La obsesion de Epsilon

Mientras tanto Épsilon se hallaba en un inhóspito lugar de la galaxia Rises, su nave aterrizó en una pequeña luna donde los viajeros se hospedan temporalmente, al bajar de su nave se sorprendió al ver una nave de los primordiales, esta estaba en un bar, Épsilon decidió ocultar su rojizo cabello con unas telas y cuando entro al lugar, examino cuidadosamente quien o que especies estaban dentro, habían onixences, ovidianos, frestonianos y en la barra sentado bebiendo un trago, tal vez el dueño de la nave vista hace un instante.
—Un primordial— susurro Épsilon.
De inmediato se acercó a aquel Primordial y le dirigió la palabra saludando, admirándolo.
—Jamás conocí un primordial, dicen que son los seres más poderosos del universo—
—No soy uno de esos que nombras—
—¿Cuál es tu nombre extraño no primordial? — 
—Soy Seven renuncie a ser parte de ellos hace mucho tiempo, ahora vete. —
Lo examino de pies a cabeza y pudo notar un mechón de cabello rojizo del ovidiano.
—Ovidiano—
—Me reconociste, está bien soy.
—No te pregunte quien eras—
—Soy Épsilon Org y busco algo llamado Tertulia. —
—No tengo idea de lo que hablas—
—Los ovidianos hemos conquistado planetas por mucho tiempo, esto cambio por un tiempo, pero retomaremos estas prácticas a menos que haya alguien tan fuerte para detenerlos desde dentro. Por eso necesito encontrar la tertulia, el poder más grande del universo. —
—No encontraras esa cosa aquí, además los ovidianos están exonerados por la organización de los primordiales, pueden conquistar los mundos que se plazca, ¿Por qué quieres evitarlo tu ovidiano? —
—Porque si se siguen expandiendo será más difícil reinarlos, no es por presumir, pero seré el próximo emperador y debo tomar estas decisiones —
—Divulgando tus planes no llegaras lejos, hijo—
—No importa, ese poder no cualquier lo puede poseer y yo sé cómo. —
—Escuchen todos—Épsilon alzó la voz en el bar dirigiéndose a todos.
Busco una batería, le llaman tertulia si alguien sabe algo puede decírmelo le pagare muy bien.
—¿De qué clase de batería estamos hablando? —
Un gentío lo arrinconaba pidiendo más explicación sobre lo que deberían de buscar, el precio era la cuestión constante de los murmullos de la muchedumbre.
—Bien hecho, suerte con eso Ovidiano—

El parlamento planteaba atacar posibles planetas que se consideraban necesarios y que sus habitantes no hacían provecho del potencial alimenticio de estos, en un lapso de un par de semanas, las flotas de ovidianos se preparaban con un arsenal armamentístico de nivel cinco. Ya que muchos de estos ovidianos provenientes de exoplanetas no eran poseedores de los llamados poderes supernaturales. Además, el emperador había negado la ayuda para esta misión, algunos de los soldados que tenían estos poderes fueron vetados a participar. Cuando la flota de soldados ovidianos llegaron al exoplaneta Xenón donde sus habitantes son de cuatro brazos y de color verde claro les fue fácil la conquista, también quisieron conquistar un planeta cerca de un agujero negro donde sus habitantes son una clase de rocas y lava pero las armas de los ovidianos eran de nivel cinco similar al nivel poder destructivo que tienen los ovidianos con poderes supernaturales, cuando quisieron conquistar un planeta luna habitable lleno de vegetación se llevaron la sorpresa que habían evacuado el lugar.
—Señor —grito uno de los soldados.
—Aquí no hay nadie, fue evacuado hace solo dias talvez, era base militar, de vigilancia, ya revisamos todo y no hay bitácora archivos o tecnologia. —
—Nos evitaron, fueron muy listos, mejor para nosotros, ¿quiénes vivían aquí? —
—Los Vitalosenses seres muy pequeños que no se callan jamás. —
—¿Tu eres de aquí soldado?
—¿Como? —
—! Nada, busquen un buen suelo y armen la colonia ¡—

Los vitalosenses eran un especie extraña de insectos que hacían mucho ruido, y muy inteligentes habían evacuado el lugar antes de que los ovidianos llegasen, la base militar en esa luna era de vigilancia, y al enterarse que los ovidianos empezaron a conquistar otra vez después de mucho tiempo, corrieron a avisar  a los demás mundos lo más rápido posible y lo hicieron, comunicaron a todos los exoplanetas posibles, el caso fue llevado a la corte universal de los primordiales, una de miles en toda la galaxia Rises estaba localizada en el planeta congelado Pagomeno donde las temperaturas eran tan bajas que los primordiales responsables de ese cuadrante en su jurisdicción se reúnen en un volcán en el interior de aquel planeta, el caso fue entregado por cientos de representantes de planetas que posiblemente los ovidianos planeaban conquistar, siguiendo las reglas el caso no fue aceptado porque los ovidianos no pueden quedarse en un solo planeta, su fuente supernatural de vida debe consumir grandes cantidades de alimento y están exonerados por los primordiales.
Enfadados se marcharon los cientos de representantes, aseguraron que ellos mismos se encargarían de los ovidianos. Uno de los vitalosenses se acercó a un primordial al acabar la asamblea.
—¿Poque? ¿porque los ovidianos tienen prácticamente su protección? —
—Cuando son destructivos otros mundos son destruidos por ustedes primordiales con su famosa frase de preservar la vida en el universo.   
El vitalosense estaba furioso todos estaban viéndolo, escuchando lo que decía, estaba en la mira de todos.
—Escucha —dijo el primordial.
—Hay una guerra pendiente más grande de lo que todos creen estos problemas son minúsculo comparado lo que podría suceder si los primordiales y los ovidianos combatieran por eso los necesitamos, ellos y nosotros son el equilibrio del universo, pueden defenderse, pero se nos prohíbe intervenir, es parte de la naturaleza que el más fuerte sobreviva, lo siento la asamblea de los primordiales ha hablado. —

Una noche muy lluviosa sobre el castillo arribo por fin la nave de Épsilon que después de mucho tiempo no encontró ningún indicio de los que buscaba, al llegar lo primero que hizo fue visitar a su padre el emperador, que estaba en cama, los guardias lo dejaron pasar.
—Padre he perdido el tiempo buscando algo. — 
—La tertulia— menciono Kappa Org.
—Creo que ya habías estado perdiendo el tiempo antes de obsesionarte con eso, les dije que no debían de hacer nada más que traer esos documentos no esculcarlos. —
—Pero los exoplanetas hacen lo que quieren, ya no nos obedecen, no los gobernamos. —
—Ya no los gobiernas—
—Me puedes decir algo, al menos una pista de cómo usar ese poder que dicen los pergaminos. —
—Olvídalo jamás podrás usarlo, tampoco para gobernar a los ovidianos. —
Épsilon estaba poniéndose nervioso, exhausto e iracundo, recorrió media galaxia y devuelta, no encontró nada.
—No lo entiendes los primordiales cometieron un error, IAN se puede controlar, pero necesitamos a su batería, la tertulia. Ellos jamás me dirían acerca de… —
—Olvídate de este asunto, hice bien al elegir a tu hermano como mi sucesor, jamás podrías ser un buen gobernante. —
—¿Elegiste a Ipsilum mientras no estaba? Padre —
—No oficialmente, él no lo sabe yo acabo de decidir en este momento. —