Terror Y Algo Más

Oscuros Hermanos

Había una vez en un pequeño pueblo rodeado de densos bosques, tres hermanos trillizos idénticos: Lucas, Mateo y Marcos. Desde su nacimiento, una aura misteriosa los rodeaba, una sensación inexplicable de que algo no estaba del todo bien.

Lucas, el primogénito, era conocido por su bondad y su alma pura. Siempre ayudaba a los demás y tenía un corazón generoso. Sin embargo, sus hermanos, Mateo y Marcos, eran todo lo contrario. Desde pequeños, mostraron una crueldad innata, disfrutando haciendo sufrir a los animales y a los otros niños del pueblo.

A medida que crecían, las diferencias entre los hermanos se volvían más evidentes. Lucas se convirtió en un joven apreciado por todos, mientras que Mateo y Marcos eran temidos y evitados por sus comportamientos sádicos y sus miradas frías y penetrantes.

Un día, durante una noche tormentosa, los tres hermanos desaparecieron misteriosamente. La gente del pueblo buscó en vano, pero no encontraron rastro alguno de los trillizos. Sin embargo, al día siguiente, Lucas regresó solo, desorientado y con signos de haber sido atacado. No recordaba nada de lo ocurrido ni dónde estaban sus hermanos.

Con el paso de los días, Lucas empezó a comportarse de manera extraña. Hablaba en voz baja consigo mismo, como si estuviera teniendo conversaciones con alguien que nadie más podía ver. La gente del pueblo empezó a murmurar que Lucas había perdido la razón, que la desaparición de sus hermanos lo había vuelto loco.

Pero la verdad era mucho más aterradora. En las profundidades del bosque, Mateo y Marcos habían sobrevivido, alimentándose de lo que podían cazar y volviéndose cada vez más salvajes. Su odio hacia Lucas creció hasta convertirse en una obsesión, una sed de venganza que los consumía.

Una noche, Mateo y Marcos regresaron al pueblo, decididos a acabar con su hermano bondadoso. La gente despertó con gritos de terror cuando vieron a los gemelos sádicos frente a la casa de Lucas, con miradas de locura en sus ojos.

Lucas, con lágrimas en los ojos, suplicó a sus hermanos que detuvieran su locura, que volvieran a ser la familia que una vez fueron. Pero Mateo y Marcos estaban demasiado poseídos por la oscuridad que los consumía.

La noche terminó en tragedia, con Lucas siendo encontrado muerto a manos de sus propios hermanos. Se dice que, desde entonces, los lamentos y las risas malévolas de los trillizos se pueden escuchar en las noches de luna llena, recordándole al pueblo la terrible maldición de los hermanos trillizos.

FIN 
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.