Terror Nocturno.

Las apariencias engañan.

 Todo era muy confuso para Alice, con todo una coraza en su pecho decidió tomar el teléfono y ver la guantera del auto, al abrirlo sólo observó una foto de una joven que aparentaba tener poco más de 18 años, bastante bella y con una hermosa sonrisa.

 Alice presentía que algo andaba mal, ¿será que esta chica es la dueña de este auto?, ¿le habrá pasado algo malo?, ¿dónde estará?, todo esto se cruzaba por su mente mientras trataba de aclarar los hechos.

 Alice estaba paralizada y decidió llamar a la policía, mientras que estaba marcando los números escucha otro vehículo acercarse, interín en el que ella corre hacia su auto y toma una pequeña navaja de su guantera, claro, Alice era muy desconfiada y precavida.

 El auto se acerca más y más hasta llegar a Alice, ella se encontraba al lado de su puerta esperando que este otro sea alguien presto a ayudar, se detiene el coche y baja sus ventanillas, el conductor era un hombre un poco espeluznante, y por cierto era el mismo hombre del supermercado con el que se había encontrado. 

 El hombre dijo: - ¿Está bien señorita?.

A lo que Alice respondió: - ¿Sí, es usted el hombre con el que me encontré hace rato?.

  • - Sí, soy yo. Disculpe, mi nombre es Jason, me pareció raro ver su vehículo aquí estacionado en medio de la nada.
  • Alice: - Mucho gusto, me llamo Alice y me detuve a ver este auto que está aquí estacionado, al parecer algo le pasó a la dueña
  • de este coche.
  • Jason: El gusto es mío señorita. Bajaré a hechar un vistazo.
  • Jason bajó de su auto y estrechó las manos con Alice, se acercó al coche y observó que nadie había dentro, lo que también le llamó la atención.
  • Alice habló: - Estaba pensando en llamar a la policía, todo esto es muy extraño, uno no desaparece simplemente y ya.
  • Jason: - Tiene razón señorita, pues, me estoy dirigiendo a mi casa, mi familia me está esperando, lamento no poder quedarme aquí a ayudarla con este asunto.
  • Alice: - No se preocupe, siga su camino, yo estoy bien y ahora llamaré a la policía. Que tenga un buen viaje.
  • Jason: - Igual para usted señorita, tenga cuidado, ¿sabe?, le entrego mi tarjeta, cualquier cosa puede contactarme.
  • Alice: - Se lo agradezco mucho. 
  •  Y así el hombre se marchaba por la carretera hasta desaparecer las luces traseras del coche.

 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.