aun entre risa y risa, tenia un bronceado perfecto, con unos rizos rubios abundantes y con su marcada descendencia brasileña, Thomas André Wembley o como le decían André, era el mas joven con solo veinte años, aun así era el que mas resaltaba.

—Dejen al niño en paz, le pediste permiso a tu madre para estar aquí ¿no? —el pálido que lanzo la pulla y se empezaba a reír, era el ya conocido Jack Spooner, de estura y complexión alta y cabello tan negro como la noche, palido casi leche, tenia tatuajes que cubrían su cuello y brazos, y aunque solo vistiese jeans clásicos y una camiseta blanca, era sin duda un seductor espécimen—. Amigo, deberías de considerar mudarte de la casa de tus padres, ya tienes trabajo.

—Solo díganme con quien me mudo y problema arreglado, mi sueldo no es tan alto como para decir “hey, me voy de este lugar”, todos mis compañeros de trabajo viven en casa de sus padres o con un compañero de piso —el tono con el que dijo los hizo reír un poco, pero Jack calló por unos instantes, tomando su cerveza en silencio—, Hemish no me dirá para vivir con él porque vive con su novia y por el culo del mundo, André vive en una residensia y tu Jack, compañero tu apartamento da asco —la mueca que acompaño ese comentario hizo que los otros dos se empezaran a reír escandalosamente.

—Pequeña mierda, la próxima vez que te emborraches no dejare que pises mi casa —Jaden se unió a la carcajada junto a Jack, en ese instante entendió algo, no importaba que no tuviera muchos amigos, ese trio de idiotas siempre le alegraban el día, la semana y el mes.

Empezaron a beber y hablar de como estaban sus vidas, no se habían juntado desde hacia semanas, principalmente por Hemish y André, ambos tenían complicaciones, uno por vivir a media hora de Londres sin auto no podía ir y ese privilegio solo lo tenia su novia, en el caso del segundo era porque quería darle todo su esfuerzo a la academia de baile y no quería descuidarse. Por otro lado Jaden y Jack, la JJ Couple, se juntaba cada semana a hacer cualquier cosa que se les pasara por la cabeza. Pero todos en esa mesa en la esquina de un bar sabían algo, sus problemas por momentos desaparecían cuando todos se juntaban a beber y comer.