El Cuerpo Seguidor

Parte I

De camino por una senda oscura a casa,
Me encontré con un antiguo cementerio.
Parecía haber estado ahí siempre, 
Pero yo jamás lo había visto.

Algo estaba muy mal en ese lugar,
Ahora sé que nunca debí haberme acercado.
Todas las tumbas habían sido profanadas.
Todos los cuerpos que ahí descansaban, ahora ardían,
Apilados en una inmensa hoguera.

Algo lleno de vileza había estado en ese lugar
& por alguna razón destruyó este reino de muertos.
El olor a quemado viciaba el ambiente,
Como si las almas mismas crujiesen como brasas.
Las cenizas todavía levemente tibias me cubrían
& eso me sacudió tan duro,
Que podía sentir que perdía la fuerza.

Traté de irme, pero una voz me llamó.
Al girarme, encontré una sombra de pie frente a una cruz.
Aquella me miró & con su dedo me señaló,
Entonces lo supe, ella me hacía responsable de todo este horror.

Mientras yo temblaba por tal acusación,
La sombra desenterró algo de la tierra, 
Un cuerpo que no había sido destruido.
Sus ojos se abrieron, revelando el vacío de su interior,
Pero aún así llevaba consigo un intenso odio.
& sin más comenzó a andar tras de mí.

Parte II 

Ese cuerpo me sigue incansable de día & de noche,
A dónde sea que voy, está ahí presente.
Por más que corro,
Siempre sabe en dónde encontrarme.
Siempre escucho sus pasos,
Incluso a través del más sonoro estruendo.

Por más que suplico no me escucha ni razona.
Sólo escucho de él algunos murmullos,
Pero nunca me dice nada.
No hay arma humana que pueda detenerlo.

Me refugio en la oración,
Pero no sirve de nada. 
Por más que juro mi inocencia,
Él no cesa en su incesante acoso.

Este tormento no se detiene en ningún momento,
Ya ni siquiera puedo dormir una noche entera.
M vida se desmorona,
Hasta mi cordura se tambalea.
Me atrapa la paranoia de no saber
Qué pasará conmigo cuándo por fin me alcance.

La sangre se me congela,
Cuándo veo su silueta a través de la ventana.
Su mirada sin expresión está atrapada en mis pesadillas.
Siempre escucho su respiración irregular
Provenir de algún lugar desconocido.
Siempre me encuentro asediado
Por el incesante martilleo de sus pasos tras de mí.

Después de días & días de incontables desdichas,
El temor ya se ha fundido con mi corazón.
Cómo podré librarme de esta maldición.
Cómo podré demostrarle a la muerte que esto fue un error.

Toma mi alma de una vez o déjame en paz,
No puedo seguir corriendo por el resto de mi vida.
Castígame o libérame de esta injusticia,
Ya estoy muy cansando de esta absurda persecución sin fin.

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