Alessio
Estaba molesto y celoso, una mala combinación. Estaba molesto conmigo por ocultarle cosas y estaba celoso, porque sabía que había mejores hombres que yo, que no le tendrían secretos, o simplemente no harían locuras para tener un secreto.
El hecho que Ashley haya viajado a convencerme de no dejar el círculo, ya decía que estaba muy involucrada sentimentalmente y no solo ella. Emilia también me mandaba mensajes de dobles, sentí y fotos que no habría por respeto a mi relación y a ella.
Rouses estaba en el jardín, había celebrado el hecho de ganar en los votos, pero eso solo significaba una cosa más peligro para ella. Parecía que hablaba con alguien.
—¿Entonces vendrás? —Preguntaba ella
—Claro, estaré encantado, llevaré a Edward si no te importa
—Para nada, son bienvenidos
Me había olvidado del tipo inglés que, aunque tenía sus cosas, la amaba. Decir que no la amaba, sería mentira, lo hacía. Los había visto esos días cuando estuvo aquí. Ella actuaba diferente con él, eso no me gustaba. Me había acostumbrado a ser el único a que mirara. Fue mi error, el hecho de creer que eso no cambiaria.
—Te dejo
—Adiós, te quiero
—Yo también
Salgo de mi escondite, lo que la asusta.
—¿Qué hacías ahí? —Pregunta —¿Qué te pasa? Actúas raro
—¿Yo? Eres tú la que actúas raro —Lo había notado, mandaba mensajes, raro en ella
—Tengo mucho trabajo, he estado mandando correos. Tú te ves molesto
—Estoy cansado ¿No puedo estar cansado?
—Vale dejemos esto aquí —Dice y se gira a seguir pintando
Me acerco, y la abrazo por detrás, no quiero perderla, pero sé que en algún momento deberé decirle la verdad y tal vez la perderé. No, no lo permitiré, iba a luchar por ella.
—¿Sigues molesto por lo de Milán? No fue nada lo prometo. Nos seas celoso. Te amo, solo a ti.
Beso, su cuello, y restriego mi nariz por su cuello, llevándome ese olor dulzón que tiene. Me quedo ahí con ella, ideando una manera de libarme de mis demonios.
Rouses
La organizadora del evento de invierno está tomando nota de lo que necesita mientras hay una fila de chicas que adicionan para ser el ángel entre ellas, la tal Cedrina. No veo a la novia de Conrad.
—Elegiremos a la protagonista. Quiero a todas en una fila, por favor, vendrá alguien a elegir
Me siento. Miro la enorme fila. Qué estrés.
Alessio me da una botella de agua. Tomo la botella, cuando una mujer vieja entra. Me resulta familiar hasta que la ubico. Es la mujer de la feria, que nos dio el anillo. Miro a Alessio y él también parece reconocerla.
La encargada y le dice donde sentarse, la fila comienza moverse y poco a poco las chicas salen molestas. Camila me empuja levemente y la miro. Cuando la fila es pequeña y la encargada parece perder la paciencia. La mujer se para y sonríe.
—Ahí está —Me mira —El ángel reencarnado en cuerpo y alma
Miro detrás de mí haciéndome la tonta, pero no hay nadie más que yo. Maldigo para mis adentros.
—Al fin. Perfecto, deberemos encontrar a un buen demonio.
—Ella ya lo tiene a lado —Miro a la mujer —Dos almas destinadas a estar juntas, condenadas a sufrir, su amor nació en las sombras más oscuras, pero su destino fue sellado por las alturas.
—¿Quién, puede ser más clara?
—El demonio —Mira a Alessio —Su destino está sellado, y el cielo ya hablado. Salvarla no podrás de su inevitable final, más en la otra vida la podrás encontrar. El tiempo de despedirse llega niños
Alessio me mira y parece que algo le pasa por la mirada cuando pasa su brazo por mi cintura, su agarre es fuerte. La mujer nos mira, el lugar queda en silencio.
—¿Esto es parte del espectáculo? —Pregunta Camila
—No, en otra vida será
—Pero dijo que…
—Estar destinados no significa que van a estar juntos. Me retiro
La encargada nos mira y sacude la cabeza.
—Él no está inscrito en el club —Dice —¿Habrá impedimento?
Las cosas se ponen incómodas, la encargada me dice como debe ser la vestimenta que debo llevar. Camila anota todo mientras le preguntan a Alessio que ni siquiera ha aceptado a participar si sabe bailar bailes de salón.
—Será un repaso corto, después de poema, comienzan a bailar
La canción no es muy conocida o no la identifico, me ha costado seguir los pasos, cuando acabo la mujer dice que debemos regresar a repasar más. Salimos de ahí algo incómodos y se siente.
—Debe ser puro teatro —Dice Lucia —No se pongan así
—Sí, debe ser algo sin importancia
Quería creerlo, quería creer que solo era una historia, pero no lo sentía así. No lo sentía.
Camine con Alessio hasta el jardín, nos sentamos en una de las bancas y lo mire.
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Editado: 27.05.2024