Clara Mashbord
Llegué a la preparatoria minutos después que Brad y curiosamente antes que el autobús, es raro que el autobús llegue tarde. Vi la hora desde mi teléfono y, eran las 6:50 a.m, y el autobús llegaba justamente a las 6:30 a.m, veinte minutos antes de entrar a clases, ¿que habrá pasado?. Esa pregunta rebotaba por mi cabeza una y otra vez, ¿acaso se perdieron? ¿Jood y Lucas se golpearon hasta morir? esos pensamientos fueron interrumpidos por mi mejor amiga, y sí, la trilliza, Maddison Fllings.
-¡HOLA! ¡ESPOSITA!- Grita haciendo que dé un leve brinco, asustandome.
-Hola pelirroja- Dije sin entusiasmo alguno, era el primer día de secundaria, lo cuál, no me emociona tanto, es uno de mis días menos favoritos. Vi que sus pecas eran las protagonistas en su palido rostro, las unicas que resaltaban, a parte de sus ojeras, ¿Se había desvelado? ¿Se quedo viendo Riverdale toda la noche? Era lo mas probable, la pelirroja estaba muy enamorada de esa serie, no por la trama, si no por los actores, más por Jugheat Jones, conocido como Cole Sprouse, por ellos se desvelaría toda una semana. Sus ojos de tonalidades verdes hacen que resalte su cabellera roja, es realmente atractiva.
-Vez, eso es lo que me gano por rrogarte, a veces me canso de ser tierna contigo. No puedes responder con un siemple ''Hola diosa pelirroja hecha por los Dioses mismos, ¿Como te encuentras hoy?'' ¿te cuesta tanto decir eso?- Preguntó con cierta frustración, encíma su hermano me había hecho sentir la peor persona del mundo ¿Ahora ella también? por algo son hermanos.
-Pues ''esas simples palabras''.- Hice comillas en el aire -Son palabras que estan fuera de mi vocabulario y lo sabes, ¿Por qué te desvelaste?- Pregunté directamente y ella de inmediato coloco una cara de nerviosismo.
-Ya sabes..amm..viendo Riverdale...-Sus ultimas palabras fueron un susurro que obviamente no queria que escuchara pero lo hice.
-Lo sé, no tienes que apenarte por eso, te conozco muy bien, pero debes dejar esa obsesión por personajes que no existen Madd- Digo tratando de hacerla entrar en razón, tal vez así no se desvele más.
-¡OYE! es el mismo amor que tu sientes por tus personajes de libros...¿Como se llamaban? ¡Ah sí!, literarios, es lo mismo que t..-Antes de que terminará, la interrumpí, no se podía comparar a mis personajes literarios, ¡ELLOS SON SUPERIORES! ¡EN TODO!.
-¡No es lo mismo!-Chillé- ¡Nunca compares a Flavio Marsh y Ben Crely con tus personajes de peliculas! -Dije caminando hacía los pasillos de la secundaría. ¿Enojada? yo diría mas bien...indignada, cuando hagan una película de mis personajes literarios, la entenderé.
-No te enojes esposita, yo nunca los compararía...-Dice dandomé algunas palmadas en el hombro derecho para después hablar-: Pero sabemos que son mejores que los literarios- Dijo y la fulmine con la mirada, ¿Por qué no la he matado? porque sus hermanos me fastidiarían el resto de mi vida. Aunque eso ya lo hacen.
-Retracta...-No me dejo terminar, cuando dijo:
-¡Adiós! ¡me tengo que ir, tengo clase de historia y no quiero llegar tarde!- Dice dando algunos pasos hacia atrás y luego correr -¡NO QUIERO QUE LA PROFESORA KARLY ME REPRUEBE!- Gritó. No me quedo mas opción que esperar a esperar las 7:00 a.m para poder entrar a mi clase, Brad se había perdido con sus amigos y no pensaba buscarlo.
Fuí directamente a mi casillero, busque la pequeña llave en mi mi mochila, pero para mi mala suerte, no estaba.
Maldije de mil maneras posibles, y busque un millón de veces, pero no la encontré. Golpeé levemente el casillero mientras pensaba que hacer, ahí estaban mis libros de matemáticas y fisíca. Las clases que me tocaban hoy antes de medio día. De la nada apareció una mano posandose a 1 o 2 casilleros del mio, me volteé para poder ver a la persona que estaba ahí parada, pero la cara que ví, no me agrado para nada.
-¿Buscabas esto?- Dijo el pelirrojo sosteniando la llave de mi casillero, así es, pelirrojo, el otro hermano de Brad, el primer trillizo, Adám Fillings. Él y yo tuvimos una relación....amorosa..pero Mad y Brad, no saben absolutamente nada.
-¿Por qué la tienes?- Pregunté confundida.
-El fin de semana que fuiste a casa, la dejaste en el comedor, la vi... y la guarde- Dijo, trate de buscar algun toque de mentira en su mirada, pero fue inútil, sus ojos color marrón combinado con rojo tenían aquel brillo que tanto me encantaba y que no podía dejar de ver, creo que esas son una de las razones me enamore de él, pero no estaba mintiendo. En su mirada lo sabía.
-Hasta que por fin me hablas, luego de 4 meses, que curioso ¿No?- Dije con ironía. Le arrebate la llave y abrí mi casillero buscando mis libros.
-1. tu me evitaste y 2. quería disculparme, fue un mal entendido, pero...quiero arreglarlo y que más, con disculparme e invitandote un helado - Confesó con una sonrísa lobuna. Era tierno.
-Tienes novia- Solté con inconsciencia, sin siquiera pensar lo que dije.
-Lo sé pero..-No pudó terminar su frase porque una voz aguda que venía hacía nosotros, gritó.
-¡OSITO! ¡¿QUE HACES CON ELLA?!- Gritó la peli negra de ojos azules viniendo rápidamente a nosotros, estaba furiosa, y celosa, eso era seguro.
-¿Osito?- Pregunté con un poco de burla, y él solo la ignoro.
-Te pregunté, ¿que haces con ella?- Volvió a preguntar con un tonó sumamente controlador, colocándose las manos en la cintura. Su mini falda de porrista hizo que todos los chicos se enfocarán en ella y en la escena que estaba ocurriendo.
-Vaya, vaya, miren lo que trajo la marea, la mismisíma Ibom Fresheon, ¿que te trajo por aquí, vívora asquerosa?- Dije mientras la miraba de pies a cabeza y se escuchó, el típico ''Uhh''. Me miró indignada posando su mano derecha en su pecho mientras me exáminaba de la misma manera.