Terror Nocturno.

EL TERROR SE HACE CARNE.

Ingresando aún más profundo al bosque, los árboles parecían haberlo cubierto casi todo, apenas se podía observar luces provenientes de la carretera, Alice conducía y a la vez se decía a sí misma: - ¿ Cómo este hombre se conoce tan bien el camino con todos estos árboles alrededor?. Y aparte de esto el camino era bastante horrible, por momentos golpeaban la parte baja del auto mientras iban. Después de conducir por casi 20 minutos llegaron a lo que parecía ser una súper casa, de dos pisos, con una chimenea y muy lujosa a la vez. El hombre abrió el garage con su control y le dió la señal a Alice para que ingrese el vehículo allí. Alice accedió y metió el vehículo en el garage. El hombre bajó, él había dejado su auto afuera y se acercó a Alice diciéndole: 

  • - No sé como pagarle señorita, me gustaría ofrecerle un café o té si quiere, hace mucho frío aquí.
  • - No se preocupe, sólo quiero tomar agua si es muy amable, no debo perder mucho tiempo de mi viaje. Dijo Alice con carcajadas.
  • - Sí, como usted diga. Contestó el hombre.
  • Fueron hasta la cocina pasando antes por una puerta a través del garage. Todo era muy lujoso dentro de la casa, por la pinta el hombre era de negocios y varias propiedades. Aunque a Alice no le sorprendía nada de eso. En fin el hombre mencionó a Alice para regresarla hasta su coche y ella pues accedió.    Fueron hasta la entrada principal, al pasar por ahí Alice observó pequeñas gotas de sangre, se asustó, pero se atrevió a preguntar, disculpe ¿ eso es sangre?.
  •  El hombre totalmente pálido le contestó: Sí, es que mi esposa tiene trastorno bipolar y a veces se lástima ella misma, cuando la traje le agarró una crisis y se cortó con un cuchillo la mano. 
  •  Alice exclamó:- ¡Oh! Lo siento por usted, ¿pero ella se encuentra bien?.
  • - Sí, no se preocupe, ya le dí los cuidados necesarios. Respondió el hombre.
  • - Ahh, entiendo, disculpe. Dijo Alice. 
  •  Ambos caminaron un poco más hasta las escaleras que daban al suelo del bosque, bajaron dirigiéndose al auto, el cual se encontraba frente al garage, Alice de momento giró la mirada hacia su izquierda y vió una cartera roja muy elegante por cierto y papeles esparcidos por el suelo entre los arbustos que estaban en los costados de la entrada principal, de momento un escalofrío recorrió todo el cuerpo de Alice. ¿Esa era la cartera de la joven del auto varado en la carretera?, ni siquiera sabía si era una joven, tal vez la foto se había tomado hace tiempo, ¿acaso este hombre no era quien parecía ser?. Todo eso pasaba por su mente en segundos. Alice trataba de mirar al suelo para no levantar sospechas como si no lo hubiera visto, llegaron al auto, ambos abrieron la puerta y subieron. 
  •  El hombre había olvidado las llaves dentro de la casa, así que volvió hasta allí, Alice tenía mucho miedo, ¿qué decisión tomaría?, pero, de momento Alice observó en el 2ndo piso que la luz de una habitación se había encendido, a pesar de que tenía cortinas pudo ver lo que parecía ser una mujer amarrada a una silla siendo torturada por alguien. Alice se paralizó, comenzó a temblar, su corazón comenzó a latir más fuerte, tenía demasiado miedo, no sabía si correr por su vida, ayudar a esa mujer o actuar como si no hubiera notado nada para asi llegar a salvo hasta su coche y llamar a la policía para pedir ayuda. 
  •  Mientras tanto el hombre aún no encontraba las llaves, no recordaba dónde las había puesto. Alice quería llorar, gritar, pero ella sabía que nada de eso le ayudaría, no podía abandonar a aquella mujer tirada en ese lugar sufriendo, algo andaba mal en esa casa, lo presentía y conociendo a Alice no era de las que se dejaría intimidar. 
  •  Sabía que había sólo una opción y esa era sobrevivir, ella era un testigo prácticamente, el hombre la mataría en algún momento, entonces aprovechó que el hombre aún no venía, miró que había en el asiento trasero y no pudo notar nada útil, metió su mano por debajo del asiento del conductor y encontró un bate de béisbol, lo quitó y vió que estaba cubierto de sangre, soltó un grito leve: ¡ahhhh!, no puede ser, esto no está pasando. Estaba aterrada totalmente, temblaba hasta sus pies y no podía controlarlo. 
  •  Rápidamente bajó del auto y se escondió entre los arbustos, luego de unos instantes el hombre salió de la casa suspirando del cansancio de haber buscado tanto esas tontas llaves, bajó las escaleritas dirigiéndose al auto y en ese momento Alice le golpea con el bate de béisbol por la cabeza, el hombre cayó al instante en el suelo sangrando. No sabía si lo había matado o no, pero rápidamente agarró el celular que tenía en su bolsillo, también encontró una pistola y lo tomó junto con las llaves del coche. Agarró el cuerpo y lo arrastró hasta una sanja en el bosque, aunque como por arte de magia lo había encontrado, no estaba tan lejos de la casa. 
  •  Una vez hecho eso volvió hacia la casa donde se escuchaban gritos desgarradores, alguien gritando decía: ¡¡NO, POR FAVOR, YA BASTAA!!, ¡AUXILIOOOO!. 
  •  Alice temblaba de miedo, pero debía ayudar a esa mujer, lo que parecía ser un viaje tranquilo y divertido se convirtió en una pesadilla, estaba totalmente implicada en esto, si huía tal vez la mujer moriría y sería su culpa. 
  •  Se dirigió a la parte trasera de la casa y observó un coche que era muy "conocido", ¡era el auto de Jason!, ¿qué hacía su auto allí?, ¿ también estaba implicado?, ¿ era él aquel hombre que estaba torturando a la mujer?, Alice no lo sabía, pero pronto lo averiguaría.
  •  Ella se aseguró de que la pistola estuviera bien escondido en su cintura, vió que había una puerta trasera y decidió entrar, pero estaba cerrado, en ese instante se acordó de los celulares que tenía, suspiró y se dijo a sí misma: ¡Qué tonta eres!quitó uno de ellos y llamó a la policía, estaba tan asustada que se olvidó de que podía llamar a la policía.
  • La llamada fue contestada:
  • - 911, ¿EN QUÉ PUEDO AYUDARLE?.
  • - ¡AUXILIO!, HH--AAY UNA MU..JER EN..(ALICE TARTAMUDEABA).
  • - CÁLMESE SEÑORA, NO LA PUEDO ENTENDER ¿CUÁL ES SU EMERGENCIA?.
  • - ME ENCONNN..TRRÉ CON UN CARRO EN LA C...AARRETERA Y.... ( SE ESCUCHÓ EL SONIDO DE UN GOLPE).
  • - ¿HOLA? ¿SIGUE ALLÍ SEÑORA?... ( LA LLAMADA FUE COLGADA).




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