Capítulo 31 : Impulso

7 meses después

Muchas cosas pasaron en estos meses, Candy adquirió más lectores en su libro, David se fue de vacaciones a casa de su tía, Sofía se fue de viaje a España con su familia, como no tenía nada que hacer en mi casa  en las tardes salía a pasear con Candy, en las mañanas jugaba videojuegos con Trent y en las noches videollamada a David y a Sofía.

Jessica vino para mi cumpleaños número 16 y la graduación de Joshuad, pero no duró mucho.     

Todo en iba bien en mi vida personal hasta ese día.

—Vamos a jugar, si yo pierdo hago lo que me pidas, si tu pierdes me dejas besarte.

—De ninguna manera Trent, tengo novia—Era unos de los últimos días antes de volver a clases, Trent me había invitado a su casa a jugar videojuegos y como no tenía otra cosa que hacer accedí.

—Es solo un beso, Candy no lo tiene que saber.

—No.

—Además es solo si pierdes.

—No quiero arriesgarme.

— ¿Qué pasa Turrón? Tienes dudas.

—No hay nadie más seguro que yo.

—Pues no tienes nada que perder, Turrón—Trent no me dejaría en paz hasta que accediera.

—Está bien, pero si yo gano basta de ser cariñoso conmigo, es raro y me incomoda.

—Hecho.

Empezamos el juego todo iba bien hasta que…

—Perdí.

—Prepara esos labios—dijo Trent poniéndose de pie para ponerle seguro a la puerta.

—Esto es imposible, hay que hacerlo otra vez, ¿Cómo rayos perdí?

—Eso te pasa por bajar la guardia en el último minuto.

—Trent no, quiero revancha, yo no pierdo.

—Siempre hay una primera vez para todo.

—Puedo darte otra cosa.

—No, y pondré el cronometro tiene que durar aunque sea 10 segundos.

Bueno, son solo 10 segundos.

—Arg, no vuelvo a esta casa.

—Cállate y ven.

Trent se sentó en el borde de la cama y yo me senté a su lado.

—Esto es raro.

—Para ti, para mí no.

Puso su mano en mi mejilla y entré en pánico.

—No puedo hacerlo.

—Terry, no te voy a violar, pero está bien, eres muy mal perdedor.

—Juguemos otra vez y si vuelvo a perder pues accedo.

—Dios, tu no tomas un no por respuesta.

—No.

—Está bien, juguemos otra vez.

Reiniciamos el juego, no hay manera de que vuelva a perder, pero me equivoqué porque volví a perder e incluso más rápido.

— ¡¿Cómo demonios perdí?!

—Porque actúas por impulso Terry, incluso cuando juegas, crees que tienes todo bajo control y no notas los detalles, lo obvio—puso los controles a un lado y se acercó a mi rostro—Por eso siempre perderás—me haló del poloche y sentí la presión de sus labios contra los míos, abrí ligeramente los labios y Trent se adueñó de mi labio inferior, sin darme cuenta le estaba siguiendo el beso, sus labios son suaves y su respiración pesada, de un momento a otro su lengua estaba dentro de mi boca y apretó el agarre en mi polo, sentí como una electricidad recorría todo mi cuerpo, pidiendo más, sin pensarlo puse mi mano en su hombro profundizando el beso, de pronto una larga sonó y Trent se separó de mi, mordiendo mi labio—10 segundos—susurró.

Miré el celular—10 segundos—lo solté y él me soltó, luego caí en cuenta de todo, estaba disfrutando besar a Trent Gutierres.

—Te dije que actúas por impulso—susurró Trent mientras me miraba.

—Ya me tengo que ir a mi casa.

— ¿Quieres que te lleve?

—No, voy a pasar a casa de Joshuad, ya sabes en frente.

Esto era tan incomodo y tenso a la vez.

—Gracias por la compañía y así.

—Cuando quieras.

Salí lo más rápido de la casa y crucé la calle, entré sin tocar.

— ¿Terry? ¿Qué haces aquí? —dijo Joshuad desde la cocina.

—Tienes que dejar de dejar la puerta abierta, voy al baño.

— ¿No le dirás hola a tu sobrina?

—Hola Tere—Tere movió su manita.

—Tío.

—El baño…

—Está en el mismo lugar de siempre Terry.

—Gracias.

Entré al baño, esto no me puede estar pasando, no con Trent.

Me lavé la cara y salí del baño.

— ¿Quieres un juguito? Solo tengo de frutas es el favorito de Teresa—preguntó Joshuad sentando en el suelo viendo las caricaturas con Teresa encima.

—Estoy bien.

— ¿De dónde vienes? No sabía que estabas cerca.

—Estaba en casa de Trent.

—Trent, aún sigo sin entender como son amigos, otra vez, pero bueno tú sabrás.

— ¿Puedes llevarme a mi casa?

—No—dijo Joshuad con simpleza—llama a mamá.

—Ella no sabe que estoy aquí.

—Es mamá, te encontrará.

—Joshuad, por favor.

— ¿Qué opinas Teresa? ¿Lo llevamos?

—Nop—dijo Teresa.

—Habló la dueña, así que ve pidiendo el uber o no sé.

—Me das dinero, al menos.

— ¿Le damos dinero Teresa?

—Shi.

—Mi billetera está en la mesa de mi habitación.

Fui a su habitación, sigo sin entender como es tan organizado, cuando de niños siempre tenía un desastre.

Fui a su mesa de noche, tenía una foto de Jessica y otra de Teresa en pequeños portarretratos.

¿La ama tanto? Bueno ya es ridículo que lo cuestione a este punto.

Cogí la billetera, en la billetera tenía una foto de las dos juntas, saqué el dinero del uber y un poco más.

—Ya me voy.

—Gracias por la visita sorpresa, me saludas a mamá.

Me agaché a despedirme de Tere— ¿Me das un besito? —Levantó su mano y me dio en la cara— ¡Au! —Teresa se rió—Malvada.

—Adiós, tío Terry.

Le saqué la lengua—Adiós niña rara, te quiero.

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De camino a casa, el beso volvió a mi mente, toqué mi boca, Trent besa muy bien, carajo, pensé que en estos meses su repentino enamoramiento hacia mi persona iba a desaparecer, pero estaba equivocado.

—Joven, ¿es aquí? —dijo el uber después de un rato.